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Narra Ansu : Siento una mezcla de emociones que nosé como expresar. Me decepcionó el hecho de que Sofía esté embarazada de otro. Me enfureció saber que el hijo de puta que la embarazó la dejó sola con esto, aunque ella se muestre que no le importa, sé que le afecta. Y por último me siento feliz de poder tener a Sofia sentada a mi lado y apoyada en mí. Según dijo pasó una mala noche porque la bebé no la dejaba dormir y ahora se quedó dormida. Suavemente saco mi brazo y la abrazo. Esta mujer cada día está más preciosa, sobre todo con esa pequeña barriguita que sobre sale de su camiseta . Acaricio su tripa y ella se acurruca más en mi pecho, y aunque lo hace inconscientemente, me encanta. Noto que la pequeña bebé se mueve y nosé porqué razón me hace sentir emocionado, no es mi hija ni Sofía mi mujer. La llevo en brazos dormida a su cama y salgo rápidamente de su casa o terminaré confesandole todos mis sentimientos. Llego a mi casa y Ángela me está esperando furiosa.
-¿Te fuiste corriendo detrás de ella?- pregunta con los brazos cruzados en su pecho.
-Solo me preocupé por ella, recuerda que ella era mi amiga- le respondo cortante.
-Era... tú lo dijeste, ella es pasado- dice y se le quiebra la voz- ¿nos vas a dejar por irte con ella?
-Ya deja el drama Ángela, estoy aquí con vosotros , fuí a verla porque le tengo mucho cariño y...- y no puedo continuar porque comienza a llorar mientras chilla. La abrazo para calmarla.
-Creo que deberíamos separarnos si la amas a ella- dice cuando se calma y quedo en shock.
-Nosé de qué hablas y sinceramente deberías dejar de inventarte historias en tu cabeza, pensé que no eras celosa- intento bromear y ella sonríe un poco.
-A veces el amor es complicado al lado de la persona incorrecta...- susurra apoyada en mi pecho pero antes de que pueda preguntarle me interrumpe- ¿me llevas a la cama?, estoy cansada- dice haciendo un puchero y sonrío. A veces me sorprende lo buena mujer y paciente que es conmigo.
Pasan los días y las cosas mejoran poco a poco. Ángela y nuestro pequeño cada día están mejor y mi relación con Sofia la recuperamos en tan solo unos días, aunque sin descuidar a Ángela y mi bebé. Con ella vamos a casa de mi madre a comer, que aún no termina de convencerse con Ángela por celos de madre, la recibe en casa igual. Vamos bajando el ascensor y se para en el piso de Sofía , las puertas se abren y entra una preciosísima Sofía , pero viene un un idiota que nunca había visto.
-Hola- dice Sofía amablemente y Ángela le mete conversación, como siempre. No dejo de mirar al chico que viene con ella, parece incómodo. Nos despedimos de ello y al subir al coche Ángela empieza con sus tonteras.
-Que guapo que el amigo de Sofía viene a por ella y la invite a comer, yo no tengo amigos así- dice con tristeza.
-Pero tienes a tu familia, a tu madre, y también me tienes a mí- digo sin tomarle mucha importancia- aunque me parece un poco extraño el amigo.
-Tú siempre desconfías de todos amor, eres muy sobreprotector- dice riendo y prefiero no responder, mi instinto me dice que no soy de celos, solo me dice que ese chico no trae nada bueno y no quiero que le hagan daño a Sofia - ya es hora que Sofía encuentre un amor que la quiera, que la apoye y la valore, creo que es una buena chica- en este momento solo quiero ahorcarla y que se calle. Aún siento cosas por Sofía y pensar que ella algún día estará con otro compartiendo su vida, me revuelve las tripas. No quiero pero no puedo hacer mucho, estoy con Ángela y no puedo dejarla.
Narra Sofía : -¿En qué piensas?- me pregunta Diego. Me invitó a comer y obviamente acepté. Llevo días con antojo de pizza y no había querido salir a comer sola. Me saca de mis pensamientos... ver a Ángela tan feliz junto a Ansu me da cierta envidia, no lo puedo negar, y Diego a estado para mí todos estos meses desde lo que ocurrió con Manuel. Se preocupa por mí, me cumple los antojos de vez en cuando y me soporta cuando ni yo misma me aguanto. Hace un par de meses Diego me habló de sus sentimientos, que estaba muy arrepentido y avergonzado por todo lo que pasó hace años y que aún siente cosas por mí. Ese día entré en pánico, no sabía qué hacer y terminé llorando porque sí y porque no, las hormonas me tienen muy mal. Le e dado muchas vueltas al asunto y creo que es momento de darnos una nueva oportunidad.
-¿Aún sientes algo por mí?- le pregunto y comienza a toser- no te me mueras eh.
-¿A qué viene esa pregunta?- dice ya más calmado.
-Solo quiero saber si aún tengo una oportunidad contigo- le respondo y me mira asombrado.
-¿Estás segura?- dice aún sin poder creerlo.
-Sí...- respondo acariciando mi tripa abultada mientras mi nena se mueve- nos cuidas, nos mimas, me soportas el mal humor que tengo a veces, nos quieres y... - no puedo seguir hablando porque Diego se me pega y me besa. Me encanta como besa éste hombre. Me hace sentir querida, protegida y esa sensación de paz hace meses no sentía.
-No sabes cuánto esperé esto, sé que es muy pronto pero nunca e dejado de amarte, eres el amor de mi vida y junto a esta pequeñita serán mi familia- dice acariciando mi tripita y yo solo lo abrazo. Necesitaba sentir que alguien me quiere de verdad. Comemos entre risas y besos, caminamos cogidos de la mano, cualquiera diría que somos dos enamorados con una pequeña en camino.
-Sofia ... ¿quieres volver a ser mi novia?- me pregunta Diego y nosé qué responderle, creo que es demasiado pronto para dar ese paso.
-Yo... no lo sé Diego, me gustas mucho pero y si mejor esperamos a ver como se nos dan las cosas...- le respondo y veo tristeza en su mirada.
-Entiendo- dice cabizbajo y sigue caminando de mi mano, pero en silencio- vamos a casa, ya se hace tarde y no quiero que os resfriéis - caminamos en silencio y en verdad su carita de tristeza me hace sentir mal, yo no quiero hacerle daño, es la única persona, aparte de Paula y Ansu que solo son mis amigos, se preocupa por mí y siempre está para mí. Al llegar al portal de mi edificio Diego se detiene.
-Sana y salva en casa- dice despidiéndose.
-¿No quieres subir?, tengo galletas de esas que te gustan- le digo para que se quede. Nosé porqué pero no quiero que se vaya, no así.
-Será otro día - me dice con media sonrisa en su cara, pero lo conozco, no me convenze
-Sí quiero ser tu novia- le digo y él me mira fijamente- eres quién siempre a estado para nosotras, te adoro y quiero que nos demos una nueva oportunidad.
-¿Estás... estás segura?- me pregunta y aunque no lo estoy, asiento con mi cabeza- ¡dios!, no sabes cuántas veces he soñado con esto- dice Diego y comienza a darme besos en toda mi cara haciéndome reír, hasta que me besa los labios intensamente y mis hormonas se revolucionan más de lo normal. Llevo varios meses sin tener sexo y las hormonas con el embarazo no ayudan mucho.
-¡Ay que tiernis!- escucho que dicen a nuestro lado y al separarnos lo primero que veo es el rostro serio de Ansu , y a su lado a Ángela más que sonriente- que bonita pareja hacen ¿verdad amor?- le pregunta a Ansu que no se mueve ni responde- deberíamos cenar los cuatro, así como una cita doble, ¿os gustaría cenar hoy con nosotros?- pregunta Ángela y Diego me abraza por la cintura.
-Será para otra ocasión, hoy nos toca celebrar solitos como novios- dice y besa mi mejilla. Ansu arruga el entrecejo y nosé qué decir, hace unas semanas me había preguntado por Diego y solo le dije que éramos amigos nada más.
-Ya dejemos a los tortolitos solos, tienen cositas que hacer- dice Ángela con una sonrisa pícara y Ansu solo nos mira mal y comienza a caminar, creo que se enfadó por no contarle antes lo de Diego.
