fourteen .3

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jaemin pensaba que tendría que ser imposible sentir tantas emociones juntas.

vergüenza, miedo, confusión, tristeza, perplejidad, incertidumbre.

¿ahora que debía hacer? no sabía por cuanto tiempo jeno había estado mirándolo, pero el rostro del mayor no mostraba ninguna expresión.

—yo...yo

pronto sintió como su voz se quebró, y sus ojos nuevamente comenzaban a llenarse de lágrimas. vio como jeno se levantaba rápidamente de su lugar y se acercaba a el, quien se alejó algo asustado. estaba totalmente jodido. jeno le diría a wonyoung, wonyoung a sus padres, y todos lo odiarian, sería la vergüenza de la familia. de todo seúl, de la escuela. ¡de todo corea!

—ey, ey, ey. —jeno tomó la cara de jaemin con sus dos manos, sin ninguna mala intención, aunque eso hizo que el menor se desesperara más. —no quería asustarte. ven aquí.

jeno parado era un poco mas alto que jaemin sentado, envolvió sus brazos por sobre los hombros del pequeño y con su mano derecha acaricio lentamente su cabello y parte de su oreja. jaemin seguía sollozando y no había devuelto el abrazo, pero estaba muy ocupado pensando en lo que era tener tan pero tan poco espacio entre el y jeno. sentir el calor y el corazón descontrolado de jeno a traves de esa camisa fina y cara. su olor... todo eso lo hacia sentirse peor, todo eso lo hacia desearlo más.

—no te preocupes, jaemin. —jeno quiso tomar la cara del menor para mirarlo, pero este simplemente agachó la cabeza. ―mirame, pequeño.

sus ojitos estaban hinchados de tanto llorar en el día, aún caían lagrimitas y serim se dedicó a limpiarlas con su mano sin lastimar la cara de jaemin. sus rostros estaban casi pegados, tan cerca que casi se podía notar la diferencia en las respiraciones de ambos.

—no quiero que te sientas mal, uno no puede controlar lo que siente. jaemin no contestó. —¿puedes decir algo?

—¿que deberia decir hyung? estoy muy-muy avergonzado. —jaemin estaba a punto de llorar de nuevo. parecía que llorar era su especialidad.

—¿por que avergonzado?

ambos aun no se habían movido de la posición en la que estaban, jeno aún acariciaba el cabello de minie.

—por favor, no me haga explicarle. —jaemin rio sarcasticamente. — es....literalmente obvio.

—¿que me voy a casar con tu hermana?

de verdad, ¿debía decirlo así? ¿tan directo?

jaemin quiso llorar nuevamente y lo miró medio obvio.

—me siento muy muy avergonzado y confundido. —dijo jeno.

jaemin giro su cabecita confundido.

—¿por qué estaría usted confundido? ¡yo soy el confundido aquí! —se quejó indignado jaemin, dejando la vergüenza atrás.

jeno se enderezo y tiró su cabeza hacia atrás, sus manos aún seguían detras de la cabeza de jaemin, acariciandolo inocentemente. largó un gran suspiro y miro a jaemin.

—¿quieres olvidarte de tu primer beso? —la voz de jeno tembló.

—¿que dices?

—jaemin se levantó alejando a jeno de el, quien lo miraba fijamente. jeno tragó y camino unos pasos hacia el, haciendo que jaemin nuevamente se sentará.

—tu tuviste un terrible primer beso, yo te gusto. déjame besarte. —dijo jeno, determinado. ni siquiera sabía como esa idea había salido de su cabeza. estaba totalmente desquiciado, una gran parte de si queria admitir que si, que se sintió halagado por saber que jaemin gusta de el, y eso, tal vez, apretó sus botones equivocados.

—h-hyung. —jaemin se paró. —no, esta loco. eso esta mal, p-por mas que yo le diga que si, esta mal.

—¿entonces vas a decirme que si? —jeno lucía seguro de si mismo, con una sonrisa coqueta se acercó los pasos que lo habian separado de jaemin cuando este se paró, nuevamente volvió a sentarse.

—solo por hoy. —dijo jeno. —solo por hoy déjame besarte.

jaemin agachó la cabeza y suspiró para luego con sus dos manos peino su cabello largo hacia atrás. sentía como lentamente su cuerpo se tensaba y su piel comenzaba a erizarse, no había forma de que esto fuera real. simplemente no habia forma, jeno frente a el, pidiendole permiso para besarlo. y la cabeza de jaemin estaba partida en dos lados.

"si, dile que si, obvio que si, debería darte vergüenza las veces que imaginaste que esto sucedía. ¿vas a decir que no ahora? es una oportunidad única, dile que si antes de que se arrepienta. gallina, kikiriki"

"¡NO! ¡ABSOLUTAMENTE NO, NA JAEMIN! ¿cómo podría estar esto bien? el es mayor de edad, prometido de tu hermana. luego de esto tu relación con jeno va a ser confusa si no es que mueres de la tristeza cuando jamás puedas volver a besarlo. soy tu mejor opción, inútil"

jaemin tragó en seco y jugó con los dedos antes de mirar a jeno, quien esperaba ansiosamente una respuesta, positiva, si tenía suerte.

—s-si. hágalo.

jeno sonrió y terminó con el espacio que había entre ellos dos, lo abrazó y llevó su cara hacia el cuello suavecito y calentito de jaemin. el menor no tardó en retorcerse por las cosquillas, sonrió e intento que el mayor no lo notara.

—si algo no te gusta, te alejas.

y con eso comenzó.

jeno presionó sus finos y húmedos labios sobre el cuello de jaemin, besó su mandíbula y dejo otro beso sonoro sobre su oreja. paso su nariz por las mejillas de jaemin, como si estuviera acariciandolo, tentandolo. se separó lentamente y miro a los ojos del menor, sus pupilas estaban dilatadas y parecía como si las lágrimas se acumularan.

por otro lado, jaemin estaba seguro de que esa sensación era lo mejor que había sentido en la vida, los labios de su mayor sobre su oreja, su punto débil. lo que hizo que pronto sus ojos se llenarán de lágrimas en respuesta a lo bien que se sentía y a lo impaciente que estaba.

jeno puso ambas manos sobre las rodillas de jaemin y las separo para estar mas cerca de el, sin dejar de mirarse y jaemin sin intenciones de romper ese contacto visual que gritaba: "¡besame ya!"

jaemin abrió lentamente su boca, y si, jeno lo tomo como una invitación.

ladeo su cabeza y se adentró a la boca de jaemin, podía jurar que vio estrellitas cuando ambas lenguas chocaron, la inexperta simplemente estaba quieta, esperando a que lo guiaran.

quiso reir al ver lo tenso que estaba jaemin, quieto como una piedra.

—sueltate, bebé.

jaemin rápidamente tomó el labio del mayor con los dientes, sin dejarlo ir hasta que jeno rio impresionado, hasta que casi se desmaya cuando el menor lamio su labio inferior, sin descaro alguno.

sus bocas volvieron a juntarse y en la cocina sólo se podían escuchar los ruidos de aquel beso que se había tornado desesperado. jeno quería más, quería encontrar la forma de que su cerebro entendiera que no había manera de que ese beso fuera mejor de lo que ya era. jamás pensó que un beso con el pequeño inexperto, jaemin llevara su lengua por los lugares correctos -si es que había lugares correctos.- sabía como hacerlo.

ambos querían más, y ambos sabían que después de esto estaban totalmente jodidos.

desearás al hombre de tu hermana. ★!! nominDonde viven las historias. Descúbrelo ahora