Tokyo Revengers One-Shots🔞 (Editando)

𝕂𝕒𝕫𝕦𝕥𝕠𝕣𝕒 ℍ𝕒𝕟𝕖𝕞𝕚𝕪𝕒

Luego de salir de aquella endemoniada fiesta que había organizado Baji, tu grupo de amigos y tú, salían rebotando de aquel departamento, unos sujetando a los otros mientras te preocupabas de que Kazutora no fuera a golpear a alguien. -Mierda Tora... Compórtate aunque sea una puta vez en tú vida- Dijiste en cuánto lo escuchaste buscar pleito a Nahoya.

Kazutora te miró con mala ostia, chasqueando la lengua para finalmente soltar del cuello al del pelo naranja. -Pog estah vesh te librach puto angodon de azucad- Si, Kazutora estaba totalmente ebrio. No era algo normal de ver, pero daba gracia.

Pasaste uno de sus brazos por tus hombros para poder caminar con él, más bien. ARASTRARLO. Kazutora dio una medio sonrisa al dirigir sus ojos a tus pechos. -Queh buena vishta- Dijo mientras los miraba fijamente. -Nunca cambias...- Rodaste los ojos viendo cómo el resto se alejaba. -¿Dónde carajos dejaste tu moto? ... Oye, Tora, te estoy hablando- Dirigiste tú mirada hacía el tigre. Él cuál estaba comenzando a cerrar sus ojos. -Oye no te duermas ahora imbécil- Intentaste sacudirlo pero fue en vano, pero en cuánto colocaste una de tus manos sobre su mejilla, o fue lo que planeaste hacer. Kazutora atrapó con su boca tú dedo. -Queeg creesh que hacesh traviesha...- Abrió sus ojos lentamente y te sorprendiste al ver esos ojos color ámbar, que brillaban con la intensa noche acompañado de ese sonrojo de ebriedad. -Na..Nada. Camina, tonto- Desviaste la mirada avergonzada por lo que él chico acaba de hacer, él soltó una pequeña risita y jurarías que la escuchaste cerca de tú oído. Demasiado cerca.

Mientras caminabas le preguntabas a cada segundo por su moto, sin obtener respuesta o lanzaba cosas como "Por ahí", "Por allá" o "No lo recuerdo" su última respuesta te terminó de sacar de tus casillas. Lanzando con todas tus fuerzas a Kazutora a la pared más cercana mientras lo recriminabas con un dedo. El efecto del alcohol aún estaba presente en tú cuerpo. Pero no tanto como se le notaba a Kazutora. Él se sorprendió ante tu gesto. -Nena.... No te enojesh conmigo... Nosh estamos divirtiendo, ¿no?- Dijo con un tono juguetón mientras alzaba sus manos en señal de inocencia. ¿Divertirse? ¿Qué tenía de divertido ser vacilada incontables veces por ese tigre de malas pulgas? Soplaste aire para acomodar un mechón de pelo que se había ido a tus ojos. Pero los dedos de Kazutora aparecieron en tú rango de visión. Acomodó gentilmente aquel mechón rebelde. -Eshtash... Hermosha- Soltó así sin más. Le encantaba jugar con tus nervios, ya estaba más que claro.

-Ya déjate de estupideces Kazutora y dime dónde está tú moto- Él chico no tenía ni una pizca de intención en decir dónde se encontraba su bebé, tomó tu cintura para acercarte a él, haciendo sonar ese arete de cascabel. -Ya... ¿Quieres irte?- Dijo este mientras miraba fijamente tus labios. Tragaste duro en cuánto sonrió para dejar ver sus colmillos. -Es... Tarde y debemos ir a casa...- Al girar tu cabeza, tan pronto, Kazutora tomó tú mejilla para que lo volvieras a mirar a los ojos -¿A casa?- Esa sonrisa aún traviesa estaba presente, haciendo que tus nervios aumentaran aún más de lo que te gustaría.

-Si... a tú casa y yo a la mía- Frunciste el ceño, sabias que si cedías se burlaría de ti por el resto de tu maldita vida. -Que aburrida eres... Bien, te llevaré a dónde esta mi moto, pero con una condición- Dijo mientras deslizaba una de sus manos desde tu cintura hasta la espalda baja. -¿Condición?- Lo miraste confundida. Kazutora asintió haciendo sonar nuevamente el arete cascabel en su oreja. -Debes venir "a casa" conmigo- Dijo acariciando tu espalda baja mientras desviaba la mirada aún apoyado en aquella pared. -NO- Salió casi de inmediato de tu boca. Kazutora parecía triste y con la mirada decía "¿Por qué no?" Se veía igual que un cachorrito siendo abandonado.