Till I Met You 🏀 - km au.

•31•

— A la mañana siguiente...

P.O.V Jimin

Despierto con un leve dolor de cabeza debido a tanto llanto derramado ayer. Llorar junto a Jungkook se sintió muy íntimo, tanto que se sintió bien. Usualmente me gusta llorar a escondidas para no verme más débil, aunque sé que llorar no demuestra debilidad; sin embargo, prefiero llorar solo, sin preocupar a un tercero.
El aroma a carne logra que me siente en la cama para luego prepararme y salir hacia la habitación de invitados. Al entrar, me dí cuenta que la cama estaba aseada y las mantas estiradas. Jungkook no estaba aquí. Por esa misma razón, caminé hasta el aroma a carne y sentí como mi sonrisa lentamente se apoderaba como protagonista de mi rostro. Estaba sonriendo como un estúpido. Jungkook estaba cocinando mientras en su teléfono se escuchaba música en inglés.

— And I can't wrap my head around it, but it feels... oh like I loved you beforeeeee —cantaba mientras daba vuelta las verduras salteadas y miraba de reojo que el arroz. Éste estaba casi listo—. Maybe it was me who brought you here. I should run the other way, but IIII... —De la nada, Jungkook se gira y suelta la espátula al piso dando un salto cuando vio que estaba de pie al frente de él.

— Buen día, capitán —Saludé acercándome a él para abrazarlo por detrás.

— Me estabas espiando, stalker —bufó—, pero buen día, precioso. ¿Dormiste bien?

— Claro que sí. Me gusta dormir abrazado a tí.

— Eres fácil de abrazar, eres pequeño y como una pequeña masita moldeable —dijo agregando en un bowl las verduras ya listas.

— No olvides que esta masita moldeable te dejó sangrando la nariz en Daegu.

— Me dejes una rinoplastía —bromeó girándose hacia mi. Él estiró sus labios insinuando que necesitaba que lo bese. Obviamente le hice caso. Elevé mis talones y le dí lo que quería. Un tierno beso mañanero.

— Mhmmm, claro que son buenos días.

— Ve a la mesa. Vamos a desayunar cabello de oro.

Jungkook había preparado un desayuno exquisito. Carne, verduras y arroz. También había preparado panqueques americanos. ¿Todo este tiempo me dediqué a dormir mientras él cocinaba a sangre y sudor?. Debo tener el sueño pesado.

Nos sentamos a comer y el ambiente era tranquilo. Namjoon hyung aún no llegaba y mi madre trabajaba. Ambos en nuestro propio pequeño mundo. Risas, comida, música y él.

Era una mañana perfecta.

— Abre grande —Jungkook tomó los palillos y tomó un poco de verdura. Yo abrí mi boca y sonreí cuando comencé a sentir la delicia que había preparado—. ¿Está bien?

— Rwico —dije con la boca llena mientras que mi mano la cubría.

— Quiero pensar que eso fue un "rico" y no un intento de vómito.

— No seas tarado, claro que sí estaba rico —respondí una vez que estaba con la boca vacía—. ¿Qué harás hoy?

— Mhmm, probablemente tenga un amistoso en la cancha con Jin y Yoongi. ¿Tú?

— Iré a la casa de Taehyung para... —Mierda. No debo decirlo—. P-Para conversar.

Muy bien.

— ¿Está todo bien? —preguntó con el ceño fruncido y con sus palillos en mano.

— Sip, no te preocupes, Koo —Bebí un poco de agua y esta vez, yo lo alimenté—. Abre grande.

— Copión —Jungkook se burló y comió de su propia y deliciosa creación—. Soy un gran chef, eh.