Hoy por ti-FNAF 1 X Lector

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Narra segunda persona

Estabas en la sala de seguridad. Tu padre te había pegado y ahora tenías un ojo, el labio y la nariz rojos por la sangre y el otro ojo y mofletes morados; por no hablar del resto del cuerpo.

Tu padre te había encerrado en una taquilla, que estaba detrás de él. Por suerte para ti, había dejado la puerta abierta. Era la primera noche que estabas, pues tu madre y tu hermana habían sido asesinadas por la Mafia.

Cuando saliste de la taquilla, tu padre estaba mirando el poder, que al parecer iba mal. Saliste de seguridad y te dirigiste al comedor, dónde los cuatro animatronicos principales estaban reunidos delante de la guarida de Foxy. Pero tenían un aspecto raro... más... humano. Pero no parecían niños como tú, sino... adultos; o adolescentes.

Una chica salió de la cocina, y resultaba que tú estabas delante.

-¿Y tú quien eres?- preguntó la desconocida. Los otros se giraron.

Los animatronicos (supusiste que eran ellos) se acercaron lentamente. A cada paso se convertían más robóticos, hasta que al punto que al estar enfrente tuyo eran los animatronicos. La chica que había salido de la cocina se había convertido en Golden Freddy.

Oíste ruido. «Tal vez es mi padre. Seguramente se le ha ido el poder, o se habrá dado cuenta de que no estoy en la taquilla y vendrá a buscarme» pensaste no muy convencida. Freddy levantó una mano hacia ti. Pensaste que te agarraría del cuello y te ahorraría, pero pasó la mano por el ojo sangrante con sumo cuidado.

-¿Quién te hizo esto?- preguntó Chica.

-Mi_ mi padre, el gu_guardia de se_guridad- dijiste, con voz entrecortada.

-¿Y como te llamas?- preguntó Foxy.

-Sol- dijiste, más tranquil@.

-Lo mato-dijo Freddy, curando las heridas de tus ojos. No me preguntes de dónde sacó las cosas para curarte, no lo sé.

-Gabri_ Freddy, no puedes. Aunque le pegue, es su padre- dijo Golden Freddy.

-Ibas a decir otro nombre...Gabriel ¿No?¿No es ese el nombre de uno de los niños desaparecidos?- dijiste, otra vez asustad@.

Los animatronicos se miraron entre ellos y te miraron repetidas veces, como dudando si contártelo o no.

-Conque desaparecidos ¿eh? Me parece que te equivocas. No están desaparecidos, sino que han sido asesinados. Por una persona, en concreto, la que nos creó...

-¿William Afton? Si, de hecho, he visto unos planos en la taquilla...-te tapaste la boca. Se suponía que no debías decir nada.
Los animatronicos se volvieron a mirar. Freddy había terminado de curarte y dejó no sé dónde el botiquín. Bonnie fue el que preguntó:

-¿En la taquilla? Ese no es lugar para estar.- se detuvo, pensó en lo que iba decir-¿ Te ha metido allí tu padre?

Tú solo te limitante a asentir, pensando que tu padre podría estar viéndote por las cámaras de seguridad. Cuando notaron tu incomodidad, los animatronicos se alejaron un poco.

-Lo mato- repitió Freddy, lo único que esta vez lo dijo a la vez que Foxy, Golden Freddy y Bonnie.

-Chicos- en la cara de Chica se veía que si lo decían una vez más sería la última.

Unos pasos se oyeron. Hacía rato las luces se habían apagado.

-Rápido, pónganse en sus posiciones.- dijiste. Ellos lo hicieron. Te sentaste en la mesa más cercana a la cocina. Te diste la vuelta y una luz proveniente de una linterna que sostenía tu padre te dejó un poco ciega.
-¿Qué haces aquí, mocosa?- dijo tu padre, que te obligaba a llamarle señor Moon.- Te he encerrado en la taquilla y cuando voy a buscarte, no estás. Me pregunto porque murieron ellas en vez de tí.

La figura de Golden Freddy se veía en la ventanilla de la puerta de la cocina. Te decía con las manos que te taparas los oídos y apuntó a la guarida de Foxy. Este se estaba acercando. Luego apuntó al escenario. Bonnie, Freddy y Chica también se acercaban.

-Lo_ lo siento, s_señor M_oon.-dijiste tapándote los oídos.

Tu padre te cogió del cuello, te levantó y te estampó contra la pared, tú con tus manos todavía en tus oídos. Tu padre vio tus heridas bien cuidadas y el botiquín que Freddy había usado. De no sé dónde sacó una navaja y te empezó ha hacer cortes por toda la cara, sin tocarte los ojos. Cuando se cansó de usar la navaja la tiró al lado de Freddy y de Chica. Golden Freddy tenía los ojos como llamas. Pensaste «Nadie toca a sus amigos sin sufrir». Por tus heridas, nadie se acercaba a ti, como consecuencia no tenías amigos y los trabajo en grupo los acababas haciendo en completa soledad.

Tu madre, sabiendo que te encantaba la pizzería, te compró muñecos de los animatronicos y, al no haber de Golden Freddy, ella misma te lo hizo.

De tus ojos salieron lágrimas, pero tu padre pensó que era porque te estaba pegando en los ojos.

-Deja de llorar, imbécil.- dijo. Los animatronicos estaban a pocos pasos de ellos y tú no te habías quitado las manos de las orejas.-Los que dije es verdad. Tu madre y tu hermana no deberían haber muerto. Lo deberías haber hecho tú. Pero no te preocupes, pronto morirás y to culparé a los idiotas de los animatronicos.

Cerraste los ojos, presa del pánico.

Solo pongo dos porque de los cuatro animatronicos principales es el mismo sonido.

Tu padre cayó desmayado y tú casi que también, pues tu padre te había intentado quitar las manos de las orejas.

Lo último que viste fueron a Foxy, Bonnie y Freddy cogiendo a tu padre, Chica regalándoles e intentando detenerles y Golden Freddy intentando detener a Chica. Le parecía gracioso. Luego de eso caíste en los brazos de Morfeo.

Chicos, la máxima cantidad de palabra que he conseguido es la de este capítulo, son 982 palabras las que he escrito en este capítulo.