Lorcan

Capítulo III: El Cumpleaños de Anna.

Londres. Sábado, 31 de Julio de 1976

Llego a casa de la editorial con el primer ejemplar de mi novela en las manos envuelto en un papel de regalo negro con una rosa blanca en el. Es el regalo para mi hermosa niña. Pero aún falta una sorpresa más la que me pone más nervioso.

Me dirijo a mi guardaropa y dejo el regalo sobre la mesa auxilar, de repente el timbre suena. Me dirijo a la puerta de la entrada y abro el gran rectángulo  de madera que da acceso a mi humilde morada, Louis estaba al otro lado deseoso de entrar pero  le cierro la puerta en las narices y me siento en el sillón esperando a que se marche.

Al ver que no lo hace vuelvo a abrirla.

-¿Qué quieres, Louis?
- Lorcan sé lo que pasó con Jace el otro día a mí si me vas a escuchar.-Me dice exigente.

-Mira Louis, lárgate.-le digo con voz suave intentando manterme la calma.

-No, Lorcan no. Las cosas no son lo que parece.

- Mirame a la cara y dime que no me habeis engañado. ¡¡¡DIMELO!!!- Le grito.

Su insegura, torpe y esquiva mirada hacen que una sonrisa rota se dibuje en mi rostro. Lo sabía.

-No me digas nada está claro. Vete y no vuelvas Louis ¡¡vete!!.- Le digo mientras señalo las escaleras que conducen hacia la calle.

Él se dá la vuelta y se va. Cierro la puerta de un portazo. No voy a dejar que esto me destavilice y voy a preparar la siguiente sorpresa para mi niña.

Llamo al restaurante más popular para hacer una reserva.

-Restaurante Mercury ¿En qué puedo ayudarle?- Me responden

-Hola queria hacer una reserva para mañana a las 22 : 00h a nombre de Lorcan Blace por favor.-Digo

-Muy bien caballero, su reservación ya está adquirida. Que pase un buen día.- Se despide el metre.

Me paso la tarde con todos los preparativos, llego a casa completamente cansado descuelgo el teléfono y marco el número de Anna.
Cuándo oigo su voz le digo.

-Hola mi amor. Mañana pasaré a recogerte sobre las nueve.

-Esta bien cariño.- Me responde y noto la emoción en su voz.

Londres. Domingo 1 de Agosto de 1976.

Son las cinco de la tarde y me encuentro en mis aposentos dejando mi libro sobre la cama rodeado de pétalos de rosas blancas.

Al salir de la ducha me dirijo a mi guardaropa y cojo el traje que compré ayer un traje estilo vampírico que a mi amada le va a encantar. Me visto y me voy a recojerla.

Al llegar al hostal veo a Anna en la puerta, tan bella como siempre tan radiante con ese vestido blanco con un corset negro a juego con su pelo negro rizado y un maquillaje angelical que define mejor su bello rostro.

Se acerca a mi y me abraza.

-Felices 27 mi amor. -Le susurro al oído y noto su sonrisa. -¿Nos vamos?

Se agarra de mi brazo y nos dirijimos al restaurante. Al llegar los ojos verdes de Anna se iluminan mirando alrededor; sabía que le encantaría el restaurante es de estilo gótico medieval que combina perfecto con ella ya que ella siempre se viste como si se hubiera quedado atrapada en esa época lo que ante mis ojos la hacen hermosamente inmortal.

-Este lugar es hermoso Lorcan.-Me dice ella emocionada.

-Tú si que eres hermosa Anna.- Le digo y ella sonríe.

Un muchacho joven vestido con un traje medieval se acerca a nosotros y nos dice.

- Buenas noches, ¿tienen ustedes reserva?