It's you [HawksxTu] +18

CAPÍTULO XXI

La luz de la luna entraba por el gran ventanal de la habitación iluminando los dos cuerpos que se movían con desenfreno sobre la cama, los gemidos resonaban por toda la estancia cada que Hawks entraba en ella. Sus ojos ámbar miraban con intensidad a la mujer que tenía debajo de él, pero no por el deseo o el placer que fingía tener, sino por las ganas de acabar rápido con ese espectáculo para enfocarse en lo que realmente había ido a hacer. Después de unos minutos sintió a Mt. Lady llegar al orgasmo y fingió tener el suyo, se apresuró a salir de ella, se sacó el condón rápidamente para que no se diera cuenta que estaba vacío y se dirigió al baño a botarlo en el váter.

Una vez que salió, se puso el pantalón y sacó una cerveza del minibar que había en un rincón de la habitación, Mt. Lady seguía enrollada en las sabanas recuperando el aliento y lo miraba pícaramente.

— ¿Preparándote para el siguiente round? —preguntó aludiendo a la cerveza que ahora el rubio se encontraba bebiendo.

— Claro que sí —respondió Hawks con sarcasmo mientras se acomodaba en un gran sillón a los pies de la cama —. Lo que se viene está mejor.

— Mmm... ¿por qué me da la impresión que no estás hablando de sexo? —bromeó la rubia.

— Oh, porque no lo estoy haciendo — se reclinó hacia atrás mirándola seriamente—. Quiero que me expliques por qué tu amiguito Kohaku intentó drogar a _____.

— No sé de qué hablas —dijo rápidamente.

— Creo que si sabes, Yu.

— ¿Por qué debería de importarme lo que ese imbécil haga por meter su pene en un hoyo? —resopló a modo de respuesta, Hawks se tensó ante el comentario y reprimió su enojo lo mejor que pudo.

— ¿Alguna vez te mencioné que soy uno de los principales inversionistas del charme? —preguntó más calmado y con una pequeña sonrisa bailando en su boca.

La revelación puso tensa y pálida a la heroína que ahora respiraba con pesadez y se aferraba con fuerza a las sábanas que cubrían su cuerpo desnudo. Hawks observaba su lenguaje corporal con diversión, estaba llevándola al punto que quería, ella sabía perfectamente de qué hablaba él, esperó que hablara, que dijera algo, pero siguió en silencio.

— Entonces —continúo él—sabrás lo fácil que fue pedir acceso a las grabaciones de las cámaras de esa noche... y me imagino que sabes que vi —. Como la rubia continuaba sin decir palabra siguió hablando—.  Tú misma le diste esa bebida, Yu. ¡¿Me puedes decir en qué diablos pensabas?!

— ¡¿Por qué te importa tanto esa niña?! —explotó al fin—.  ¿Qué más da si alguien se la coge? Yo solo quería ayudar a mi amigo—.  Bajó su tono de voz simulando sentirse arrepentida—.  No sabía que le iba a poner algún tipo de droga, no sabía que haría algo así.

— Mmm... si no hubiera visto la cámara que está incrustada en el reloj de la barra del bar, te hubiera creído completamente —le sonrió con decepción antes de dar un gran trago a la lata—. Eres buena mentirosa.

— Yo...- el rubio la tenía entre la espada y la pared, no diría nada que la inculpara, su mejor opción era seguir en silencio.

— Te dije que no te metieras con ella —dijo Hawks luego de un buen rato de silencio de parte y parte—.  Te lo advertí.

— Por favor —bufó —. Solo lo hiciste para que no te dañara el polvo. Porque eso es lo que quieres de ella, fallártela hasta hartarte, como haces con todas —su voz se entrecortó por un segundo—. Como hiciste conmigo.

— Te dije claramente que Endev-

— ¡¿A Endeavor por qué le iría a importar una maldita empleada?! —gritó— ¡No me creas tonta, Hawks!. ¡Solo a ti te interesa esa mocosa!. ¡Y ni creas que voy a dejarle el camino fácil, esa pequeña puta no va a hacerme a un lado, TU ERES MIO! —sus gritos cesaron momentáneamente mientras recuperar el aliento—.  Hawks, entiende, yo te am-