𝓚𝓲𝓵𝓵𝓮𝓻 【𝕐𝕦𝕦𝕄𝕚𝕜𝕒】 [Concluida]

21. Epílogo pt. 1

Este epílogo va a ser largo, normalmente suelo hacerlos cortos pero esta vez me falta una que otra cosa por poner :v

Ah sí... Son dos partes pq q hueva hacer uno solo y la neta quiero dejarlas/OS en suspenso JSJSJSJ XDD

Ya era el día del juicio.
Todas y cada una de las pruebas habían sido presentadas, incluso le hicieron uno que otro análisis de sangre si es que no tenía algún padecimiento o no estuviera embarazada, ya que las cámaras de seguridad del hospital donde fue internado Yuu, se encontró una grabación de una enfermera entrar durante varias ocasiones y que salía caminando un poco extraño de la habitación del moreno. Resultando ser ella que en un descuido mostró su rostro. A Yuu no le dijeron eso, para que no perjudicará su salud mental.
Afortunadamente todo dió negativo.

Pasaron a Akane a la mesa de declaraciones. Estaba esposada y con el uniforme de una reclusa.

-Señorita Hyakuya, ¿Por qué cometió estos crímenes? -pregunta el abogado de las víctimas presentes.

-Por amor... -respondió mientras miraba a Yuichirou, quien estaba parado a un lado de algunos testigos; con tristeza -. Yo realmente amo a Yuu-Chan... No quería que nadie me lo quitara... Pero... -al ver qué el rubio se ponía a un lado de Yuu para comentarle algo, la rabia creció en su ser -. ¡Pero ese maldito me lo quitó! -gritó, se levantó de su asiento para poder ir y tratar de golpear al rubio, pero unas policías la detuvieron mientras el azabache colocó al ojizafiro detrás suyo para llevar sus manos a su cadera para sacar su pistola de su funda, solo que sin apuntarle a la castaña.

-¡Orden! -gritó el juez mientras golpeaba su mazo.

La chica al ver la reacción del moreno, cayó de rodillas al suelo. No podía creer que el hombre que amaba estuviera protegiendo a un imbécil que solo le traería desgracias.

Las oficiales la levantaron y sentaron de nuevo en la silla.

-... Ese maldito desgraciado me quito a mi hombre... -gruñó con ira. El abogado de las víctimas carraspeó un poco y se colocó al frente a ella.

-¿Y usted cómo se declara? -inquiere nuevamente.

-Inocente -responde sin verle.

-¿Por qué?

-Porque amar es algo maravilloso cuando haces lo que sea para la persona que amas -sonrió ampliamente y suspiró enamorada. El abogado de las víctimas frunció el ceño.

-Señor juez -se giró viendo al hombre detrás de él -, tenemos un diagnóstico psicológico de la acusada. Fue hecho por el psicólogo Mikaela Shindo y el psiquiatra Shikama Doji -comenta.

-Puede presentarlo -autoriza. El rubio colocó una mano sobre el hombro de su novio, el cual guardó el arma. Mika se alejó de Yuu y fue hasta el juez.

-¿Gusta que lo lea o usted lo hará, señor juez? -inquiere el rubio con la carpeta en mano, viendo al hombre de edad avanzada frente a él.

-Yo lo hago, gracias -responde, así recibe la carpeta la cual venían dos hojas, aclaró su garganta para leer la conclusión que estaba en la segunda hoja -. "Tras haber analizado a la joven Akane Hyakuya, hemos llegado al diagnóstico de que ella padece un caso de psicopatía y a la vez un trastorno de bipolaridad. Ya que, las víctimas han relatado que suele ser muy manipuladora y de vez en cuando cambiaba de un estado de ánimo a otro de forma repentina. Cómo tratamiento para estás patologías, se recomienda a los familiares de la joven que la internen en un hospital psiquiátrico dónde la mantengan aislada de sus demás compañeros para que no llegue a perjudicar los. De igual manera, esto será parte de su condena dictada por el juez" -terminó de leer -. Bien. Señorita Hyakuya -la chica le vio completamente seria -, la condenó a cadena perpetua sin libertad bajo fianza, tal y como dice en el diagnóstico, será llevada a un hospital psiquiátrico para atender sus padecimientos, es todo. Llevensela -ordena golpeando su maso. La castaña abrió los ojos como platos sin poder creer lo que estaba pasando.

Las oficiales la tomaron de los brazos y la obligaron a pararse de la silla, llevándola casi a rastras porque ésta no caminaba, miraba a Yuichirou de manera incrédula y a la vez triste porqué él no hizo algo. Vio como movió sus labios diciendo "Cambia". Así ya no lo vio más.

-Muchas gracias a todos por estar presentes. Hemos concluido este juicio, obteniendo al fin la captura de un delincuente que ha aterrado a varios inocentes. Pueden retirarse -golpeó por última vez su maso y le entregó la carpeta al rubio.

Los cinco víctimas suspiraron felices y lloraron con el mismo sentimiento tras por fin ver a su agresor tras las rejas.

Yuu los miraba enternecido, luego sintió la mano de su pareja en su hombro derecho. Lo vio y sonrió, quien de igual manera devolvió el gesto.

-¿Cómo te sientes? -pregunta el azabache al rubio.

-Un poco mejor y más tranquilo -responde.

-¿Quieres ir a comer algo? Luego de eso, te llevo de regreso al trabajo -comenta.

-¿No vas a venir conmigo? -inquiere confundido.

-No, mi abogado me citó en su oficina, me dijo que encontró otro documento de mis padres, que al parecer es otro testamento. No sé que será, pero espero que no sea cuentas bancarias con una cantidad enorme de plata... No quiero tener en mi poder dinero mal habido.

-¿Quieres que te acompañe?

-Me avergüenza que sepas lo que es -responde viendo a otro lado. Así el menor lo tomo de las mejillas, haciendo que lo viera.

-Yo no te he juzgado, corazón. Los padres hacen lo imposible para que sus hijos vivan en buenas condiciones. Yo sé que ellos tenían en cuenta que lo que hacían no estaba bien, pero te aseguro que están orgullosos de que tú hayas tomado otro camino -dijo acariciando las mejillas del azabache, mostrando una sonrisa. Luego ambos se besaron con amor.

-Te quiero mucho, Mika -dijo abrazando al de tez blanca.

-Yo también te quiero mucho, Yuu-Chan -dijo correspondiendo.

-Bien, vamos a comer y a ver qué es lo que me tiene que decir el abogado...

-Vamos -se alejaron para tomarse de la mano.

Guren vio que iban muy juntos, les hizo burla y Mikaela le mostró su dedo medio, dejando al ojiamatista con los ojos en blanco. Salieron de la sala y por ende de la fiscalía, así caminaron hasta la motoneta del ojizafiro, para seguido subirse e ir a comer a un restaurante cualquiera.

Actualización: 21 de mayo de 2022

Calma, calma, pronto subo la otra parte -w-