𝐋𝐄𝐃: 𝐂 𝐀 𝐅 𝐔 𝐍 𝐄 [ 𝐻𝐼𝐴𝑇𝑈𝑆 ]

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jsjsjs actualizo esto pero no los otros, así de mal parida soy jsjsjsjs

Ya saben, la nota es cuando va la música jsjsjs

El sol comenzaba a salir alumbrando el imperio poco a poco, sin ganas y con dificultad Rashta abrió los ojos viendo el sol asomándose por el balcón de sus nuevos aposentos, habían pasado 3 días desde que se fue del palacio de la emperatriz.

Emira y la condesa Zaida la acompañaron al palacio de las concubinas, en ese lapso mando a uno de sus fieles guardias a qué investigarán bien sobre el imperio de Amell y sus regentes.

— el imperio de Amell es el más grande pues lo componen tres continentes —comenzó a contar Emira mientras ponía la bandeja con el desayuno en la mesa para servir el té— Danica, Zyra y Artem, su líder, el sultán Emmett Avalon Kaan es quien dirige los tres continentes

— ¿de verdad? —abrió los ojos sorprendida, eso era mucho para ella, como podía un solo hombre gobernar todo eso— háblame de la sultana Canan Aygun Kiray Emi, ese fue el nombre que me contó su majestad

— es la hija menor del Sultán y de la Haseki Sultan, ella junto al Sehzade Emeric y la sultana Sahnaz Nurgülbahar están en la línea de sucesión —narró, había leído sobre ellos en los libros que tomo de la Hatun del sultán en el palacio— tengo entendido que intentaron comprometerla a los 15 con un pasha muy importante pero se canceló al descubrir que la traicionaba con una criada de la sultana Sah, acabaron muy mal los dos

Rashta arqueo una ceja incrédula, como iba a casarse una menor, eso era demasiado pero conociendo las tradiciones que el baron Lante le contó en sus clases de historia lo comprendió un poco. Si engañaban a la hija de un sultán poderoso que chances tenía ella de estar en en corazón del emperador.

— es muy hermosa e igualmente inteligente, la sultana habla más idiomas de los que puede contar con sus dedos, es fanática del arte, la música, la poesía, la literatura y el arte de la espada —dijo con una pequeña sonrisa— ni hablar de su hermana la sultana Sah, ella está casada con un miembro importante del imperio de Luipt además de ser una de las consejeras de su padre y una gran estratega, ganándose el desprecio del consejo del sultán y a la vez ganándose el corazón del imperio

Tomo su mentón, le sorprendida como dos mujeres así vinieran al palacio, escuchando todo lo que Emira le decía le hacía pensar de lo peligroso que podía ser meterse con ellas. Pero a la vez quería saber porque la duquesa y la emperatriz querían tanto a las sultanas.

— me interesa saber si las sultanas se parecen a la duquesa

— déjeme decirle esto —se acercó para ayudar a colocarle su bata de dormir y bajar el tono de su voz— incluso el mismo sultán Emmett le teme a sus hijas

La peliplata se congelo al oír eso, un sultán, regente de tres continentes, apodado el magnífico y de 49 años le teme a una muchacha de 17 y una de 22, aunque no lo podría negar, la imagen que ostentaban era grande, desprendían un aura de poder y fuerza, además de tener una belleza radiante. Mordió su labio al pensar que su majestad se enamorara de ellas, si lo hacía estaba segura que se arruinaría su plan de casarse con su majestad.