Ejemplo de carta natal nº 1

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Vamos a ver ahora qué sucede en una carta real. Por ahora, no voy a revelar el nombre de la persona, que es un hombre.

Examinemos las configuraciones planetarias y consideremos el tipo de mecanismos de defensas que podríamos esperar y cómo se muestran en la vida real. Hasta aquí, no hemos hablado de ningún individuo real, sino que consideramos las categorías psicoanalíticas de las defensas y cómo cada elemento y cada signo exhiben sus defensas características. Pero no hay ninguna carta que contenga sólo un signo o sólo un planeta, pues cada persona tiene muchos mecanismos de defensa diferentes y algunos de ellos chocan entro sí; además, algunos son más prominentes en las distintas edades y etapas de la vida. A veces, nuestra necesidad de defendernos en un área o de utilizar un determinado grupo de defensas se contrapone de un modo violento con nuestra necesidad de defender otra cosa y de una manera completamente distinta. Hemos tocado este tema cuando consideramos ciertos aspectos planetarios, como Marte en aspecto duro con Neptuno. Al final, sólo podemos darle sentido a la asombrosa y compleja orquestación de las defensas de la personalidad explorando su expresión en la carta de una persona y en la vida del individuo.

Como pueden observar, aparecen algunas configuraciones sorprendentes en esta carta. Primero, hay dos grandes trígonos; uno de ellos está en el elemento agua, entre la conjunción Sol-Saturno en Escorpio, Plutón en Cáncer y Urano en Piscis. Luego, hay otro gran trígono que se extiende sobre dos elementos, entre Neptuno en Leo, Kirón en Aries y Venus al principio de Capricornio. Contra estos dos grandes trígonos, hay una cruz en T que involucra a Júpiter, Marte y Kirón. Estrictamente, Plutón no forma parte de la cruz en T, porque no está en cuadra-tura con Kirón ni con Marte, pero está en oposición a Júpiter. Luego, debemos considerar la conjunción Sol-Saturno en cuadratura con Neptuno, y la cuadratura entre Mercurio y la Luna. Esta carta es muy energética, con muchos aspectos poderosos. Necesitamos un punto de entrada, una perspectiva general que nos permita abordar estas complejas configuraciones sin perdernos.

El equilibrio de elementos nos puede decir muchas cosas. Marte es el único planeta en el elemento aire. El agua domina claramente, con Plutón en Cáncer, Urano en Piscis, y el Sol (que es el regente del Ascendente) y Saturno en Escorpio. Neptuno angular, en conjunción con el Ascendente, también enfatiza la importancia del agua. Tanto en el elemento tierra como en el elemento fuego hay tres planetas.

Audiencia: Usted no considera el Ascendente y el Medio Cielo.

Liz: Los tengo en mente. Lo que declaran no está en conflicto con el equilibrio básico de la carta, que nos dice que el agua domina y que el aire es el elemento más débil. Esto nos ofrece inmediatamente un retrato psicológico general. El fuego es fuerte y el Ascendente acentúa el peso de los planetas en el elemento fuego. Podemos conjeturar que este hombre tiende a responder ante la vida con sus sentimientos más que con su intelecto, y que la intimidad e intensidad emocionales son sumamente importantes para él. También podemos suponer que tiene una poderosa imaginación y una necesidad de experimentarse como alguien especial, excesivo y fuera de lo común. Puede llegar a tener dificultad para mantener los límites y contener sus sentimientos, y el cuerpo y el mundo material pueden plantearle un problema porque sus necesidades emocionales y sus fantasías quizás lo lleven a ser muy indulgente consigo mismo respecto de los límites mundanos o a no preocuparse por ellos. Las configuraciones planetarias deben ser observadas desde este contexto general.

Pienso que hay varios puntos importantes sobre las defensas que se pueden resaltar en esta carta. Para empezar, configuraciones tales como los grandes trígonos pueden utilizarse como defensas, y por lo general, así ocurre. Dado que son armoniosas por naturaleza y reflejan aptitudes, dones o capacidades natura-les en una determinada esfera de la vida, nos sentimos cómodos y fuertes al ex-presar los planetas y elementos de un gran trígono. En consecuencia, pueden usarse como defensa no sólo contra un elemento débil, sino contra otro planeta o configuración en la carta. Empleamos el sistema de apoyo de nuestros trígonos y sextiles para defendernos del dolor y de la fricción que se generan por nuestras cuadraturas y oposiciones. ¿Cómo funciona eso aquí?

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