𝓝𝓾𝓮𝓼𝓽𝓻𝓸 𝓢𝓮𝓬𝓻𝓮𝓽𝓸

Capítulo 1: Después de un bocadillo

Después del incidente con "Prácticamente Pikachu", Goh le da a Cinderace una bolsa con unos bocadillos de la Ciudad Castelia, la cual ésta empieza a comer, quedando un poco embarrada de crema en su mejilla. Lucario al verla, la limpia con su pata, haciendo que Cinderace se ponga feliz pensando que ya habían hecho las pases o que simplemente ya no estaba molesto con ella, así que queriendo invitarle un poco a Lucario, lo vuelve a embarrar como al principio de su indiferencia. Él al parecer no le gusta lo dulce, así que se volvió a molestar y empezó a seguir a Cinderace para "ponerla en su lugar".

Un poco cansados y dejando por la paz su pelea, se van a una fuente a sentarse un rato. Cinderace termina su bocadillo, pero se da cuenta que Lucario aun seguía embarrado de la crema, así que mojó su pata en la fuente y limpió su mejilla. Él solo hizo un gruñido dando a entender que no quería que lo tocara, mucho menos que lo limpiara, pero al final accedió y se dejó tocar por la patita de la conejita que tenía al lado mientras ella le sonreía cálidamente.

Regresaron al laboratorio Cerise antes de que anocheciera, Ash y Goh liberaron a sus Pokémon para que se reunieran con los demás, y se fueron a dormir. A la media noche, Cinderace se despierta sin ninguna razón, y al no poder recuperar el sueño caminó un poco. Pasa al lado de Lucario, quien está recargado en un árbol, durmiendo; él siente la presencia de alguien y al abrir los ojos ve a la conejita caminando.

L: -¿Y ahora qué le pasa? ¿Estará de sonámbula o algo parecido?- Se decide a levantarse y seguirla por si algo malo llega a pasar.

C: [recoge unas bayas que estaban en el piso] Hmm, me pregunto si alguien estará despierto a esta hora...

En eso ella escucha una rama quebrarse, como si alguien la hubiera pisado. Al voltear, se encuentra con aquel pokémon azul de tipo lucha y acero.

C: ¿Qué haces despierto? ¿Acaso... me estabas siguiendo?

L: -No se suponía que se daría cuenta de que la estaba siguiendo- Creí que estabas caminando dormida, pero veo que al parecer tenías hambre [observa en dirección a las bayas que tenía la conejita]

C: Eh, bueno no es hambre lo que tengo, las bayas las encontré en mi camino, pero las guardaré para mañana.

L: Entonces, ¿por qué estás despierta ahorita? [se recarga en un árbol que tenía al lado]

C: No lo sé, solo se me desvaneció el sueño y quise caminar un poco... discúlpame si te desperté [camina hacia donde está Lucario]

L: No te preocupes, mi aura me hizo sentir una presencia cerca.

C: Mejor regresemos para que puedas volver a dormir.

L: Está bien.

*Ambos caminando de regreso*

C: También me quería disculpar por lo que pasó en la tarde...

L: ¿De qué hablas? No sabíamos que Pikachu siempre estuvo con Ash y Goh.

C: No me refiero a eso, sino lo que pasó después. No era mi intención embarrarte la mejilla con crema, solo quería que probaras un poco de las delicias de esa ciudad, pero veo que no eres muy fan de las cosas dulces.

L: Oh, eso... bueno en eso tienes razón. No me gusta mucho comer cosas dulces, me empalagan mucho. Y creo debí decírtelo en lugar de molestarme y perseguirte por lo que hiciste.

C: Bueno yo creí que sí, cuando eras un Riolu te gustaba comer bocadillos dulces. Pero creo que al evolucionar cambian varias cosas, y no solo tu actitud.

L: ¿A qué te refieres con mi actitud?

C: Tú como Riolu eras más activo emocionalmente, te veía más contento, emocionado, incluso llegábamos a jugar mucho tú y yo. Pero ahora tú como Lucario tienes una actitud muy cambiada, prefieres estar solo, eres bastante serio y siempre tienes una cara de enojo [esto último lo dijo con una risita nerviosa]

L: Bueno tú también cambiaste de actitud. Cuando eras Raboot se podría decir que eres como yo ahora, hasta te llegabas a apartar de Goh, y ahora tienes esa personalidad y energía de un Scorbunny, claro yo te conocí después... pero me sorprende que aun así de tu actitud tan seca y apartada que tenias con todos, jugabas conmigo. ¿Eso tiene un por qué?

C: -Demonios, ni siquiera sé el por qué- Hmm... Pues supongo que vi en ti una conexión fuerte, que podíamos ser buenos amigos... no lo sé [responde con un tono nervioso] -Espera, ¿Por qué estoy nerviosa?-

L: Y... ¿Sigues sintiendo esa conexión ahora que ambos evolucionamos? [se detiene]

C: Bueno, yo sí lo siento, pero no creo que te agrade tanto la idea de que te considere mi mejor amigo.

L: No es eso, sí me agrada, y también pensaba lo mismo... en que podías seguir siendo mi mejor amiga, aunque me saques de quicio a veces.

C: [se detiene al escuchar lo que había dicho y voltea a verlo] Creí que ahora solo me veías como compañera de combate.

*Llegan al árbol donde estaba dormido Lucario*

L: No, aun te sigo viendo como mi amiga, y aquí entre nos... me gusta que lo seamos.

Cinderace se sorprendió tras escuchar esas palabras que le había dicho Lucario, y soltó un pequeño sonrojo seguido de una risita tierna.

L: ¿Te puedo pedir algo?

C: Claro, dime.

L: Esta noche no te vayas, quédate conmigo bajo este árbol [se sonroja levemente] -¿Por qué le pedí eso? Espero diga que no-

C: ¿Puedo saber la razón? Ah, ya sé. Seguro que a estas horas te da miedo estar solo [suelta una risa]

L: Ha, ha, muy graciosa. Yo no le tengo miedo a nada, lo digo por si esta vez te da por caminar dormida y te caes a un agujero o choques con un árbol [se sienta y se recarga en el árbol mientras cierra los ojos]

C: ¡Yo no soy sonámbula! [se da media vuelta y se sienta al otro lado del árbol] -¿Por qué me pidió esto? Creo solo se quería burlar de mí... Pero... también quiero estar cerca de él... De algo estoy segura, y es que esa conexión que sentí hacia Riolu siendo Rabbot, la sigo sintiendo ahora, incluso es más fuerte- [recuerda su pasado]