No todo es culpa del destino.

Capítulo 8. Playa.

Capítulo 8. Playa.

Estiramos las toallas que los chicos trajeron ya que nosotras lo habíamos olvidado por completo. Con Melissa fuimos a unos baños que habían en la playa para poder cambiarnos la ropa y ponernos nuestros trajes de baño. Encima de los bañadores nos pusimos unos vestidos que Melissa compro cuando yo me fui de la tienda "Old navy" y me escondí en el auto para que Melissa se diera cuenta de mi incomodidad.

-¿Te gusto la sorpresa que te traje?.-me miro con una amplia sonrisa.

-¿A qué te refieres?.

-Adam.-rodeo los ojos.

Sonreí y moví la cabeza en negación.-Eres una idiota.

Cuando llegamos a el lugar en donde habíamos puesto las toallas nos dimos cuenta de que hacía falta comida y un buen quitasol ya que el que teníamos era demasiado pequeño y estaba un poco desgastado por lo que no nos serviría de mucho, decidimos que había que comprar, digo decidimos porque yo y Melissa nos miramos en cuanto llegamos y supongo que pensábamos lo mismo.

-Hay que ir a comprar, ¿Quién se ofrece?.-hablo Melissa mirándonos. Por lo que mis dudas de que si pensábamos los mismo se aclararon.

-Yo.-alce la mano.

Quería salir de aquí lo antes posible estaba demasiado nerviosa por la presencia de Adam y necesitaba un momento a solas para relajarme. Pero toda mi calma se desvaneció en cuando Adam levanto su mano y dijo: -Yo te acompaño, son muchas cosas para que las traigas tu sola.

-¿Qué?, ¿me crees débil?.-lo mire enrabiada.

Adam palideció ante mi comentario y se rasco el cuello en señal de nerviosismo. Me pare y comencé a caminar en dirección al automóvil.

Abrí el auto y lo cerré furiosa.

-¡Mierda!.-grite un poco mientras le pegaba al manubrio.

De verdad que odio esto, odio como me siento cuando estoy cerca de Adam, odio lo sentimental que me pongo y también odio con todas mis fuerzas no poder odiarlo. De verdad creo que estoy enloqueciendo, y todo por culpa de lo que el maldito destino me tiene preparado para mi futuro.

POV'S ADAM.

Cuando ella se levantó mi instinto fue pararme y perseguirla. Bonnie se subió al auto en el asiento del piloto y cerro de un portazo, gritando algo inaudible.

Me subí a su lado y con temor de hablar tan solo la mire. Ella fue quien rompió el silencio.

-¿Que compraremos?.-actuó indiferente.

-No lose, veamos en cuanto lleguemos.-sonreí intentando ser amable.

Ella me miro y posiciono su mano en la palanca de cambio sin mostrar ni siquiera una expresión en su rostro. Cuando comenzó a conducir pensé que sería mi fin ya que conducía demasiado rápido.

Pasaron unos minutos hasta que llegamos a una tienda en la cual habían muchas de las cosas que podríamos necesitar. Nos bajamos del auto y Bonnie camino rápidamente en dirección al mostrador de la tienda. Apareció un chico alto de unos 17 años e inmediatamente comenzó a coquetear con Bonnie, lo cual me enfureció bastante. Lo peor de todo es que Bonnie le seguía el juego. Dios cuanto odio esto.

Me aleje del lugar porque si me quedaba más golpearía al chico. ¿Cómo es que Bonnie no se da cuenta de que me gusta?. Fui al sector de licores y saque un vodka y un pisco por si es que Matt o Melissa quisieran tomar. Retome mi lugar al lado de Bonnie en el mostrador y deje las cosas.

-Bonnie.-ella me miro.- ¿puedes ir a buscar comida?, por favor.

-Em claro.-camino lentamente en dirección a la comida.