No todo es culpa del destino.

Capítulo 7. ¿Día de amigas?

Capítulo 7.¿Día de amigas?

Desperté gracias a que Melissa me tiro un bote de agua fría en la cara.

-¿Que rayos te sucede?-comencé a sacudirme para sacar el agua de mi cuerpo.

-Son las 8 de la mañana, tengo que trabajar y debes irte-se cruzó de brazos.

-Y, ¿Por eso me lanzas agua fría?-apreté la mandíbula.

Melissa retrocedió un paso, pensando que la golpearía. Por lo que me reí bastante fuerte, realmente mi amiga es muy ingenua.

-Bonnie, de verdad necesito que te vayas-puso cara de perrito.

-Está bien, me iré pero no a mi casa, eso te lo aseguro.

Ella rió y se fue al segundo piso, mientras que subía yo me puse las zapatillas y me levante del sofá. Camine en dirección a la cocina, me senté en un taburete, esperando a que Melissa bajase. Ella demoro bastante en bajar, por lo que me baje del taburete y camine al frízer para tomar un vaso de leche o algo frio.

-¡Melissa, ¿hago tostadas?!-grite muy fuerte.

"Está bien", Se escuchó a lo lejos.

Puse el pan molde en la tostadora y mientras se tostaban fui al frízer para sacar mermelada y mantequilla. Puse dos vasos en la mesa y dos platos para poner los panes, cuando ya estaban listos los panes los prepare y los puse en los platos. Cuando Melissa bajo el desayuno ya estaba listo del todo.

-¿Y ese milagro?-se sentó en el taburete frente al mío.

-Tenía hambre.-sonreí mostrando todos los dientes.

Terminamos de comer todo el desayuno. Me pare para lavar los platos antes de irme, mientras lavaba se comenzó a formar mucha espuma lo cual despertó mi imaginación. Mire a Melissa, quien seguía en el taburete, y sonreí. Ella me miro extrañada pero poco a poco comenzó a entender ya que vio la espuma en mis manos.

-No me harías eso, tengo que trabajar.-se paró del taburete.

La mire y sonreí aún más, hay fue cuando comenzó a correr, por lo que la empecé a perseguir por toda la casa para tirarle espuma. Cuando entro a su habitación se cayó a la cama, y por eso aproveche y le tire espuma en la cabeza. Mi pie dolía por correr, pero aun así, corrí lo más rápido que pude en dirección a la cocina para que Melissa no me atrapara.

-Bonnie, maldita idiota, te atrapare.-se escuchó decir a Melissa desde su habitación.

Antes de que ella bajara, me dirigí a su mueble y busque un rociador para echar en su interior toda la espuma que podía. Melissa, llego con una jarra de agua que tenía en su habitación y me la tiro, solo me callo la cuarta parte en la cara pero nada más. Como venganza tome mi rociador y le comencé a echar en la cabeza y en la espalda ya que iba corriendo hacia el baño.

-Puedes correr, pero no esconderte.-dije con vos de psicópata.

Ella miro hacia atrás, por lo que se tropezó con el sofá y cayó al suelo fuertemente.

-Auchhhh!!!-Se tomó la mano derecha, apretando sus dedos.

-¿Te caíste?.-dije irónicamente.

-No fíjate, quería abrazar el suelo con mi cara y dedos.-me miro con furia.

-Perdón, ¿Estas bien?.-baje la cabeza.

-No idiota, me he roto un dedo.-comenzó a llorar de la nada.

Upsss, me acerque lentamente a ella y la abrace, pero no sin antes rociarle el resto de espuma que me quedaba. Me miro con cara de asesina en serie pero después siguió llorando.