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Narrador

Cuando Lauren volvió del trabajó para comer se encontró con camila al teléfono y por lo qué entendió hablaba con sus padres.

-Mamá, por que no pueden entender qué es mi felicidad - Lauren dejó el maletin sobre el sillón y se acercó a abrazarla, transmitiendole apoyó. - No regresaré. No. Soy tu hija, yo, no él y deberías apoyarme a mí. Adiós.

Colgó molesta

-No es mi intención que discutas con tus padres, amor.

-La intención es suya, están dejando a jhon como un pobre santo. Se que hice las cosas mal y que probablemente él no merezca esto pero ya estoy cansada de mentirme, de herirnos a todos.

-Lo lamento bebé - Lauren beso su frente.

-Esta bien. Quieres comer? Hice picadillo y arroz

-Eso suena delicioso Camz, gracias.

Los días pasaban casi sin saber nada del exterior, dentro de casa en su burbuja de amor. Camila había apagado su teléfono y solo lo encendía una vez al día para seguir viendo los mensajes de jhon, de su familia y amigos.

Pero, las risas con Lauren, los juegos y los besos la hacían olvidarse de todo.

-Tenemos la cita con los abogados bebé, vienen a las 6, esta bien?

-Perfecto mi vida. Gracias.

Esperando la hora de la reunión Lauren atendió algunas llamadas, camila se puso en contacto con su jefa y se disculpó por su pronta y repentina ausencia.

"-Estoy lejos, lo lamento mucho, entiendo que necesitas tenerme ahí pero no creo poder volver. Los bebés nacerán pronto y no puedo estar viajando en mi estado. Sí, lo entiendo no te preocupes no voy a pelear alguna remuneración económica solo me gustaría poder buscar mis cosas. Perfecto, gracias. "

-Paso algo amor? - segundos después de que terminó la llamada Lauren entró a la habitación.

-Me despidieron

-Oh. - dijo de forma triste. - No te preocupes, de todos modos ya estarías de baja maternal, cuando los niños sean más grandes puedes trabajar de nuevo. - Camila sonrió

-Los vas a cuidar o enviar a una guardería? - Pregunto jugando

-Puedo cuidarlos, soy dueña de mi tiempo y me encantaría pasar todas las horas con ellos y contigo. - La sola idea de Lauren cuidando a sus bebés, cargando sus bolsos y cambiando pañales la llenaba de ternura.

-Creo que esperare un par de años antes de trabajar

-No es problema bebé. - Apoyo Lauren. - Tenemos lo suficiente para sobrevivir un par de años sin trabajar - Guiño el ojo bromeando y camila rodó los ojos.

-Sí claro, eres super rica, se me olvida algunas veces. - Lauren elevó los hombros y se sentó en la cama abrazándola. - Supiste algo más de jhon?

-De nuevo se presentó en el corporativo.

Hacía 2 días que jhon había venido a buscarlas. Fue directamente a la oficina de Lauren donde hizo todo un escándalo y la seguridad tuvo que intervenir.

-Lamento mucho el show que hizo

-Es entendible amor. Si me hubieras dejado también estaría haciendo un escándalo

-No te veo habiendo ese tipo de escándalos laur, la empresaria rica dando esos shows? Que dirá la sociedad? - Lauren soltó una risa.

-No importa lo que digan, me importa tenerte conmigo y haría todo lo que fuera posible por volver a estar contigo. - Contó Lauren - Me da lástima el tipo, pero qué se joda, eres mi mujer y son mis hijos.

-Vamos a tener difícil la pelea legal por el reconocimiento de los bebés - Camila había sentido esa preocupación desde siempre - el préstamo está a nombre de jhon y el dejó muy en claro para que lo pedía

-No te estreses con eso, puedo devolverle el dinero e incluso ofrecerle más. Ahora vamos a vestirnos por qué mamá nos espera para cenar.

En cuanto llegaron al restaurante ubicaron a Clara esperándolas en el área más privada. La mujer audita les sonrió, era la primera vez que veía a camila en estos días.

-Qué gusto verte de nuevo, camila. Espero qué tu visita nos dure - Como toda mamá, no le gustaba ver sufrir a su hija por un amor y claro que iba a usar cualquier momento o comentario para hacerle saber a camila qué, estaba poniéndole atención a sus actos.

-Mamá - Lauren pidió avergonzada

-Está bien, laur. Tiene razón y le aseguro que ahora sí me quedaré mucho tiempo con Lauren.

-Me alegra oír eso.

Tuhieron una cena muy agradable. Clara estaba feliz y orgullosa de ver a su hija siendo una dama y desviviendose por atender a camila.

Lauren no podía apartar sus manos de camila, le tocaba el vientre, la abrazaba, le daba de comer en la boca y la besaba de forma dulce e inocente apenas un piquito. Pequeños detalles que hacían sonrojar a camila y también la hacían amar más a Lauren.

Claro que ella tampoco perdía tiempo y le daba muestras de afectó, acariciaba su barbilla y besaba su mandíbula recostandose en su pecho. Colocaba la mano sobre su pierna y con las uñas hacia masaje suave. No podían mantenerse alejadas.

-Hija creo que no hace falta que yo tenga guardaespaldas

-Es para estar tranquilola mamá, por favor no discutas en eso.

-Eres tan necia Lauren. - clara negó sonriendo - Haber como la soportas, camila

-Solo por que es muy hermosa - dijo jugando, haciendo reír a Lauren y a Clara.

-Tus papas como tomaron esta noticia?

-Mal. Están tan enojados conmigo. - Clara tomó su mano y le dio un apretón transmitiendo apoyo

-Van a entender que su enojo no vale más que perder tu cariño los padres siempre estamos para los hijos aún cuando estos tomen malas decisiones - Clara miró con cariño a Lauren y camila se pudo dar cuenta qué entre madre e hija había un enorme lazo de cariño. - Puedes contar conmigo para lo que sea. En el momento qué decidiste estar con Lauren te convertiste en una hija para mí

-Muchas gracias Clara. Tu apoyo y tus palabras me hacen sentir muy bien, gracias por todo el cariño, pero sobre todo por haber traído al mundo a esta mujer de corazón hermoso y qué estoy segura será una gran madre pues te ha tenido como ejemplo.

-Me conmueven tus palabras niña, como te digo, una madre hace hasta lo incansable por sus hijos. Ya lo veras en carne propia.

De regreso a casa, Lauren y camila compartieron besos y caricias en cada oportunidad que tenían.

-Te gustó la cena? - preguntó la de ojos verdes - que tal el lugar?

-Todo me gusto amor. - Lauren sonrió al escuchar la palabra - Pero la compañía fue lo mejor. Te amo Lauren

-Camz. - lauren sonrió y le tembló el labio - sabes lo feliz que me heces?

-No amor. Pero cada día me esforzaré en hacerte feliz.

-Me haces feliz sin esfuerzo alguno. Te amo gordita

Lauren dijo a juego y camila sonrió abrazándose a ella.

-Ya veras cuando nazcan y me ponga a dieta

-Así estas perfecta amor, no necesitas dietas ni ejercicios. Pero si tu quieres hacerlo por salud y un poco de vanidad está bien, tenemos un gimnasio y podemos ir con mi nutriologa

-Nutriologa?

-Eh si, Tiene... - fue interrumpida

-O sea que es mujer - Lauren asintió lento. - Te quitas la ropa con ella para que te tome los percentajes de grasa y eso

-pues si Camz, así funciona

-La siguiente cita iré contigo. - Lauren iba a negarse pero prefirió callarse y asintió rendida.

Jamás se discutía con una mujer embarazada.

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No Fuiste Mi Único Amor. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora