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Capítulo ０１

—Shisui, aún eres un niño para entender todo esto, pero siempre has sabido destacado entre los niños del clan, eres bastante inteligente y espero que siempre hagas lo correcto —mencionó un hombre.

—¿Estarás siempre conmigo, papá? —preguntó el niño de ojos negros.

—Shisui, aunque yo no llegue estar a tu lado siempre estaré en tu corazón, nunca olvides que te amo hijo —abrazó al pequeño.

(...)

—Shisui debes correr y no voltear hacia atrás, nunca olvides que tu misión y deber es ser un excelente ninja, siempre buscando ser el mejor, destaca en todo lo que hagas y cuando encuentres a la mujer perfecta no la dejes ir —habló un hombre muy parecido a Shisui.

—Pero...  —no alcanzó a decir nada porque su papá gritó .

—¡CORREE! —volteó a ver a sus padres y lo último que hizo fue correr.

Un chico despertó muy agitado, lleno de sudor.

«Regresaron las pesadillas, años sin tenerlas, pero en cada aniversario, todo vuelve... Algún día podré ser feliz o será que debo de ser un hombre solitario» pensó un pelinegro.

Entró a darse una ducha, se vistió e intentó dormir.

Su nombre es Uchiha Shisui, mide alrededor de 1.85, su cabello es rizado y negro, sus ojos negros carbón.

Cuando el tenía cinco años perdió a sus padres, desde ese momento se volvió bastante reservado, serio y una persona sin sentimientos. Aún recuerda como activó su sharingan,

Flashback.

Escucho gritos de sus padres pero, el hizo lo que su padre dijo, corrió hasta donde su piernas lo permitieron.

Chocó con alguien, era el patriarca Uchiha, solo cayó al suelo y lloró hasta quedar dormido.

Cuando despertó, a su lado estaba la matriarca del Clan.

—Shisui, ¿Qué sucedió? —preguntó el Uchiha mayor.

—Estaba con mis padres y de la nada comenzaron a llover kunais y shurinkens, mi papá dijo que corriera y eso fue lo que hice hasta que choque con usted —las lágrimas comenzaron a salir de nuevo.

—Mañana tienes que llevarme al lugar donde sucedió todo, ahora descansa.

(...)

Al día siguiente, al lado del patriarca Uchiha, fueron a ver si había algún sobreviviente, y lo que vio lo dejó helado, sus padres llenos de sangre con múltiples lesiones, heridas, en sus cuerpos había kunais, agujas senbom y otras armas.

Su corazón se desgarró y algo dentro de él paso, en sus ojos apareció el sharingan  con tres tomoes.

—¡Shisui! —grito el señor Fugaku.

Al voltear a verlo, sus ojos estaban rojos, tenía el sharingan activado, en su mirada había una sonrisa que no podía descifrar, que rápidamente se desvaneció.

—Activaste tu sharingan, es entendible que fue por la pérdida de tus padres, pero de ahora en adelante yo te cuidaré.

Shisui no  correspondió el abrazo, su mirada seguía clavaba en los cuerpos sin vida de sus padres. Desde ese día todo cambio, su vida dió un giro de 180° y decidió volverse el ninja más fuerte y siempre luchar por sus ideales.

Después de ese suceso conoció a los hijos del patriarca, Itachi y Sasuke.

A los siete años destacó entre todos sus compañeros ascendiendo a Chunnin, a los dos años siguientes me convirtió en Jounin.

El pequeño Sasuke siempre buscaba estar cerca de su hermano, pero gracias a qué Itachi también es un excelente ninja, ya no pasaba tanto tiempo con Sasuke y eso había afectado un poco su relación.

Al paso del tiempo, Itachi tenía un excelente nivel, su mentalidad parecía a la de un Hokage, se alegraba de  tener a una persona con quién pasar sus ratos de soledad, todos estos años extraño a sus padres, aunque tenía el cariño de los padres de Itachi, no era lo mismo.

Fin flashback.

✿～✿～✿

Ese día era el aniversario de la muerte de los padres de Shisui, le dieron el día libre para ir a visitarlos al cementerio.

Cómo no había podido dormir, se levantó y salió a entrenar un poco, regresó a su casa cuando el sol comenzaba a salir, de baño y salió con dirección del cementerio.

Todos en el complejo Uchiha lo saludaban y el solo hacia una ligera reverencia, hasta que escuchó una voz detrás de el.

—¿Te diriges al cementerio? —preguntó alguien atrás.

—Así es, como cada año —comenzó a caminar

—Se que hay veces que no me portó bien contigo, pero me gustaría pedirte un consejo y no te dejare de seguir hasta que me ayudes —hablo el chico tratando de seguir el paso de Shisui.

—Esta bien, ¿qué necesitas? —suspiró resignado

—Primero que nada no entiendo como toleras a las chicas que te persiguen, segundo a veces son muy fastidiosas y tercero... —no pudo decir más porque le taparon la boca.

—Hay chicas que solo nos ven por interés, no he tenido nunca una novia, bien sabes que mi vida no ha sido muy fácil, así que dudo ser de ayuda y este día mucho menos, lo mejor será que busques a una chica que te pueda ayudar o a tu mejor amigo — habló para después desaparecer en un parpadeó.

«Me pregunto cómo es que no lo he golpeado, a veces no lo tolero, no se porque me da la impresión que es gay» pensó el Uchiha.

Llegó al cementerio, donde buscó las tumbas de sus padres, las limpió, colocó unas flores y se quedó por un largo tiempo observando y pensando algunas cosas.

Flashback.

—Shisui, ¿Puedo consultar algo contigo? —habló al patriarca.

—Claro Uchiha-sama —le dijo de manera respetuosa.

—¿Te gustaría unirte a Anbu? —preguntó sin rodeos.

—¿A qué viene esa pregunta? —le cuestiono.

—Eres un prodigio, a pesar de todo lo que has pasado, sigues sobresaliendo sin importar nada ni nadie y no es una mala idea, pero al final la decisión es tuya.

—Con todo respeto, es un tema que no había pensado, pero ahora que lo tocó podría pensarlo, por ahora estoy bien con las misiones que tenemos — respondió de manera tranquila.

—Claro, sabes que puedes analizar todo, tu inteligencia, tu manera de resolver las cosas y todo lo que haces me sigue sorprendido demasiado, se que serás cada día mucho mejor —comentó el Uchiha mayor.

—Gracias por eso,  ahora tengo que irme, cuando lo piense y tenga una decisión se la haré saber, puedo retirarme —le contestó con mucho respeto.

—Adelante, no olvides que eres un prodigio y se mejor que nadie lo que has sufrido, así que solo recuerda una cosa, si entras a Anbu no existen los sentimientos —finalizó y dejo a Shisui solo.

Fin flashback.

«¿De que sirven los sentimientos? Solo nos vuelven débiles» pensó Shisui.

Se levantó y se dirigió a comer, su estómago pedía comida, así que fue directo al Ichiraku Ramen...