Bad at love 🖤 KM.

Capítulo 31.

Jieun murió a los cuatro meses de haberse casado, los dos últimos meses que estuvo con vida, su salud no mejoró en lo absoluto y Jungkook hizo todo lo que pudo por ella, hasta que no aguanto más y quiso descansar de todo. Jungkook hizo su voluntad hasta el final.

Los Kim no se fueron y acompañaron a Jungkook en todo momento. En el funeral de ella había llegado su ex novio llorando y pidiendo perdón, Jungkook simplemente no lo dejó entrar, no después de todo el sufrimiento que le hizo pasar.

Los medios informaron la muerte de Jeon Jieun y Jungkook no dio declaraciones de nada, todos los bienes que pertenecían a ella y que pasaron ahora a él, simplemente los donó a fundaciones sin lucro contra el cáncer.

Así pasaron los meses, Jungkook lloró porque consideraba que la vida había sido jodidamente injusta con ella, pero por ella siguió avanzando y disfrutando de cada nuevo día como ella le enseñó.

Jimin se enteró de lo ocurrido con Jieun a la semana de su funeral, Taehyung le contó.

Llegó diciembre y Taemin ya estaba en Rusia, fue directo hasta el departamento de Jimin y entró sin necesidad de llamarle o avisarle ya que él tenía llaves de acceso.

Frente a las cámaras ambos se mostraban como un matrimonio normal, Taemin lo sorprendía viajando en las fechas importantes y cuando andaban juntos por las calles en Moscú, salían tomados de la mano y caminando como cualquier pareja normal y enamorada.

—Hola, cariño —le saludó Lee con una sonrisa cuando Jimin entró al cuarto y pegó un brinco del susto al verlo.

—¿Qué haces en mi cama? —Jimin ya estaba acostumbrado a esto. A veces llegaba y él llevaba horas ahí, como si fuera su casa.

—Nuestra, bebé —sonrió.

—Jodete.

—Ven y dale amor a tu esposo, que te extraña —dio pequeños golpecitos en la cama en señal de que el rubio se acercara.

—No tengo tiempo —se dirigió hasta su ropero a sacar unas prendas para ir a darse una ducha.

Jimin y Taemin ya habían follado más de una vez, era algo sin sentimientos, algo solo por necesidad. Después de todo eran esposos, no había nada de malo con eso, ¿no?

—Vamos, amor —se levantó y caminó hasta Jimin. Lo abrazó por la espalda y empezó a besar su cuello— Sé que quieres.

—Claro que no...

—Aquí abajo dice otra cosa —tocó el bulto que había entre sus piernas, acariciando y masajeando sobre la ropa.

—Cá-Cállate, ugh... —gimió cuando Taemin metió su mano por debajo de la polera y tocó sus pezones— Hmm... —Jimin agachó la cabeza y mordió su labio inferior.

Mierda. Estaba excitado.

—¿Lo quieres? —preguntó mientras presionaba su propio bulto contra el trasero de Jimin.

Jimin se giró, quedando frente a él y humedeciendo sus labios con la punta de la lengua, luego asintió con la cabeza.

—Te odio —lo besó de forma caliente y obscena. Pequeños sonidos salían de Jimin al ser besado con brusquedad— N-No... —abandonó el beso— No tengo mucho tiempo, hazlo rápido —demandó y Taemin simplemente sonrió.

—Lo que pidas, amor —se quitaron toda la ropa de manera rápida. Taemin sin esperar mucho se lanzó contra el cuerpo desnudo de Jimin.

—Es-espera —le interrumpió Jimin— Ahí están los condones —apuntó a la mesita que había al lado de la cama.