Stockholm's Painting - Meanie [En Edición]

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Estaba frente al espejo, acomodando su cabello platinado. Dio una revisada, notando que las raíces eran de color negro. Había pasado demasiado tiempo desde que terminó por decolorarse el cabello. Admitía que no era lo suyo, sin embargo, se dejó manipular por Soonyoung cuando le pidió un cambio de apariencia. Abrió el estuche de sus lentes para ponérselos, arregló un poco su ropa para iniciar con su plan.

Salió de casa cerrando la puerta con seguro, subió al auto que su tío le prestó y condujo hasta la ciudad. Había dejado que Mingyu sufriera ansiedad por ser perseguido, jugó con su mente pidiendo a personas cercanas que le tomaran fotos y se las mandarán como una advertencia. Encendió el auto y condujo hasta la ciudad donde Mingyu vivía. Era un largo camino que debía hacer. 

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—¡Lee Jihoon!

Mingyu perseguía a un Jihoon que huia de él. Llamaba la atención de todos sus compañeros con tal de tener un momento a solas con Jihoon. Su amigo había tomado la decisión de terminar con su amistad sin siquiera consultarlo con él. Mingyu no lo odiaba, tampoco lo culpaba de creeré en las palabras de Wonwoo. Jihoon era su amigo, y no por un error lo dejaría de querer o hablar.

Logró alcanzarlo y llevarlo arrastrar a un lugar donde pudieran platicar de como se sentía cada uno con respecto al tema. Lo único que Mingyu deseaba en ese momento era tener el apoyo de Jihoon y de Jeonghan. Jihoon no tuvo otro remedio que aceptar que era momento de afrontar la situación entre los dos, y debían hablarse con la verdad. Estaban solos, sin nadie que los pudiera observar.

—¿Por qué me evitas? –Jihoon desvió la mirada, estaba apenado por lo que había hecho–. Responde.

—Sé que me odias. –Mingyu no creía que decía aquello enserio. ¿Odiar a Jihoon? ¿Por qué?– Dejé que la amabilidad de Wonwoo me haya cegado, y si no hubiera hecho eso, quizá te hubiéramos encontrado más rápido.

—No te atormentes. –Mingyu tomó el rostro de Jihoon para que pudiera mirarlo a los ojos. Tenía una sonrisa viendo a su pequeño amigo–. Yo también confíe en él ciegamente, y sufrí, pero tú y Jeonghan nunca dejaron de buscarme, y eso es lo que agradezco.

—Mingyu yo... –Sin decir nada más, Mingyu lo abrazó con fuerza. Necesitaba a Jihoon en ese momento, lo necesitaba cerca. Jihoon correspondió al abrazo, queria liberarse de esa culpa y si lo abrazaba podía hacerlo.

—Te amo Jihoon, eres mi amigo y te necesito conmigo. –Jihoon no lo soportó y lloró en el hombre de Mingyu. Después de un año, la culpa se había ido por completo.– Volvamos a casa juntos.

Se reunieron con Jeonghan después de la salida. Habían arreglado todo lo que les atormentaba en ese momento. Mingyu sentía paz en su alrededor a tener a sus dos mejores amigos en su vida. Tenerlos a ellos le daba la fuerza necesaria para superar sus miedos. De ese modo le haría frente a Wonwoo.

—Mis padres tendrán un bebé.

—¡¿Qué?! –Jeonghan escupió el café hacia la mesa al escuchar las palabras de Mingyu. Jihoon lo miró con asco–. ¿Tendrás otro hermano menor?

—O hermana. –corrigió Jihoon–. Me alegro por tus padres, ¿cómo te sientes con ello?

—Mal. –respondió con sinceridad. Mingyu pensó el tema y lo que estaba viviendo en ese momento–. Ahora mismo es un peligro que mis padres tengan un hijo, no sabemos en qué momento Wonwoo intenté hacerme daño. –Jihoon hizo una mueca de angustia. Llevó la mano al hombro de Mingyu.

—No tienes porqué dejar que el temor de Wonwoo opaque tu felicidad. –su voz era muy calmada–. Estamos hablando de un bebé, Mingyu, tendrás un nuevo hermanito.