One Week (Jesse Rutherford)

Capítulo 2

Ella había comprado un apartamento cerca del centro, cosa que le había costado conseguir ya que eran bastante caros. Por suerte, sus padres pudieron gastarse el dinero en el piso y en un coche, ya que le habían dado una beca en la que estaba todo pagado.

Él se encontraba en un café cerca de la entrada del bloque de pisos de ella. Después de hablar con bastante gente, consiguió saber dónde se alejaba la joven. Pensó, que sería un bonito detalle recogerla por la mañana. Así que la llamó al móvil.

La chica se despertó a las diez y media de la mañana con el sonido de una canción de Ed Sheeran, la cual era su tono de llamada. El cantautor se encontraba en la ciudad, pero las entradas ya estaban agotadas. A punto de dejarlo sonar y volverse a dormir, decidió que podía ser importante, por lo que cogió el teléfono.

"¿Diga?" Dijo con tono adormecido.

"Buenos días, bonita." Era la persona que menos esperaba. "¿Qué tal dormiste?"

"¿Qué haces llamándome ahora? ¿Y cómo conseguiste mi número?"

Él se rió. Tenía carácter la chica, y eso le hacía tomarse el trato más en serio.

"Es lo que hacen los buenos novios, dar los buenos días a sus chicas." Dijo en tono divertido.

"¿Estas de coña? Yo no soy ni tu novia ni tu chica, así que lo que estas haciendo es perder oportunidades conmigo."

"Ah, así que hay oportunidades." La línea se quedó en silencio. Ella no contestó, pero tampoco colgó. "¿Que pasa, te ha comido la lengua el gato, bonita?" Ella siguió sin contestar. Se encontraba sentada en su cama, con la mente en blanco. Había metido la pata bien, y no lo podía negar. "Te espero en el café de al lado de tus pisos. No tardes, bonita."

El chico colgó, ella se quedó con el móvil en la mano. Él guardó el móvil con una media sonrisa y sacó un cigarro. Encendiéndolo, sacó también dos papeles que llevaba en el bolsillo. Se acomodó en la silla del café y la esperó, fumándose el cigarro poco a poco.

Ya no le quedaba a penas cuando ella apareció. Llevaba unas vans, un peto corto y una camiseta pegada y corta azul de flores junto con las gafas de sol. También llevaba su pelo en una trenza y los collares del día anterior. Ahora se fijaba él, tenía la muñeca derecha llena de pulseras.

Ella se acercó a él y se levantó.

"Tengo algo para ti. Bueno, para los dos. Toma." Él le tendió las dos entradas.

Entradas para Ed Sheeran, aquella noche. Ella no podía creerselo, era una gran fan de él, y le estaban ofreciendo una entrada allí mismo.

"Tengo contactos por aquí, y como a mi no me desagrada este artista he pensado que igual querrías venir también. Por tu reacción deduzco que a ti también te gusta."

"Eh... Sí, me encanta. Dios no se cómo agradecertelo, muchísimas gracias." Ella le dio un abrazo enorme y él soltó una carcajada.

"El concierto es por la noche, bonita. Tengo otros planes para la mañana. Vamos."

Montaron en un autobús que no tardó mucho en parar y llegaron a una calle con bastantes casas en hilera, con un gran jardín delantero y de dos o tres pisos con garaje, algunas con caminos y coches delante. Se dirigieron a una casa en especial, la cual ella pensó que era la casa del chico, cosa que no era así. Ahora que se fijaba en él, llevaba unos vaqueros negros rasgados, una camiseta de tirantes blanca, un gorro y unas zapatillas negras. Además, llevaba la guitarra del otro día al hombro.

"¿De quién es la casa?" Preguntó ella cuando ya habían llamado al timbre.

"De un amigo."

Un chico que parecía un poco más joven que Jesse abrió la puerta. Era moreno y tenía los ojos marrones, pero era bastante mono.

"Hey, Jesse, pasa. ¿Y quién es ella? ¿Es tu novia?"

"Aún no. Se llama Andrea."

"Encantado, Andrea. Soy Zach. Pasa tu también, sólo está Brandon abajo."

"Igualmente." Le sonrió y se estrecharon la mano.

Entraron los dos, ella siguió a Jesse y bajaron al sótano, con Zach detrás. Allí había otro chico, con aspecto parecido a los otros dos. Allí abajo tenían una batería, varias guitarras y un bajo. El chico que estaba allí se levantó de su posición en la batería y fue a saludar.

"Hola, creo que no nos conocemos. Soy Brandon." Andrea y Brandon se estrecharon la mano.

"Andrea, e igualmente."

"Vaya, eres inglesa. Me encanta la gente inglesa, sois geniales. Sobre todo el acento."

"Yo pensé lo mismo." Dijo Zach riéndose. Andrea y Brandon también rieron. Jesse no. Él no lo quería admitir, pero estaba celoso. Aún que ellos eran sus amigos, no le iban a quitar a la futura novia.

"Bueno, he pensado que le podríamos enseñar a Andrea lo que llevamos, ¿no creéis?" Dijo él rápidamente y mirando a Brandon fijamente. Éste entendió el mensaje, ahora sabía que ella iba con él.

"Tienes razón. Andrea, ¿te ha explicado algo Jesse?" Dijo Zach. Parecía un chico bastante majo, con una sonrisa bonita.

"No, no le expliqué nada. Verás bonita, nosotros junto con otros integrantes que no están ahora formamos una banda llamada The Neighbourhood. Aún no somos famosos, por lo que no nos conocerás, pero estamos trabajando en ello. Te he traído para que nos des tu opinión como espectadora, ya sabes."

"¿Quién toca la guitarra?" Dijo ella.

"Yo, junto con otro chico." Contestó Zach.

"Los chicos que tocan la guitarra me encantan." Dijo Andrea con una sonrisa. Ya había calado a Jesse, ella sabía que estaba celoso, y lo iba a utilizar a su favor. El chico se creía muy listo, pero ella también lo era. "¿Tú no la tocas?" Se dirigió a Jesse.

"No. Yo soy el vocalista." Dijo con tono seco. Ahora sí que estaba bastante celoso. Pero estaba convencido de que un cantante también podía gustarle. Incluso más que un guitarrista. "Empecemos, aunque seamos tres." Cogió un micrófono. Los otros dos chicos se pusieron en sus puestos. "La canción se llama Sweater Weather."

Y escuchando la letra de la canción fue cuando ella empezó a mirar al joven a los ojos, y a darse cuenta de que el trato no estaba tan ganado como ella pensaba.