Rompiendo la maldición

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Caminamos hacia la habitación el todavía me tenía cargada. Llevándome hacia la cama

- Bonita - el deseo se veía en sus ojos - Déjame hacerte el amor, quiero admirarte en cada momento

Joder. Asentí

Me besó al principio dulce hasta con delicadeza, pero después se convirtió en ansías y deseo. Quite su camisa de un tirón

Virgen de los abdominales

Bendita seas

Empecé a desabrochar su pantalón, podía sentir su erección en mi vientre. Subió mi vestido hasta mi abdomen. Quedando expuesta mis bragas de encaje rosa

- Es una tortura que cada vez que estés a mi lado sea consciente de que cargas lencería sexy - termino de quitarme el vestido. Y expuso mi bralette de encaje a juego - Joder

Se lanzó de nuevo a mi boca colocándome encima de él. Ya sus pantalones habían desaparecido, desabrochó el sostén exponiendo mis pechos erectos en su rostro a lo que empezó a chuparlos con delicadeza. Quería más de el, así que empecé a bajarle el bóxer

Este hombre tenía todo perfecto

Amén

Me coloque de rodillas a lo que él me vio sorprendido pero entendió lo que quería hacer. Así que se acomodo en la cama de forma que quede entre sus piernas, agarre su erección en mi puño y empecé a masajear suavemente antes de meterlo en mi boca. Escuche el gruñido proveniente de su boca y sonó tan sexy que en lo único que pensé es que quería escucharlo más

- Bonita no voy a durar nada si sigues así - me encantó su cara de sufrimiento me levanté y quite mis bragas

- No perdamos más el tiempo entonces - me coloqué abierta encima de su erección

El rápidamente saco un condón de su pantalón. Me tumbo en la cama boca arriba y se lo coloco. Abrió mis piernas. Me besó con ansias y me penetro de una sola estocada, empezó a moverse encima de mí primero con delicadeza hacia arriba y abajo. Yo veía borroso por mi nivel de excitación mientras jadeaba. Me levanto quedando cargada encima de él y yo continúe moviéndome

- Joder que rica estás - yo sonreí con malicia y el empezó a devorar mis pechos- muévete preciosa

Sus deseos son órdenes señor

Empecé a moverme más rápido en círculos a lo que el gruño de excitación. Lo tumbé en la cama y me coloque encima de él me agarró de la cintura yo agarre mi cabello y empecé a moverme en todas las posiciones, sus gemidos y gruñidos me excitaban demasiado

- ¡En cuatro bonita! - soltó con un gruñido levantándome colocándome en la posición

Me penetro de una estocada y empezó a moverse rápido. Me agarró los pechos mientras con otra mano me azotaba las nalgas. A lo que gemía de placer. No se exactamente cuánto tiempo duramos cambiando de posición. El encima. Yo abajo. Sólo se que sentía mi orgasmo cerca a lo que él me besó y penetraba con más rudeza, hasta que explote gritando contra su boca. A lo que el también gruño acabando al mismo tiempo

¡Ja! dioses del sexo

¡Rompí con su maldición! 

Antoni se tumbó en la cama botando el condón en la basura, solo sentí cuando paso su mano por detrás de mí moviéndome para quedar encima de él. Estábamos sudando, probablemente tenía el cabello en una maraña y sentía mi cara roja

Pero estaba jodidamente feliz

- Recuérdame mandar a todo el mundo a la mierda cuando quieras tener sexo - eso no tenía que recordármelo

Bad GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora