Decisiones y Verdades

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¿Mama?

Mierda

- Arthur – respondió con una sonrisa y cierto temor en sus ojos

- ¿Qué mierda es esto Ángela? – Arthur ya salió del shock y volverá a su estado natural. Un Cavernícola

- ¡Tienes que escucharla! – soltó Ángela frustrada

Arthur la miro con incredulidad

- ¿Qué tengo que escuchar?

- Mi versión de la historia – se metió su madre hablándole

- ¡La única versión que se. Es que tú nos abandonaste! – aclaro Arthur mirándola con molestia – Ni siquiera nos llevaste contigo o volviste por nosotros. Ni una llamada nos hiciste. Pero ahora vienes y apareces como si nunca te hubieras desaparecido de nuestras vidas

- ¡Porque no podía acercarme a ustedes! – aclaro su madre – Tuve que pasar por mucho para volver a verlos. Hasta ahora es que tuve la oportunidad de acercarme a ustedes. Porque tu aceptaste el poder

- ¡No me vengas con esas mierdas!

- Arthur – soltó Ángela molesta – ¡Debes escucharla. Esto tenemos que hablarlo!

- Arthur – me metí yo. De salía – Creo que todos están bastante alterados – mire a Patrick que se estaba sobando la cien y a Fer que veía todo con preocupación – Lo mejor es calmarse y que hablen esto en familia

Bueno era hora de largarme de allí. Mire a los chicos

Paticas para que te tengo...

- Estaré con Fer y Patrick en el otro apartamento – empecé a caminar hacia ellos. Pero una mano me detuvo a mitad de camino

- Tu eres parte de la familia - me detuvo Arthur. Tomándome de la mano – Además que no quiero que te vayas

Me voltee hacia el mirando esos ojos grises. Que por más fríos que se veían ahora. Notaba el miedo en ellos

- Creo que es algo que deben hablar los tres – solté tomando su mano. Frunció el ceño. Miro a todo el mundo con cara de perro rabioso y me acerco a él tomándome de la cintura

- Te necesito – susurro cerca de mis labios mirándome con desesperación

Mi corazón empezó a latir muy rápido

El tono que utilizo era de temor absoluto. Por fuera se veía igual de intimidante pero en sus ojos veía lo asustado que estaba por todo esto

- Está bien – sonreí tratando de tranquilizarlo – Me quedare. Estaré contigo

Asintió aliviado. Me tomo la mano y luego miro a los chicos

- Ustedes lárguense – Patrick coloco mala cara tomando a Fer de la mano hacia el ascensor. Fer muy madura le saco la lengua al tinieblo antes de entrar en el ascensor

Arthur puso los ojos en blanco

Nosotros nos ubicamos en los muebles de la sala. Ángela y su madre enfrente de nosotros. Al principio nadie dijo una palabra. El ambiente estaba demasiado tenso. Arthur miraba a su madre como si fuera una desconocida y Ángela la miraba como si fuera un ángel caído del cielo

Debió necesitarla tanto...

Amelia recordé que se llamaba. Miraba a sus hijos con una nostalgia increíble. Como si quisiera abrazarlos. Pero sabía que no podía hacerlo. Note el dolor en su mirada y sus ojos cristalizados

- Creo que traeré un té de manzanilla – me levante saliendo a la cocina tratando de que alguien iniciara la conversación mientras preparaba él te. Aunque no deje de echar vistazos de chismosa – Hace frio ¿Cierto? – seguía hablando por alguna razón – creo que ajustare la calefacción

Bad GirlDonde viven las historias. Descúbrelo ahora