Capitulo 10

12 1 21
                                    

Jungkook

Hace dos días había estado enfermo, pero ya estaba mejor, y en estos momentos, estaba llegando la hora de irme a casa. Había pasado el día completo trabajando en la empresa.

El día que me resfríe le pedí a Ely que pasará el día conmigo.

Ella me había cocinado, y luego dejo que durmiera en su regazo.

No voy a mentir los fantasiosos deseos que me surgieron al verla pasearse por la casa y cocinando muy tranquila, como si estuviera viviendo conmigo.

Como si fuéramos una pareja feliz pasando un día en casa.

¿Pero que son esos pensamientos?

Me gustaba pasar tiempo con ella, tal vez más de lo normal, pero no me importaba, solo con ver su bonito rostro bastaba para alegrarme el día, aunque a veces fuera tan odiosa.

Estaba terminando una documentación que debía envíar a la oficina de Seokjin, cuando casi tumban mi puerta, y luego un ruidoso Jimin ingreso a mi oficina.

Cosa de todos los días.

¿Quien cumplirá años en unos diaaaas? ¿Quieeeeen? — dijo con voz cantarina — ¡Obvio yo! — se lanzó a mi sofá riendo.

— Ya te estás poniendo viejo y aún actúas como un niño.

— ¿De que hablas? Si estoy en la flor de la juventud, 25 añitos no es nada.

— No me digas.

— ¿No vas a llevar a alguien a mi fiesta? Tal vez, ¿Una chica latina con cara odiosita? — pregunto subiendo y bajando las cejas.

— Si quiero invitarla, pero no sé si querrá ir.

— ¡Ay por favor! ¿Crees que se va a negar a tu invitación?

— La verdad es que no, siempre logro convencerla — dije con una sonrisa.

— ¡Esooooo! — Jimin soltó una risita.

Puse cara de picardía y el rio aún más.

— Bueno, bueno, vine a decirte que, hoy me iré a tatuar, así que ¿Quieres venir con nosotros?

Sabía que se estaba refiriendo a Madeleyn.

— Y también, iremos a comprar lo que nos pondremos el sábado. Me imagino que tú aún no tienes nada.

— Estás en lo cierto, aún no he comprado nada. Iré con ustedes.

— Ok, te veo allá, iré por Madeleyn ahora mismo.

Salió por la puerta, sonriente.

Va a cumplir 25 pero tiene la actitud de un niño de 5 años.

Ese es el mejor amigo demente que me tocó tener. No me quejaba.

Terminé la documentación que debía entregarle a Seokjin y me dirigí a su oficina.

Llamé a la puerta, y me permitió pasar.

Nam estaba hablando con él, parecía que estaban planeando algo, porque tenían un montón de papeles sobre la mesa con los que estaban trabajando.

Nam al verme sonrió.

— ¡Hey Jungkooook! — respondí a su saludo y le di unas fuertes palmadas en la espalda.

Nam es la mano derecha de Seokjin, es como su asistente, pero un asistente muy importante.

Mire a Seokjin y lo saludé de manera menos informal.

— Aquí tienes lo que me pediste Seokjin, me quedaría a ayudarlos, pero tengo una cita con mi mejor amigo. — les guiñe un ojos y ambos rieron.

Yo No Caí... Yo Me Lance.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora