Capítulo 2

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Seguimos en el cementerio, estoy hablando con los chicos por un largo tiempo, la conversación se centra en las carreras que deseamos estudiar. El ambiente es agradable, la tensión se ha esfumado y volvemos a ser los amigos de siempre. Ale nos habla sobre su deseo de abrir un restaurante, quiere estudiar gastronomía y está emocionado con esa idea.

Pero nuestra amena conversación es interrumpida por un sonido de celular, una llamada que altera el panorama. Se está acercando la hora de almuerzo y Valery recibe la llamada de su padre, hablan por un rato, por obligación más que gusto, hasta que suspira cansada y corta. Luego gira hacia Ale y le dice que su padre quiere que pasen el aniversario juntos.

La noticia le sienta mal a Ale. Él desvía la mirada por un segundo, incómodo, sin embargo, no se opone. No está feliz con el pedido del padre de Valery, su rostro me lo demuestra, no obstante, no puede objetar. Asiente despacio y trata de animar a la pequeña, ella tampoco quiere pasar la tarde con él, pero no pueden hacer nada.

Nos despedimos de Mike con desgano y vamos al auto de Kevin. Mi corazón vuelve a acelerarse, ansioso. Los latidos cada vez son más fuertes, incluso podría salirse en algún momento. Miro disimuladamente a Aiden, él parece tranquilo, ¡qué suerte! Está conversando con Valery, quizás por eso no siente temor, o ¿habrá superado lo ocurrido?

El auto de Kevin está estacionado cerca a la puerta, entramos los 5 sin problema, pero no me tranquilizo. Mis amigos llegan antes que yo a las puertas del auto, pero se detienen a esperarme, preocupados. Me esfuerzo en sonreír, debo fingir que estoy bien, no quiero ser el centro de atención.

Las puertas se abren apenas llego, Ale, Valery y Aiden irán atrás. Se supone que voy de copiloto, pero no me puedo mover. No puedo entrar. Mi pulso se acelera, los latidos aumentan y un silbido ensordecedor aparece en mi cabeza, mi cuerpo está en alerta como si estuviera avisándome que estoy por entrar a una zona de peligro.

Kev se percata de mi conflicto interno, puedo sentir sus ojos buscando los míos, quiere saber que siento, pero estoy tan abrumado que lo ignoro. La situación empeora con el paso de los segundos, mis manos tiemblan y creo que dejo de sentir mis piernas, entonces me toma por los hombros.

Los ojos de Kevin por fin encontraron los míos, puedo ver la desesperación en ellos y la tensión en el ambiente reaparece. Nadie comenta nada, ni siquiera se escucha una respiración. Sonrió para ocultar mi temor, aparentando que no existió el evento previo, pero mis amigos lo saben.

— ¿Prefieres que vayamos a pie? —La voz de Kevin es seria, pero no intimidante ni distante.

—Estoy bien—contesto agotado—. Solo es cansancio.

«Mentira, malditas mentiras».

— ¿Seguro? —. Turno de Ale, su voz es débil, diferente a la de Kev, casi en tono bajo.

—Sí, Ale—. Asiente, pero no muy convencido—. Solo estoy cansado, de verdad—. Trato de mantenerle la mirada a Kev—. Estoy perfecto.

—De acuerdo—. Acepta resignado.

Kevin vuelve a su asiento, pero no sé sienta, quiere asegurarse de que estoy bien. Reniego para mis adentros, pero me obligo a sonreír. Abro la puerta del copiloto, mi mano tiembla, y me acomodo en el asiento, Kev me sigue. Todos esperan que diga las palabras: "estoy listo" para que el carro arranque, pero siento mis labios sellados con pegamento. No puedo hablar.

De nuevo su mano hace acto de presencia, se posa en mi pierna y, por instinto, levanto la cabeza para encontrarme con su rostro preocupado. Él no agrega más, se mantiene en silencio, pero su gesto me muestra que está atento a mí. Me da seguridad saber que está conmigo, mi pulso poco a poco se va normalizando, y los temblores disminuyen.

Classless [Boyslove] [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora