Capítulo 6

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DAPHNE

Chicas sentadas encima de Michael, en el sofá, con botellas de alcohol, la música a tope, riéndose, dándose besos con ellas, desnudos, la ropa tirada.

La escena me rompe el corazón en mil pedazos. No puedo creer lo que estoy viendo en mis propios ojos. Ahora mismo siento un vacío dentro, con los ojos tintados de furia y vidriosos.

-Daph...

Deja de besar a las chicas que estaba besando, se levanta él, dando pasos pequeños.

-No te me acerques. Me das asco ahora mismo. -mis ojos llaman la atención del rostro que pone Michael.

Se que le preocupa, ¿pero porque ha hecho esto, si supuestamente me quería?

-¡¿QUÉ COJONES ESTÁS HACIENDO?! ¡¿QUIÉN SON ESTAS CHICAS?! -grito.

Las chicas del sofá desnudas, se asustan poniendo los ojos como platos. Una de ellas apaga la música, para que ya se me escuche más.

-¡Después vas diciéndome que no confías en mí! ¡Ahora es al revés! ¡¿No se que te piensas quién eres?! -las lágrimas alborotan por mis mejillas coloradas.

Él intenta acercarse otra vez hacia mí, pero yo me alejo hasta chocar contra la pared blanca.

-Si quieres te puedes unir, guapa... -una chica me dice, coqueteándome con la mirada.

-¡Cállate, zorra! -la rabia que tengo dentro del cuerpo, cada vez sube más.

Vuelvo mi mirada hacia él.

-Daphne, perdóname. No volverá a pasar... -súplica.

Hago una mueca de asco, pero las lágrimas se me siguen cayendo.

Ahora mismo, siento angustia y asco dentro de mi. Me siento inútil por haber confiado en él. Sabía que nuestra relación no podría acabar bien, y esto creo que ya ha terminado.

-No me vengas ahora suplicándote. Has sido un gran gilipollas, que no ha tenido conocimiento ninguno. Te dejo y no quiero volver a verte nunca más. He intentado lo posible para poder seguir con nuestra relación, pero tú vas y la cagas. Aparte de hacerme esto, creo que ya no te acordarás de que me hiciste en la ducha, me tocaste sin mi consentimiento. Y no sabes cómo me siento desde aquel día. ¡Bueno, para aclarar las palabras, me violaste!

-¡Daphne, porfavor, no me dejes, porfavor! ¡Te ruego que ahora sí haré las cosas bien, pero por favor no me dejes! ¡Y no te toque sin tú consentimiento, tú te dejastes llevar!-ruega y súplica a la vez.

-¿Qué me dejé llevar? ¿Es enserio que crees eso? -miro confundida.

-Pues sí. Te di todo el sexo que querías o eso creo.

-¡¡Eres gilipollas!! ¡Abusaste de mí! ¡Me tocaste sin mi consentimiento!

Voy a la habitación. Cojo una maleta que está en el armario, meto toda la ropa que me falta, mis productos de higiene, maquillaje, cargadores, etc... Lo hago todo tan rápido, que no escucho lo que dice Michael, persiguiéndome todo el rato.

Ya me estacionó delante de la puerta intentando salir, pero unas manos rodeadas de mis brazos me paran el paso.

-¡Daphne! ¡No te vayas, por favor! No me dejes solo, te necesito.

-¿Solo? ¿Me lo estás diciendo enserio? Tienes a todas las chicas desnudas en tu salón, esperándote para que les des placer.

-Ha sido un malentendido...

Su cara de tristeza no me preocupa para nada. Solo intenta manipularme otra vez, para estar con él y darle otra oportunidad.

-Adiós, Michael, no hace falta que me des explicaciones.

Corazón frío (En Proceso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora