Capítulo número nueve.

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-¡Es estúpido que tengas que ir a trabajar Harry!-le grité- ¡Se supone que es nuestra luna de miel y tenemos que estar juntos!

-Mia, ya hablamos de esto. Tu vives y vivirás con el dinero que yo gane en las empresas.

Le miré, era una tontería que hiciera eso. Una luna de miel es para que los recién casados se la pasen de lo más increíble y sobre todo, juntos.

-Ya tienes la vida resuelta Harry. Se supone que trabajaste duro durante tres años en la empresa de tú padre. No me vengas con esa tontería.

El solo me miró, sabía que estaba molesto, pero era la verdad.

-Mia, sabes que te amo, pero igual amo mi trabajo y quiero lo mejor para los dos. Es importante que comprendas el porque lo hago.

Esto me estaba hartando y sabía que tarde o temprano iba a hacer el problema más grave de lo que ya era.

-¿No puedes hablar y cancelar la junta?, quiero pasar tiempo contigo, nos casamos ayer, Harry.

El seguía mirandome con sus ojos verdes. Y podía ver que cada vez estaba más enfadado.

-Mia...-pauso- No puedo hacerlo. Esto es muy importante.

Sufiente. El no sabia como me sentía al respecto. Se supone que deberíamos estar juntos y pasarla bien. Caminar de la mano por las playas de Malibu y comer mariscos o una deliciosa, pero grasosa hamburguesa. Pero, no.
Su trabajo era más importante ahora.

-Bien. Haz lo que quieras. Pero cuando tu pene quiera algo, olvídate de que estoy aquí.

-¡Mia, solo te pido que lo comprendas! ¡No es tan difícil!

Me había gritado. Nunca en mi vida, durante nuestra relación, me había alzado la voz.

-¡No me grites!

-¡Es que nunca lo comprendes, Mia! ¡Solo piensas en ti, eso es realmente estúpido!

-¡Yo pienso en ti de la misma manera en la que pienso en mi! ¡No soy egoísta, tu lo eres!

Sabía que estaba furioso, al igual que yo. Pero era un tema delicado, nunca había escuchado que en una luna de miel, el esposo se ina a trabajar como si fuese lo más normal del mundo.

-Sufiente. ¡No seguire hablando estupideces contigo!

Abrí ls boca más de lo normal. Había dicho que es una estupidez.

-¿Estupidez, Harry?

Caracajeo irónicamente, ¿que era tan gracioso?

-Si lo es. Ya me voy, no seguiré discutiendo con una mocosa insoportable.

No podía creer que había dicho eso. Y se fue, así nada más.

Decidí no estar mal y me fui a poner un traje de baño. Hoy iría a disfrutar mi "Luna de miel" sola.
Salí de la casa de Harry y me dispuse a caminar por toda la acera hasta en contar un puesto de machacados y compre uno.
Cinco minutos después, me encontraba sentada en la arena viendo como los niños jugaban, al igual que las parejas la pasaban juntos.

Puta vida.

Decidí pararme y caminar un poco más. En camino de regreso a casa, visualice un centro comercial con todas mis tiendas favoritas.

Entre a una y lo primero que pensé es que no traía efectivo, pero tenía la tarjeta que Harry me dio.

Nada mejor que desquitarse gastando algo de su dinero.

Y al salir de cada tienda, tenia cinco bolsas más en las manos.

Escuche mi celular sonar y baje mis compras, y me di cuenta que era Harry. Desvíe la llamada y seguí caminando.

Al llegar a casa, vi el audi negro estacionado en la entrada.
Camine lentamente y cuando lo vi, alce una ceja.

-¿Qué? -dije.

-¿En serio estabas tan molesta que decidiste gastar todo el dinero de mi tarjeta?

-Solo fui a disfrutar mi luna de miel-sonreí- si me disculpas, tengo que guardar muchas cosas.

.-.-.-.-.-.-.-.-.-.

Escuche la puerta abrirse y vi a Harry parado en el marco, camino hacia mi y se arrodilló.

Este quiere algo.

-Mi amor, se que estuvo mal todo lo que te dije, y que no debi de ir a trabajar. Es nuestra luna de miel y quiero pasarla bien. ¿Estemos bien, si?, Te amo.

Sonreí y me acerque a el, como si fuera a besarle.

-Hoy no follas.

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Harry's Wife.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora