Capítulo número cuatro.

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Baje con la esperanza de ver a mi padre tratar de convencer a mi mamá. obviamente lo que vi me desiluciono. Maldita vida. Camine directamente a la cocina y vi a mis hermanos con arina en todo su cuerpo y a James tomando millones de Snapchats como si no hubiese pasado nada.

 —Cínico  — dije al verlo.

—¿Qué? Yo no me tengo la culpa de tus males.

Como odiaba esto, por si fuera poco, mamá me descubrio a las 4:30 am hablando con Gemma y me quito el celular. ¿Me quieren matar acaso?

—Te acabo de mandar un snap — carcajeo, maldito.

—Pedazo de tonto—dije, para salir de ahí con una banana en mi mano.

Me puse de pie al lado de la ventana de la sala de estar, necesitaba ir a esa cita. De como de lugar. Busque a mi mama con la mirada, ya no estaban aquí. Trote hacia la parte de arriba y vi como mis padres entraban a su habitación. Bien, es el momento de hablar. Entre antes de que cerraran la puerta en mi cara.

—Mamá, por favor. Se que mi comportamiento de anoche no fue el mejor y que para terminar rompí la regla de no celulares por la noche, pero, por favor... ¡No me dejes no salir esta noche! s muy importante para mi.

—Ya habia dicho mi ultima palabra y la respuesta es no.

—Por favor, Madie. Deja que nuestra hija salga, es un adolescente.

—¡Vez! hasta papá me apoya, esto es demasiado importante para mi. No sabes cuanto significa.

Solo te pido, señor, que hagas que mi madre cambie de opión. Solo eso te pido.

—Puedo hacer algo...— penso— te dejo salir las horas que quieras pero... tienes que limpiar tu habitación.

—¡Sí! gracias mama, te amo.

Corri hacia mi habitacion y me dispuse a limpiar. Esta iba a ser una larga sesión de aseo. Levante todas las blusas y vestidos del suelo. Doble mis sabanas y colge mis uniformes. Ordene mis libros y limpie el espejo. Mis zapatos estaban horriblemente desordenados y todos mis perfumes y cosmeticos estaban desordenados. Valla día.

Pasaron dos horas y todavia me faltaba guardar algunos papeles importantes de la preparatoria. Me habia tardado de más y tenia miedo. No queria llegar tarde.

—¡Listo!— grite, mientras me paraba del suelo y bajaba las escaleras —Mamá, ya esta todo listo y me te...

—No hay agua.

¿QUE?

—¿Qué? mama, deja de bromear, tengo que alistarme para mi cita de hoy.

—No es broma, es verdad. — dijo mi hermano, que tenia Jabon en todo el cuerpo.

No, no, no, no ¡No!

Subí rapidamente y busque mi ropa. Baje de nuevo con mis cosas en mano y me dirijí a mi madre.

—Necesito mi celular.

—Cajon más bajo, cocina.

Corri rapido hasta la cocina y agarre mi celular. Revise si tenia bateria y salí corriendo aun más rapido. Necesitaba llegar con la abuela.

Al final, cuando llegue, faltaban 20 minutos para mi cita. Me bañe arregle y cuando vi la hora casí se me salen los ojos. Deberia estar en casa de Gemma para ir con su hermano.

—Abuela, por favor. ¡Prestame tu auto!

—No lo se, amor. ¿Que tal si te pasa algo?

—Abuela, tengo una cita y es de vida o muerte esto. Por favor.

Me tendío las llaves y salí corriendo.

El tráfico estaba de infarto. Me habia atrasado 30 minutos y eso que hace 20 minutos le dije a Harry que nos veriamos en el restaurante italiano. Mierda.

Llegue despues de media hora, valla día el de hoy.

—Hola, muy buenas noches. ¿tiene algo reservado?

—Sí, aam... ¿Harry Styles?

—Oh, el señor Styles salío hace 40 minutos con cara de pocos amigos...

Mierda.

Harry's Wife.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora