¡HOLA! LAMENTO LA DEMORA PERO LA INSPIRACIÓN EN OCASIONES SE VA Y TARDA EN REGRESAR, PERO LES AGRADEZCO A LOS POCOS QUE SIGUEN AQUI ESPERANDO POR EL SIGUIENTE CAPITULO. ESTE CAPITULO ES UNA VERSION EXTENDIDA DE LO PRIMERO QUE PASO EN EL CAPITULO 6.
SOLO LES PIDO UN POCO DE PACIENCIA PARA LOS DEMAS CAPITULOS PUESTA HISTORIA TIENE MAS POR DAR.
IGUAL, ESPERO QUE LES GUSTE TANTO COMO PARA AYUDARME A DIFUNDIRLA CON QUIENES CONOZCAN QUE TENGAN WATTPAD Y QUE LES GUSTE ESTE TIPO DE HISTORIAS
¡MIL GRACIAS!
CAPITULO 7
17 AÑOS DESPUÉS
Recorrer la ciudad en busca de un lycan problemático, solo lleva consigo una regla, nunca dejar que te vean.
Nadie podía saber que estaba "viva", al menos no en todo lo que significa esa palabra; para mi familia debía permanecer muerta, nunca podrían saber lo contrario.
Al menos esas fueron las palabras de William, el hombre que me dio una segunda oportunidad, todo aquellos después de oler el poco rastro de sangre que emanaba de mi cuerpo aquella noche en que fui abandonada como basura.
Llevábamos días rastreando a este lycan, primero causó problemas al norte de Rumania, dejando como resultado cuerpos destrozados al grado en que no podían ser reconocidos a simple vista.
Ese fue el primer suceso alarmante después de la Purga, aunque las autoridades encubrieron el hecho.
Después salió a la luz como una simple riña entre bandas; sin embargo, William lo notó enseguida, y ese fue el primer llamado para iniciar con mi trabajo.
Lamentablemente al ser la prometida del líder de uno de los aquelarres más viejos de América, habíamos sido invitados a la " Cálida bienvenida " del líder del aquelarre del este de Rumania y a su hijo.
Así que solo me dediqué a fotografiar al lycan en su forma natural, al terminar bajé de la terraza de un viejo hotel en el centro y emprendí camino al lugar dónde nos hospedábamos.
Pero sin sorprenderme, aquel presentimiento de que algo estaba por pasar, se presentó de nueva cuenta, dejándome una sensación de incertidumbre.
17 años antes
Mi última noche como humana, vaya aún la recuerdo fue la única y primera vez que hacía algo "incorrecto", incluso mi rommate se sorprendió de mi actitud esa noche, ni ella podía creer lo que veía y lo que hacía, en algún punto de la noche me desaparecí de su vista, y solo recuerdo el olor de los baños del bar en el que estábamos, la luz fluorescente de color azul, también las luces me hacía recordar por qué hacía esto, por qué yo una joven adulta, independiente, recién soltera, que nunca se había atrevido a beber más de tres copas de whisky fuera de casa, estaba ahora en el baño para discapacitados teniendo sexo con un completo desconocido, pero lo único que sobresalía de él era el ligero parecido en facciones con "Mi David", en medio de un buen sexo, justo cuando el hombre, que no recuerdo su nombre, había encontrado mi punto G, solté una risa sarcástica, al mismo tiempo en que pensaba en las palabras "Mi David". Era divertido, al menos para mí yo ebria, con olor a seco, empotrada en la pared y a punto de tener un orgasmo, encontraba todo esto divertido, ¡Vaya! ¿Por qué no había hecho esto antes?, ahora entiendo porque mi amiga lo hacía tan seguido, por qué casi no se encontraba en el departamento, es excitante toda esta parafernalia.
Mi respiración era errática, y el estar pensando en estas cosas mi orgasmo está cediendo, por lo que decidí mover mi caderas al mismo ritmo en que el me penetraba para poder tener mi orgasmo y largarme por un último trago e irme a casa ponerme la camisa de David para hundirme en mi cama, y seguir con mi miseria hasta el siguiente día, semana o mes, todo dependerá de cuanto me cueste el olvidar a aquel al que una vez llama "El hombre de mi vida", que ridículo, ahora que lo pienso, estaba tan enamorada, como para llamar así a alguien a quien apenas conocía.
Uno, dos, tres, cuatro... seguí contando hasta que sentí como un escalofrío escalaba de mis piernas hasta mi nuca anunciado la llegada de mi ansiado orgasmo, quince dieciséis, diecisiete, y justo en el dieciocho llegó, haciendo surgir mi espalda y abrazar con fuerza al sujeto que me tenía agarrada por el trasero. Solo me sostuvo unos cuantos segundos para después bajarme, quitarse el condón, si así es como leyeron fue lo suficientemente decente como para usar uno, hacerle un nudo y tirarlo en el bote, yo solo me dedique a bajarme el vestido y subirme las bragas. Salimos del cubículo para encontrarnos con las caras de sorpresa de cuatro chicas quienes estaban tratando de retocar su maquillaje en el espejo de los sanitarios. Note sus miradas posándose unos cuantos segundos en mi para después detenerse en los de mi compañía y agrandar más los ojos, solo me dedique a ignorarlas para caminar a la salida.
En medio de tanta gente, ebria, me hice camino hasta tratar de encontrar a mi amiga, quien al verme soltó, lo que supongo era una maldición.
