Secret Of Love | Min Yoongi ﷼ ©

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Namjoon estaba limpiando la mesa cuando Yein entró en el comedor.

– Yoongi ya se fue a la ciudad, señora.

– Preciso las llaves de mi auto.

El criado continuó colocando la vajilla usada en la bandeja.

– Me parece que no es una buena idea.

Yein le lanzó una mirada irritada.

– Yoongi está al tanto de mis planes para hoy.

– Pero no concuerda con ellos, ¿no?

– Tengo cosas que hacer, lugares a donde ir.

– A la tienda —Namjoon concluyó. — Donde va a estar trabajando todo el día.

– Tengo que cuidar de mis negocios —Yein dijo con firmeza.

– Yoongi va a desaprobarlo.

Ella tomó el dinero y la cartera, alcanzó las llaves del auto y se volvió para partir.

– Quédate tranquilo. Haré que él sepa que me avisaste.

– Yo la llevo.

– Gracias. —Yein sabía del grado de lealtad de Namjoon a su patrón. — Pero no es necesario.

 
La tienda quedaba localizada en una galería con varias boutiques de renombre, y tenía una clientela regular.

 
Yerim poseía mucho talento en el arte de los arreglos florales, y Yein se encargaba de la administración, la contabilidad, hacía pedidos, atendía a los clientes.

 
Cintas, tarjetas, arnés y un toque de magia habían hecho que Flores & Buqués fuera muy conocida y renombrada en la ciudad.

 
Yein inspiró hondo el aroma que llenaba el aire, dulce y embriagante.

– ¡Yein! ¡Que bueno verte! ¿Cuándo llegaste?

– Anoche.

Un abrazo tan afectivo hizo que su depresión volviera a apoderarse de ella. Su hermana lo percibió en ese mismo instante.

 
– Y entonces, ¿qué está pasando?

– ¿Cómo así?

– No entendí nada de los mensajes que dejaste en el contestador automático. Y no creo que Momo haya sido la única razón para tu partida —Yerim fue diciendo. — Siendo así, ¡empieza de una vez!

 
Yein podía intentar desviar el asunto, pero, ¿para qué?

– Estoy embarazada.

Hubo una sorpresa inicial, pero enseguida su hermana abrió una gran sonrisa afectuosa, la expresión tierna.

 
– ¿Y por qué no llegaste aquí bailando y saltando para celebrar?

– No fue planeado.

Yerim le lanzó una mirada de quien sabía que faltaban informaciones.

– ¿Y ese es el problema?

– No exactamente.

– ¿Qué es lo que te está afectando? ¿No me quieres contar de qué se trata?

Yein permaneció en silencio algunos segundos, y Yerim habló, aún más cariñosa:

 
– ¿Le contaste a Yoongi lo que hizo Momo? ¿Cuan destructiva ha sido?