03 | Tejido.

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Sin duda tenía la novia más extraña que pudiese tener, no tenía idea de porqué lo estaba haciendo ir a lados a los que normalmente no iría, no podía dejarlo estar en paz en su apartamento después del trabajo, si realmente quisiera hacerlo feliz, no lo mandaría a tiendas por chocolates, ella le daría los chocolates en persona, pero no, su odioso trabajo era más importante al parecer, él ya le había dicho que con lo que ganaba, y lo poco que le había quedado de la herencia Malfoy, que el ministerio no decomisó, podrían tener una vida sino despreocupada, sí bastante cómoda, pero ella simplemente se había ofendido.

Ese día, lo había enviado a la Madriguera, no tenía idea de porqué, simplemente le había dicho que fuera a ver a su madre después del trabajo.

Observó a su alrededor, todo estaba como siempre, lleno de cosas y un cálido sentimiento que lo hacía sentir incómodo, observó la foto del difunto Fred Weasley, suspiró y se quitó el abrigo para colocarlo en el respaldo del sofá.

Avanzó hasta el sonido que venía de la cocina, le sonrió a la mujer mayor y regordeta, que le sonrió bastante feliz de verlo, pero que vueltas daba la vida, pensó divertido.

—Oh, querido, Ginny me dijo que vendrías después del trabajo.

—Ya terminó el trabajo, señora Weasley –comentó divertido.

—Cielos, la edad ya me está afectando al parecer –soltó una risita divertida –tengo que decir que es el mejor trabajo que he hecho hasta ahora y mira que tengo años de experiencia.

La mujer se alejó, dejando a Draco desconcertado por lo que había dicho, no comprendía nada, pero al parecer era de familia, también le había costado un poco comprender a Ginny al inicio.

La mujer regresó con una caja bastante elegante, con un moño color plata aunque la caja no fuera verde, sino de color negro, se veía elegante, sin duda la pelirroja lo conocía más de lo que quisiera admitirle a los demás.

—Espero que te guste, Ginny solo me dio dos semanas para preparar esto, no lo hizo ella, pero aun así, es con mucho cariño, ¿de acuerdo?

—Ah, muchas gracias –le sonrió incómodo.

—Bien, ya que estás aquí, ¿te quedarás a cenar?

—No puedo, tengo que ir a ver a mi madre –mintió descaradamente.

—Oh, ya veo, en ese caso, la saludas de mi parte.

—Claro que sí, hasta luego, señora Weasley.

Draco llegó a su apartamento, abrió la caja después de la cena con poco entusiasmo, mientras más se acercaba su cumpleaños, más deprimido se estaba sintiendo, y no le agradaba mucho.

El papel blanco lo hizo poner los ojos en blanco, la nota sobresalía pero decidió dejarla al último, sacó el obsequio que no era más que uno de los famosos suéteres tejidos Weasley, color gris oscuro, con una D color verde, el estambre era de alta calidad, sonrió encantado, aun recordaba preguntarle, ¿Qué pasa con esos suéteres?, un poco con envidia, otro con real curiosidad.

El papel blanco lo hizo poner los ojos en blanco, la nota sobresalía pero decidió dejarla al último, sacó el obsequio que no era más que uno de los famosos suéteres  tejidos Weasley, color gris oscuro, con una D color verde, el estambre era de alt...

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Hola, hola, aquí estoy con el tercer aporte de esta bonita dinámica, como siempre, esperando que sea de su gusto, muchas gracias por todo el apoyo, nos leeremos mañana, o eso espero ;)

Dracoversary || DrinnyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora