05 | Picnic.

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Elevó la vista cuando el corto silencio se vio interrumpido por el cantar de las aves, el aire mecía sus cabellos que hasta ese momento, había pensado que los había aplacado con toda la laca que se había puesto esa mañana antes de ir al trabajo.

El tonto mantel estaba colocado debajo de un gran árbol, estar ahí, solo, disfrutando de ese tonto picnic él solo no era la mejor forma de pasar "su hora de comida", hubiese preferido quedarse trabajando, pero cuando la nota de Ginny apareció en su escritorio, encontró difícil no seguirle la corriente.

Estaba ahí, sentado bajo la sombra de un árbol, vistiendo un caro traje sastre, sobre un ridículo mantel que distinguía su estadía ahí como un picnic, engullendo ridículos emparedados en forma de triángulo y bebiendo zumo de calabaza como si fuese un niño.

Su idea perfecta para un picnic, era ropa cómoda, con Ginny Weasley sentada a su lado en ese mantel a cuadros, bebiendo champagne o whisky de fuego, mientras comían botana buena, pero claro, ella en el fondo, seguía siendo esa joven salvaje y simple, ¿qué importaba lo bien que ganaba ahora?

Las cosas simples enamoraban a Ginevra, y lo había aprendido en el transcurso de los años, y le había costado demasiado aceptar que no lo amaría más si le regalaba un diamante, o le regalaba un chocolate.

Suspiró agobiado por la repentina soledad de la que era capaz de consumirlo si no estaba ella a su lado, pero era comprensible, ella tenía derecho a sentirse realizada por completo en el ámbito laboral, y él no era nadie para impedirle vivir su sueño, aunque eso significara extrañarla como un loco, o estar en un picnic solo a pocos días de su cumpleaños.

¿Qué importaba todo eso si ella podía ser feliz y sentirse plena?

No había mucho en la vida que le importara, ver a su novia siendo feliz, le importaba mucho.

Le dio un trago al zumo de calabaza, imaginando su presencia a su lado, haciéndole sonreír por un instante, suspiró una vez más, dándole una mordida al emparedado que suponía había preparado Molly Weasley.

Observó a su alrededor una vez más, perdiéndose en el horizonte, en unos minutos más tendría que volver a la oficina y trabajar las horas extras que se había propuesto, aunque, si era honesto, todos esos planes que Ginevra había hecho para él, en realidad habían impedido seguir su intención de perderse en las pilas interminables de papeles.

Es como si pudiese leer su mente, o mejor, lo conocía tan bien que lo prefería disfrutando de un picnic en soledad, que saboteándose en el trabajo infinito, como fuera, ella siempre pendiente de él.

Agradecía a Merlín haberla puesto en su camino cuando lo hizo, no había mejor destino que el estar con ella el resto de sus vidas, compartiéndola a su entero placer, quizá por esa razón, decidieron no casarse, aunque fuese ridículo que siguieran siendo novios a los casi 42 años de Draco.

Hola de nuevo, pequeños saltamontes, aquí estoy con un nuevo aporte de la dinámica por el cumpleaños de Draco, esperando que les guste y deseando que la idea original cambie un poco, porque no quiero que me odien :O= así que bueno, gracias por el ...

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Hola de nuevo, pequeños saltamontes, aquí estoy con un nuevo aporte de la dinámica por el cumpleaños de Draco, esperando que les guste y deseando que la idea original cambie un poco, porque no quiero que me odien :O= así que bueno, gracias por el apoyo, y nos leeremos en el siguiente aporte ;)

Dracoversary || DrinnyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora