Cap. 10

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Todo el lugar estaba en silencio la pantalla volvió a oscurecer, Ángel fue el único que no pudo mantenerse en pie y cayó de rodillas al suelo, sus lágrimas no paraban de recorrer sus mejillas.

- voy a matarlo - Roy hablo con una voz que causó un escalofrío en los presen tes, miraba con ojos fríos en dirección de la pantalla - juro que voy a matarlo -

- Tuney - Lily salió corriendo a los brazos de su hermana la rubia no podía dejar de temblar.

Su futuro.

Era una pesadilla.

- Ángel - Dan se acercó a su amigo en el suelo, se dedicaron miradas frías, intercambiaron miradas también con Roy y Emil, sabían perfectamente lo que harían una vez salieran de aquí, sin más lo ayudo a ponerse de pie pero las lágrimas siguieron saliendo de sus ojos.

Petunia guío a Lily de regreso a su asiento, sus amigos también tomaron sus lugares, en ningún momento voltearon a verla.

Sentian tanta vergüenza, tanto coraje por no poder evitar lo ocurrido en la pantalla, estaban tan frustrados por no poder proteger a su hermana.

- tu prioridad siempre será Lily - susurro James, no era una pregunta, era una afirmación que creía fielmente.
Aún después de lo mostrado en la pantalla la rubia parecía solo estar al pendiente de su pequeña hermana.

- soy la mayor - susurro mirando a James y llamando la atención de un pelinegro tras ellos - su bienestar siempre será primero -

- ¡¿Y el tuyo dónde está?! - grito exaltada la peliroja - ¿Tú en que lugar quedas?, ¡No vuelvas a acercarte a ese hombre, Tuney!, ¡No te cases con él!, ¡Por favor!, ¡No me dejes! - lloraba desconsolada.

- tranquila - la abrazo y comenzó a acariciar su cabello - eso no a pasado -

- (ni pasará) - pensaron los cuatro mugles con rostros oscurecidos.

Una vez que Al salió del shock inicial se levantó y se dirigió en su dirección, Petunia sintió su corazón estrujarse al ver sus ojos rojos e hinchados por el llanto.

- todo está bien - susurro tratando de consolarlo mientras extendía su mano y Al le permitía acariciar su mejilla.

- si - susurro más para si mismo, intentando convencerse, obligándose a recordar a su abuela en su presente, con su sonrisa enorme, sus abrazos de oso, sus galletas llenas de cariño y sus pláticas calmadas y divertidas al mismo tiempo.

- (sabía que esto sería entretenido) - Ágata sonreía en grande, totalmente contenta por tantas emociones reflejadas en los rostros de los estudiantes.

- ¡Ahora! - exclamó con una sonrisa enorme ganando la atención de los presentes - Pongamos la misma atención a nuestro siguiente protagonista -

La pantalla se encendió, mostrando los pasillos de Hogwarts siendo recorridos por pocos estudiantes, sin embargo, se enfoco en un chico alto de ojos gris claro y larga cabellera platinada con un rostro inexpresivo, sus pasos eran elegantes los suaves movimientos de su capa le daban un aire aristócrata.

Lucius Malfoy, de 16 años.

Los merodeadores y el trío de oro fruncieron el seño ante la imagen.

- ¿Porque desperdiciamos tiempo dándole atención al oxigenado? - susurro Sirius totalmente hastiado.

James gruño débilmente, Lily frunció el seño (recordando que el rubio siempre le mandaba un insulto cada vez que la veía), Remus soltó un suspiro pesado, del grupo de serpientes, Malfoy era con quién más discutía.

¡Hogwarts reacciona! (invitados especiales) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora