CASTIGO ☆Johnten☆

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   ══• ೋ•✧ TARDE ✧•ೋ •═

De verdad Ten Lee no pensó bien las cosas es más probablemente ni siquiera lo hizo, que había pasado bueno, como siempre rebelde, pero el salir de la mansión de su novio sin avisarle y llegar a las 12 de la noche no fue la mejor cosa que pudo hacer.

Al llegar fue mandado directamente a bañarse y a dormir, pensó que su novio no se había enterado ya que estaba resolviendo asuntos importantes pero por favor estamos hablando de John Suh el mafioso más grande de Corea, claro que se iba a enterar.

Ya eran las 8 de la noche y está vez Johnny fue el que entró al cuarto de Chittaphon para indicarle que lo siguiera hasta su despacho, y el menor ya sabía a dónde iba todo esto pero por favor no!!.

Lo siento querido Ten debiste pensar mejor las cosas.

Al llegar a la oficina el mayor lo cargó y lo colocó en la cama que tenía en su cuarto de juegos.

Le dió un beso en la nariz —Taehyung, ¿te gustó quedarte hasta la madrugada en el centro comercial mmm?. —el mencionado solo bajo la cabeza arrepentido.

Al no escuchar respuesta Johnny empezó a quitar la playera morada de su pequeño, al igual que los shorts blancos dejandolo en sus bragas negras.

Lo volteó dejando su tracero al aire, encadenó solamente sus manos y se acercó al armario donde saco unas cuantas cosa una de ellas era un flogger, este no dejaba marcas pero si causaba una gran dolor —No quiero gritos o te haré callar pequeño —. Y así comenzó a dar azotes a el bonito traserito acanelado.

Ten trataba de no gritar porque le estaba doliendo demasiado pero el morder sus labios no ayudó mucho así que soltó un grito el cual hizo fruncir el ceño al mayor —Te lo advertí bonito —. Tomó una mordaza color negro y la ató en su boca y cabeza para que así Ten dejara de gritar.

Dió unos cuantos azotes más a su trasero y lo desencadenó para voltearlo boca arriba, de la mesa agarro un arnés para el pecho del menor y se lo colocó, Johnny se agachó y comenzó a jugar con los pequeños pezones rosados, pellizcando suavemente hasta decidió llevar uno a su boca y una vez a dentro comenzó a chuparlo y succionar este, antes de apartarse lo mordió sacándole un chillido a Ten el cual fue callado por la mordaza así escuchándose sola mente un sonido ahogado.

El mayor decidió dejar ahí su juego para comenzar con lo fuerte, dejo nuevamente a Ten boca abajo y encadenado de las muñecas con la diferencia que ahora sus rodillas estaban en el colchón dejado su entrega y culo a la vista de Johnny.

Este se acercó lentamente con algo en las manos, nada más y nada menos que unas bolas anales, la tira era bastante larga.

Colocó un poco de lubricante que tenía en la otra mano para soltar la botella después y sin cuidado introdujo un dedo de golpe en la entrada de Ten, comenzó a moverlo rápidamente provocando que el de abajo se arquera, metió un segundo con la misma intensidad solo que duró menos ya que retiró su mano para proceder a meter las bolas.

Fue metiendo una a una en la entrada y cuando todas estuvieron adentro las sacó de golpe haciendo que el cuerpo del pequeño temblará y cayera a la cama —En ningún momento dije que te podías acostar, en cuatro ahora Chittaphon —. Acató la orden como su mayor lo pidió.

Johnny volvió a meter la bolas anales y las sacaba un poco y las volvía a meter con irregularidad, Ten sentía como su entrada se abría, y como se almodaba a las bolas.

Cuando Johnny vio que la entrada estaba bien dilatada comenzó a meter y a sacar cada vez más rápido el juguete que tenía en su mano y con la otra tomó el miembro contrarió y empezó a subir y a bajarlo.

Ten gemía aunque estos no eran escuchados por la mordaza, sentía como la gran mano de John jalaba su miembro, después sintió como las bolas eran dejadas de mover y escuchó el cierre del pantalón del traje de su novio era bajado.

Johnny saco su gran miembro de sus pantalones y lo masturbo un poco, se acercó a la palpitante entrada de Ten y aún con las bolas adentro fue ingresando su pene lentamente.

Ten grito de dolor pues su ano estaba abriéndose dolorosamente al tener que soportar las bolas en él y el gran miembro del mayor.

Johnny solo pudo meter la mitad de su miembro puesto que la entrada era demasiado pequeña, soltó un gemido bajo pero grave al empezar a moverse lento, ya que el ano de Ten lo apretaba y las bolas también hacían fricción en su pene.

Decido retirar el juguete para así poder embestir a Ten, lo tomó por la cadera y comenzó a embestir fuertemente el trasero del menor.

El pequeño sentía ardor por los golpes que daban la pelvis del activo contra sus nalgas pero una ola de placer lo empezó a invadir de repente cuando la caliente mano de su novio envolvió su pene y comenzó a masturbarlo.

Cuando el menor estaba a punto de correrse, Johnny dejo de embestirlo y masturbarlo saliendo de él y quitando las cadenas de las muñecas y quitando la mordaza.

Se sentó en la cama e indico que Ten que se pusiera de rodillas, el mencionado lo hizo y sabiendo lo que Johnny quería puso sus manos atrás de su espalda y acercó sus labios al miembro del mayor, comenzando a dar lamidas en la punta de este.

—Abre grande —fue lo que dijo John antes de meter toda su longitud en la boca del pequeño, hizo que llegara al fondo y ahí lo mantuvo con su mano en la cabellera contrario para que así no se pudiera separar.

Ten sentía como el pene tocaba lo más profundo de su garganta, además se estaba quedando sin oxígeno y empezó a arquear su garganta, el contrario al notar esto lo libero para que tomara un descanso, el cual no duró mucho ya que volvió a meter su miembro en la boca.

De nuevo lo soltó y agarro su pene para así empezar a masturbarlo delante de la cara de Ten quien esperaba lo siguiente —Cierra tu ojitos bonito—. Después de que el pequeño acatará la orden sintió como las grandes tiras de semen de Johnny cubrían su cara.

John gimió ronco e hizo que Ten se sentará en su regadazo aún con sus ojos cerrados y comenzó a lamer su propia escencia la cuál había caído en la cara del menor.

Una vez su cara "limpia" lo acostó de nuevo en la cama para limpiar el sudor y fluidos del cuerpo de su bonito novio, como de costumbre saco un lindo conjunto para cambiarlo pero sucedió algo que Ten no esperaba.

En sus manos Johnny tenía un Pug anal de acero con un corazón en la parte que iba afuera —Es parte de tu castigo bonito.

Se acercó al cuerpo cansado que reposaba sobre la cama y abrió sus piernas para poder meter el juguete, una vez adentro tomo las bragas de encaje que había escogido para su novio se las colocó junto con una pijama de ceda rosa.

Peinó sus cabellos y lo alzó para ponerlo de pie —Ve a tu habitación bonito y ya duérmete, si te sacas lo que te metí te va ir muy mal —Johnny le dió un beso en su frente y otro en sus labios esponjosos, camino hasta su escritorio y se sentó para seguir trabajando, Ten trato de caminar hasta la puerta puesto que con el pug metido era bastante difícil hacerlo.

Tendría que dormir con esa cosa metida en él, eso le pasaba por llegar tarde.