30 días otp «NSFW» (Saiouma)

Cosplayando

🌸TW:
-Nsfw

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Pov. Nobody

Hoy era un día de esos en los que quieres morir y que nadie te recuerde. Que te trague la tierra para no ser visto jamás.

Lamentablemente para Kokichi, Tsumugi se le había ocurrido hacerle un traje de maid para "una noche especial" con Shuichi.

Kokichi: Tsumugi, no creo que–

Tsumugi: Tu cállate y hazme caso. ¡Te verás muy lindo y a Saihara le gustará!

Kokichi: Pero no soy mucho de este tipo de cosas...

Por más que el pelimorado intentara convencer a su contraria en no hacer nada. Al final solo acababa de empeorar las cosas, pues le daba más motivación.

Tsumugi: Ay vamos, los trajes de maid son muy lindos y no son cosplay como tal. Es un traje de sirvienta, no le veo nada de malo.

Kokichi: Con esa sonrisa no te creo ni un pelo.

Ante su respuesta, Shirogane no pudo más que reír nerviosa, logrando que Kokichi rodara sus ojos un poco cansado por este asunto.

Tsumugi: Cómo sea... Solo ve a casa y recibelo con ese traje. Yo sé que le va a gustar.

Kokichi: Como digas, señorita mandona.

Tsumugi: ¡Ah! Eso me recuerda al nombre de Madoka, es un personaje–

Kokichi: Sí, a nadie le interesa. Bye~

Y con eso se dió media vuelta dispuesto a irse, obviamente no haría nada de lo que le dijo.

Regresó a casa y simplemente se acostó en la cama, tirando la bolsa donde venía el traje hacia cualquier lado.

Kokichi: Esa loca...

Dijo suspirando, viendo hacia la bolsa con cierta frustración.

Así se quedó un rato, y sin darse cuenta, le entró un interés por el traje. Preguntándose cómo se vería, o cómo reaccionaría su pareja al verlo vestido así.

Rápidamente, sacudió su cabeza para dejar de pensar en esas cosas. Aunque pensamientos intrusos volvían a aparecer.

Kokichi: Solo es un momento... Nadie me verá... Maldita sea, Kokichi.

Se levantó y fué a alcanzar su bolsa, sacó el contenido. Para su sorpresa, era un vestido de maid normal. Lo único que a Kokichi no le acababa de convencer era lo corto que era.

Después de suspirar por la tremenda tontería que haría, se dispuso a ponerse el traje. Procurando que todo fuese rápido para acabar con su sufrimiento que él mismo empezó.

Al final, tenía razón. Lo corto del vestido no le gustaba, así como que la parte del pecho estaba muy descubierto para su gusto. Pero, dentro de lo que cabe, era un lindo traje.

Se puso a verse más detenidamente, dándo vueltas y divirtiéndose un poco sin cambiarse.

Eso hasta que es escucho pasos acercarse a donde estaba él, entrando en pánico.

Iba a quitarse el vestuario, pero ya era demasiado tarde. Shuichi había llegado y ahora lo había visto así.

Ambos se quedaron estáticos, poco a poco sus rostros fueron tomando un color rojizo intenso.

Saihara: ¿K-Kokichi?–

Kokichi: ¡NO ES NADA!, ¡TÚ NO VISTE NADA!

Dijo tratando de bajar su falda, pues podía notar como la mirada de Shuichi se concentraba ahí.

Kokichi: Eres un pervertido, mirándome de esa forma... No lo esperaba de tí~

Tenía que volver a su papel, no podía mostrarse de esa forma.

Saihara: ¡N-no! Yo–

Kokichi: Está bien~ eres el único que le doy permiso para esto.

Acercándose, se paró de puntas para poder besarlo, siendo correspondido casi de inmediato.

Pronto ese beso se convirtió en uno apasionado, separándose para tomar aire antes de volver a unir sus labios.

Saihara no desaprovechó la oportunidad y lanzó a su pareja a la cama, poniéndose encima de él.

Kokichi: Hmm~ ¿así que a Saihara-chan le gusta hacer esto rudo?

No contestó, simplemente se sonrojó un poco. Aunque eso no le impidió en seguir, pues con sus manos empezó a desabrochar el vestido, acariciando su cuerpo de paso.

Kokichi: Vamos, amo. Haz lo que te plazca conmigo~

Saihara: N-no me digas así... Es vergonzoso.

Antes de que pudiese responder, Saihara continuó poniendo su pierna entre las de su novio, presionando un poco esa parte mientras besaba su cuello.

Kokichi quería sentirlo más, así que empezó a mover sus caderas mientras que se aferraba a los hombros de Shuichi, soltando pequeños gemidos casi inaudibles.

Saihara: Quiero escucharte más...

Decidido, bajó la ropa interior del más bajo y, después de lubricar sus dedos con su saliva, lo empezó a preparar.

Kokichi: Shuichi... ¡S-solo entra ya!~

Saihara: ¿Seguro?

No dudo en dar una respuesta positiva, así que sin más decidió proseguir.

Saihara bajó sus pantalones y ropa interior algo nervioso, pues Kokichi no paraba de verlo y admirarlo. Quedando prácticamente embobado viendo su cuerpo.

Una vez logrado su objetivo, alineó su miembro en su entrada, frotandolo y molestandolo un poco antes de seguir.

Kokichi: Por favor, métela de una vez~

Parecía que eso hizo que agarrara confianza, pues empezó a entrar poco a poco. Cuidando siempre de no lastimarlo.

Después de unos segundos, Ouma empezó a moverse en señal de que podía continuar, cosa que hizo sin pensar más.

Todo comenzó de una forma tranquila y dulce, aunque no se puede decir lo mismo unos minutos después, pues la lujuria ya los había alcanzado a ambos. Y en busca de llegar más profundo, Saihara levantó una de las piernas del contrario para ponerlo en su hombro, logrando aumentar sus gemidos, así como que comenzara a retocerse de placer.

Kokichi: ¡Ahí! Mgh~ se siente muy bien ahí... ¡Ah!~

Asintiendo, Saihara empezó a embestir más rápido a su pareja, procurando que siempre golpeara su punto dulce.

A este grado, ambos no podían hablar más que pronunciar sus nombres y gemir. El placer había cegado completamente a ambos.

No necesitaban de palabras, sabían que estaban cerca y que la sensación habría de acabar pronto. Así que, con un beso, ambos se corrieron, siendo que su último gemido fué callado por el contacto de sus labios que se negaban a separarse.

Aunque al final tuvieron que hacerlo, pues la falta de aire les impedía seguir, dejándolos jadeando intentando recuperar la compostura.

Estaban cansados, así que Saihara se acostó con su pareja y, con un abrazo, ambos se durmieron cayendo en un sueño profundo.

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OK! Sé que prometí sacar dos capítulos, pero hoy estuve muy ocupada [cry]

Mañana les recompensaré todo. Perdonen las molestias

Ahora sí, bye y perdón otra vez.