Pluma Cielo

13. Al fin frente a ti

Jimin salió de su nueva casa, pues había decidió vender la que perteneció a sus padres, además Hoseok ya no viviría a su lado, ya que vivía con Taehyung. Después de una semana de aquel incidente podía estar más tranquilo sin ningún demente detrás de él. Caminaba tranquilamente por las calles de la ciudad, su novio lo había citado en la estación de policía para algo muy importante. Se sentía mejor pues salir solo era algo que siempre había querido, poder estar en la calle viendo a las personas y poder pedir algo con su propia voz. 

Le alegraba que su amigo haya conseguido novios, pues estaba más feliz, cuando habían hablado por teléfono esa mañana, Hoseok le había contado sus planes de vivir permanentemente con sus novios. Así que había puesto en venta la casa que había adquirido al lado de la de Jimin. Jimin escuchaba su voz eufórica y sonrió pensando en que por fin su amigo tendría a alguien que lo amara a su lado, luego le comentó que él también se había mudado a una casa muy cerca de la familia de Jungkook   y que había vendido su casa cuando se había quedado en la casa de sus suegros, pues pensaba empezar en otro lugar.

Cuando vio la estación de policía sonrió feliz pues su novio había tenido turno toda la noche, quería verlo y poder charlar con él del día de campo al que asistirían. Cuando preguntó por él vio como una de las agentes lo veía despectivo, Jimin reconocía el demonio de la envidia y de los celos, se sentó en una sala a esperar a su novio, de pronto vio a un hombre guapo que se sentó frente a él y tomó una revista. 

— ¡Hola! ¿Esperas a alguien?

—  A mi ¡Novio! — dijo Jimin acentuando el Novio y viendo a la agente que lo había atendido. El hombre hermoso sonrió y vio  a la agente fulminando al bonito rubio. 

— Al parecer te odia... Entonces supongo que tu novio es el agente Jeon.

—  Bueno supongo que es el único semental que puede despertar esos impulsos en las suripantas... Pero es mío solo mío. —  dijo viendo nuevamente a la mujer que archivaba algunos documentos. 

—  Soy Kim SeokJin.

—  ¿Kim SeokJin? ¿No eres un maniático que quiere entregarme de esclavo sexual a los mafiosos? — SeokJin empezó a reír con una risa tan escandalosa que hizo reír a Jimin. Ambos  estaban riendo y la chica solo los veía con un rostro enojado. 

— Eres tan ocurrente, no soy eso... Soy el esposo del comandante de la policía, el único que tiene contactos con la mafia es mi padre. Pero eso es un secreto.

— ¡Oh! Yo tengo amigos mafiosos, pero es un secreto. Eres muy guapo.

— Lo sé, de no serlo no hubiese conquistado a Nam, pues él es hijo de uno de los mejores agentes del servicio secreto y yo soy el hijo de un mafioso, bueno es consiglieri de él y administrador de los Cafés de esa organización. 

—  Bueno es cierto... Sabes yo hasta hace poco era mudo, pero mi medicina era realmente exquisita... Mi Gukk es impresionante.

—  Eres un diablillo, pero muy adorable. 

Ambos conversaron y para molestar más  a la agente Jin le solicito café con galletas, al ser el esposo del jefe tuvo que obedecer. Cuando Jungkook terminó el papeleo del arrestó que había hecho durante un operativo, estaba satisfechos por los resultados obtenidos ya que significaba que su novio estaba fuera de peligro. Tenía una herida de puñal en el brazo, pero no era nada grave y aunque le dolía el abdomen de la herida de bala no le importó nada porque de ese operativo dependía la seguridad de su familia.

Al llegar a las sala de espera puso su rostro más serio pues la agente que atendía ese espacio siempre trataba de coquetearle, lo que no sabía era que su novio estaba en la sala y tenía  la agente bajo control con sus miradas asesinas y sus comentarios.