(TN) es una madre divorciada con dos hijos y Levi es un padre viudo con tres hijas.
Ambos se conocen en una desastrosa cita a ciegas en la que ambos sólo sacan una cosa en claro: no desean volver a verse nunca más.
Pero su destino se une en un asom...
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-¿¡él uso la clásica llamada emergencia contigo!? -
Le había contando sobre la cita a mi mejor amiga, Hange. Ella estaba más furiosa que yo con respecto a la dichada cita y como todo fue una mierda.
-¡sí! Me hizo quedar como una idiota -
Lloriqueaba sintiéndome como una total imbecil, me había avergonzado frente a las chicas de enormes senos, quedando como una tonta que su acompañante la había dejado por preferir escapar.
-ya, tranquila, todos hemos tenido una mala cita no te pongas mal - palmeó mi espalda para hacerme sentir mejor, tratando de animarme. -hay malas citas a ciegas, y él fue la tuya - de repente hizo una pausa y frunció el seño volteandome a ver fijamente -¿quién te hizo esa estúpida broma? -
Yo baje la cabeza aún más avergonzada aunque con un poco de coraje por lo que pasó con respecto a esto.
-una de las madres del salón de Connie- me sentía apenada pero eso no quitaba el hecho que me enfurecia como se había comportado en el pasado esa arpía mugrosa -se la pasaba presumiendome a su vida perfecta, siempre hablando sobre su "amigo Levi" - giré los ojos con ironía, haciendo comillas con mis dedos índice y medio. Solté un bufido y continue -Levi, Levi mi gran amigo Levi, ¡Oh te tengo que presentar a Levi! - imitaba la voz de la fastidiosa de la señora.
-pues es una mentirosa y una idiota - soltó Hange molesta por esas estúpidas frases. -deberías drogarla y raparle el cráneo -lo menciono con una sonrisa sádica que a cualquiera le daría miedo.
Acto seguido el teléfono de ella comenzó a sonar indicando una llamada entrante.
-¿Erwin? Hola - saludo a la otra persona en la llamada con una voz algo ¿coqueta? -si claro que puedo hablar estoy desocupada ahora -
Mire a mi amiga con falso dramatismoya que prácticamente había negado mi existencia en la habitación.
De manera "disimulada" escuchaba la conversación de mi compañera, ya saben era la clásica charla de pareja. Yo giraba los ojos con fastidio por la situación ya que me ignoraba en su totalidad.
Un "y yo te amo" finalizó la llamada y mi amiga giro su vista a mi. ¡Al fin me volvía a prestar atención!
-¿en serio le dijiste la palabra con "a"? - dije incrédula de lo que había escuchado.
-¡sí! La dijimos anoche- mencionó realmente emocionada por ese avance.
-¿por qué no me lo habías dicho antes? - realmente estaba muy orgullosa de mi mejor amiga, sonreí mientras le daba un abrazo.
-(TN) tuviste una cita horrible y lo que menos quería es que te sintieras peor - dijo justificando porque no me lo había contado. -realmente me preocupa lo sola que estás -
