Poppy ganó mucha popularidad en el instituto de Hawkins gracias a ser la hermana pequeña de la famosa Nancy Wheeler y la hermana mayor del no tan famoso Mike.
Tras haber pasado por años difíciles en los que junto a sus hermanos y amigos han tenido...
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━━━EN CUANTO POPPY escuchó que el timbre sonaba y que su madre la llamaba desde la entrada de la casa gritando que Chance la esperaba en la puerta, maldijo por lo bajo. Pasó sus manos por su cabello con nerviosismo y después le dio un golpe al colchón de la cama con molestia.
—Qué, oportuno —Susurró para sí misma.
Estaba esperando a que Dustin, Robin, Max y Steve la recogieran para comprar comida a Eddie, intentar hackear la radio de policía con Cerebro —una antena que pusieron en una pequeña colina el verano pasado que sirvió para escuchar llamadas confidenciales de los rusos— e ir hasta el cobertizo de Porricky. Pero si ahora Chance aparecía le iba a distraer, y ahora mismo Chance le importaba un comino.
Suspiró y bajó las escaleras de la casa hasta que llegó a la puerta. Karen Wheeler miraba a Poppy con las cejas alzadas, pues un chico había ido a verla a casa y ella jamás había hablado de él. Aunque Mike hubiera hecho alguna que otra broma en alguna cena sobre Chance, sus padres no habían llegado a atar cabos.
Chance la esperaba en la puerta de la casa con su otra chaqueta de baloncesto de Hawkins de repuesto puesta, pues Poppy tenía la otra que él le había dejado. Ella intentó sonreír cuando se miraron a los ojos.
—¿Qué haces aquí, Chance?
—Os dejaré solos —Dijo su madre dirigiéndose hacia la cocina.
Poppy miró hacia atrás para vigilar a su madre hasta comprobar que efectivamente se había marchado y los había dejado a solas.
—Quería hablar contigo —Chance metió las manos en sus bolsillos y se acercó a Poppy, pero instintivamente ella se alejó. Él frunció el ceño pero no dijo nada—. Ayer todos quisimos hablar contigo pero no había manera de encontrarte.
—Estuve... tratando de despejarme. Quería estar sola.
—Lo entiendo. Todos estamos muy afectados por lo de Chrissy —Chance sacó una mano de su bolsillo y agarró la de Poppy sin que a ella le diera tiempo a reaccionar—. Pero puedes pasar por todo esto con nosotros, con compañía.
Poppy suspiró y miró a otro lado, sin muchas ganas de conversación.
