Un beso bajo la luna© [✔]

Capítulo 14

Mis ojos empezaron a abrirse poco a poco y a medida que mi vista se iba aclarando, el dolor de cabeza se pronunciaba y era bastante horrible, pero no era lo peor de todo, al levantarme de la cama el mundo se me movió y no solo eso, cuando mi vista se adapto a la luz que entraba por la ventana vi una habitación en la que jamás en mi vida había estado y una cama, que jamás había usado, de inmediato entre en pánico y lo primero que hice fue verme a mi misma, estaba bien, el disfraz estaba intacto, con la unica diferencia que los zapatos altos que traía la noche anterior estaban a un lado de la puerta, así que no había cometido ninguna locura.

Caminé por un corredor que me condujo a la sala, en un sofá grande vi a un chico durmiendo, por las prendas del disfraz en el suelo supe que era Matt, intenté no hacer mucho ruido para no despertarle, fui a la cocina a beber algo de agua porque mi garganta era un desierto y para mi sorpresa cuando me gire el ya estaba despierto, viéndome desde el sofá con una sonrisa bastante perfecta.

—Buenos días caperucita, por lo que veo la cicatriz del lobo ya sano —habló con un tono de voz bastante ronco

Vale, no conocía a Matt, pero asumi que fue lo bastante inteligente como para no liarse con una menor de edad—puntos por caballero... y por ese maldito abdomen tan marcado—

—Creo que se a quedado en tú almohada —hable con un poco de pena, dios ¿algún día podre hablar sin ponerme roja? —pero de inmediato lo limpio, no te preocupes

—Descuida —guiño su ojo —no pasa nada

Pero como buena cabezota que era, deje el vaso en la encimera y fui directo a la habitación con la intención de limpiar la almohada y al entrar, note algo que pase por alto al despertarme, había un aroma muy familiar en aquella habitación, no recordaba de donde, pero estaba totalmente segura que lo había olido antes.

De seguro es de Adrien, después de todo es el piso de su primo

—No, no es de Adrien, el de él es diferente… este es… muy… muy…

—¿Hablas sola?

—Matt… bueno, técnicamente no hablo sola, hablo con mi conciencia

—Pues eso, sola —sonrió y se tumbo en la cama —es bastante cómoda ¿no crees? La mía también lo es, pero es un desastre, por eso te traje aquí

—¿No es tú piso? ¿ni tú habitación? —pregunte curiosa

—Oh si, pero no solo mío lo comparto con un amigo… es nuestra casa de adquiler cuando no estamos en la universidad

—¿También es de tú amigo que te presto el club?

Matt carcajeó y eso me hizo doler más la cabeza —¿no lo sabes?

—¿El qué?

—Dios y sois mejores amigos, este piso es de Adrien…

—¿Cómo es que él tiene tres pisos? ¿y cómo es que tú y tu amigo no tenéis su propio piso?

—Bueno, digamos que Adrien si distribuye bien su dinero ahorrado, yo por el contrario soy un alma libre

Vaya, después de todo son igual de idiotas y se describen igual ¿Quién lo diría?

—Vaya, en verdad que no termino de conocerlo —parpadee perpleja —¿y tú amigo porque no tiene su propio piso?

—Lo tiene, el que esta cerca del campus, pero como sabes no estudiamos aquí… esta en otra ciudad, en Orlando

—Lo sé —blanquee los ojos —de solo pensar que el otro año inicio ahí, tan lejos de casa me pone algo melanc…

—Whoa —me interrumpió —¿irás en Edén? —asentí —menuda sorpresa, ahora tengo más ganas de seguir ahí que nunca… ¿sabias que Adrien también tiene un piso cerca de Edén?