Un beso bajo la luna© [✔]

Capítulo 21

¿Y si al final del día tú persona favorita termina siendo lo opuesto a lo que siempre creíste?

Estaba segura de lo que tenía con Matt, aún sin ser algo concreto, confiaba a ciegas en el, en lo que es, en lo que me dejaba ver, pero ¿quién lo iba a conocer mejor que su mejor amigo? ¿yo? No… tras la gran avalancha de pensamientos en pro y en contra ante las palabras de un desconocido, que aunque famoso, ante mis ojos era solo eso, un desconocido que quizá no era la mitad del chico bueno que solía decir.

Oh quizá si.

—¿Y qué se supone que debo hacer? —camine hasta quedar lo más cerca posible, disminuyendo nuestro espacio a tal punto que nuestras respiraciones chocaban entre si, olvidando el nerviosismo y los espasmos eléctricos que su presencia provocaba en mi cuerpecito… lo encare —¿debo creerle al chico que habla de su mejor amigo cuando no esta?

—No —dijo con simpleza mientras danzaba con su mirada entre mis labios, a mis ojos y viceversa —solo soy un chico intentando que su mejor amigo tenga a alguien —se aparto por un poco para inspeccionarme como si buscase algo en cada rincón de mi cuerpo —...mejor

“Alguien mejor” estoy segura de que si mi poca confianza que tenía me costaría recuperarla tras el bochornoso incidente con Bella, recuperarla después de que mi estrella favorita me considerase una bajeza, me costaría terapia.

No supe que responder, en ese instante me sentí la mayor de los parásitos en aquel cuarto de enfermería, viéndome pisoteada por aquel chico que puse en un pedestal con tan solo escuchar su maldita voz, y solo me preguntaba una cosa ¿qué coños hice? Estaba tan absorbida intentando hallar una respuesta para su frialdad conmigo que ni siquiera fui cociente en que momento había entrado Bella y Matt.

—Ya te vez mucho mejor —dijo la castaña destilado la más hermosa de las sonrisa —te eh traído algo de ropa, espero que sea de tú agrado y te quede

—Gracias —pude pronunciar después de que me eclipsara aquel chico

—¿Qué te pasa Lana? —pregunto Matt rosando mi mejilla con sus nudillos

Mi mirada entro en un baile donde buscaba los ojos del castaño y del pelinegro, en un vaivén para saber quien dice la verdad de los dos, pero no pude hallar respuesta alguna, pero al menos sabía que Matt todo este tiempo me a demostrado cuan interesado a estado en mi desde el primer “hola”.

Limitándome a ver al chico que aprendió a conocerme en escasos meses, sonreí, sonreí segura de la persona que estaba enfrente de mi, porque no juzgaría su pasado si me a demostrado que es un jodido príncipe justo ahora, en mi presente… en nuestro presente que es el que importa. Lo mire con la sonrisa más bobalicona que pude poner y me abalance a sus brazos y de puntitas pegue mis labios a los suyo, lo cual lo tomo por sorpresa, pues en meses saliendo, como mucho solo nos habíamos besado seis veces, esta era la séptima, pero por mucho asombro que tuviese, no tardo mucho en tomar mi cintura y mi mejilla, para luego corresponder aquel beso.

—Bueno —escuche la voz de Bella —creo que nosotros nos vamos ¿verdad cariño?

—C-claro

Al ver el rostro de Aidan, divisé como su rostro se contraía en una mueca que parecía gritar celos pero ¿por qué?.

Los tres salieron de la enfermería para darme la privacidad correspondiente, al ver la ropa era muy rosa para mi gusto, y un pelin muy escotada, lo primero que vi fueron unos shorts de mezclilla que al ponérmelos me quedaban muy ceñidos, pero tapaban lo justo y la blusa era muy rosita, casi creí que vomitaría un arcoíris junto a un unicornio, pero aún así era mejor que pasearme por los pasillos en sostén.