YSBLF: En sus cinco sentidos

Capitulo 1

"LA RAZÓN Y LOS SENTIMIENTOS"

 "Ya no hay una
luna que no sea espejo del pasado,

cristal de soledad, sol de agonías.
Adiós las mutuas manos y las sienes
que acercaba el amor. Hoy sólo tienes
la fiel memoria y los desiertos días."

- 1964, Jorge Luis Borges

POV BEATRIZ

La noche de ayer don Armando me había seguido al Almirante Padilla y me hizo una propuesta para que permaneciera en la empresa, dijo tantas cosas frente a Michel que yo entendí que tenían un doble sentido, aunque obviamente no creía en ninguna de sus palabras.

Michel había salido para dejarme hablar con don Armando, porque creía que me iría a Cartagena huyendo de él y de lo que siento. Aunque yo le había dicho que no tenía nada que hablar con él, que la historia de nosotros era pasado, me dijo unas palabras que no se alejaban nada de la realidad que yo tanto quería negar.

— No es pasado es presente. Es tu presente y el presente de él – dijo con mucha firmeza, como estando seguro de lo que hablaba. – Y lo que siento es que aquí hay una situación inconclusa para que esto se pueda llamar pasado.

— Pues por mi parte no tengo nada que decir – le respondí algo enojada – y sé que ya escuché demasiado – esto último fue totalmente intencional, aunque sé que sólo yo pude entender el valor real de esa frase que me recordaba todas las mentiras y las burlas de don Armando y don Mario que escuché tras las puertas.

— Betty... – comenzó a hablar, pero hizo una pausa como pensando bien lo que iba a decirme – el consejo que te doy cuando te digo que hables con el no es sólo por tí.

No sé que cara debo haber puesto porque rápidamente continuó hablando, sin permitir que mi cabeza armara sus propias teorías.

— No pienses mal, por favor, no es con ninguna mala intención de mi parte. Lo que no quiero es llevarme sólo un trozo de ti, esa misma parte que se llevó Catalina aquella vez – pensar en aquellos días me dolía – me gustaría verte disfrutar de tu nueva vida, de tu nuevo trabajo, amigos, en fin, de todo lo que te espera si decides viajar conmigo. No quiero que después de un tiempo lo lamentes.

Y la verdad es que tenía toda la razón. Desde que volví de Cartagena no le había dado la oportunidad a don Armando de hablar conmigo, realmente no quería seguir escuchando nada de lo que decía, ya que para mí eran todas mentiras, pero entendía que lo que me dijo Michel era real y tenía que hablar con él antes de irme para poder cerrar esa etapa tan oscura de mi vida, quizá sería mi oportunidad para poder sacar todo lo negativo que tenía dentro mío, pues aunque lo había perdonado esa tarde frente al mar donde me llevó doña Catalina, no había podido decirle las cosas en la cara, aunque el si lo había hecho; claro que para mí no son más que mentiras.

Apenas veo a Michel salir del bar comienzo a buscar a don Armando con la mirada, aunque entre las luces, la cantidad de gente y mi miopía no logro demasiado. Logré verlo después de algunos minutos hablando con un hombre y decido no interrumpir por si se trataba de algo personal. Cuando veo que el hombre se aleja comienzo a pararme para acercarme a el, pero descubro que este "desconocido" era nada más y nada menos que Ricardo Montaner que después de algunas palabras le pregunta mi nombre; este me habla y comienza a cantarme su canción "Bésame".

Cuando hizo que Ricardo Montaner me dedicara una canción no lo podía creer, ni en mis mejores sueños hubiese imaginado que un hombre podía hacer algo así por mí, no lo esperaba, y mucho menos que ese hombre fuera don Armando, el que tanto me hizo sufrir, pero también al que nunca dejé de amar.