𝚍𝚊𝚍𝚍𝚢 𝚑𝚘𝚙𝚙𝚎𝚛 ; 𝙗𝙮𝙡𝙚𝙧

1- Cena familiar

Hopper cortaba su filete con su cuchillo y tenedor felizmente, era el único que estaba contento en ese ambiente tenso.

–Oye, Jim...–Joyce llamó a su pareja.

–¿Sí, cielo?–Hopper contestó inocentemente.

–¿De verdad hace falta dejar a Mike comiendo  junto a Chester?–Todos en la mesa presentes, Joyce, Will, Johnathan e Eleven miraron hacia donde estaban el perro de los Byers y Mike, peleando por un trozo de carne que Chester intentó quitarle al chico. Hopper borró su sonrisa y puso una expresión molesta.

–¡No me digáis que queréis dejarlo comer en la mesa!–. Todos asintieron, incluido Mike desde el suelo, con más determinación que el resto–¡Venga ya! ¿Acaso no es suficiente con haber dejado que se quede a cenar?–. Jim le dedicó una mirada fulminante a Mike, quien se sobresaltó y se abrazó a Chester.

–¡Pero Hopper, es mi novio!–. Habló Will tratando de defender a su pareja, mirando a Jim con ojos suplicantes. Hopper no contestó, convencido de que lo estaba haciendo era lo correcto y por el bien de Will. El chico chasqueó la lengua y se levantó de la mesa.–Esto es estúpido.–Fue hasta Mike, quien se emocionó de su llegada, y lo ayudó a levantarse para emprender marcha hasta el cuarto del menor de los Byers.

Hopper acto seguido se levantó con enfado de la mesa y se propuso a ir detrás de los adolescentes, pero fue detenido por las manos de Johnathan y Joyce.
–Oye, déjalo, es un crío que necesita un poco de amor, uno diferente al que le damos nosotros... ¿Acaso tú no tuviste un amor adolescente?–Jim ante la pregunta dirigió su mirada hacia Joyce con nostalgia.

–¡Sí! Vamos, no sabes lo que han tenido que pasar Will y Mike para finalmente estar juntos.–Eleven ayudó a convencer a su padre adoptivo, recordando todo lo sucedido con ella, Mike y Will, si ella pudo aceptar lo que ella en su momento vio como traición (con ayuda de Max, mucha ayuda de Max), ¿por qué no Hopper? Aunque por experiencia sabía lo lejos que podía llegar la sobre protección del hombre.

Sin embargo las palabras de ellos dos lograron calmar un poco al jefe de policía, decidiendo no ejecutar su idea de cogerle a Mike de los pelos y revolearlo por toda la casa. Aunque su rotundo "no" respecto a su relación seguía presente. De verdad le resultaba un incordio que justamente el crío Wheeler solo le gustase conquistar a sus hijos (no tan hijos), ¿tan encantador era ese joven?

Hopper suspiró.–Les doy media hora de intimidad antes de echar a ese crío Wheeler a patadas.

Joyce y Johnathan chocaron los cinco entre sí contentos y El sonrió, al menos era un paso.