Capítulo 26 - La Defensa Inquebrantable - Una Prueba de Velocidad

39 7 7
                                    

—No puedo creer que sea tan poderoso —musitó Tezuka tratando de sentarse tras recibir el aplastante impacto de la técnica de su enemigo.

—¿Te encuentras bien? —inquirió Jaden, acercándose inmeditamente a auxiliar a su amigo.

—Tengo algunas costillas rotas, pero aún puedo combatir contra él —indicó limpiándose la sangre que corría por su labio.

—¿Estás demente? Es bastante obvio que debemos huir de aquí —expresó Cloud exaltado.

—¿Acaso creen que los dejaré escapar? —comentó Arath acercándose lentamente a la "Zona Este", donde se encontraba reunido el equipo de jóvenes.

—Parece que no tendremos otra alternativa, tendremos que combatirlo —murmuró Rin.

—Yo me haré cargo —expresó Zane con mucha confianza, encarando valientemente a su contrincante.

—¡No puedes enfrentarte a él tú solo, somos un equipo! —exclamó Tezuka.

—¡Cierra la boca! ¡Invocación de la Espada del Alma! —vociferó sosteniendo firmemente la empuñadura de su arma.

—Adelante, dejaré que me ataques con todo lo que tengas —indicó Beker caminando hasta el centro del comedor para quedarse estático mientras ojeaba las páginas de su libro.

¡Estilo de Hielo, Ventisca Helada! —pronunció invocando una imponente brisa capaz de congelar todo a su paso.

—¿Eso es todo? No me hagas reír —respondió Arath en un tono de burla, volteando su libro inmediatamente para absorber por completo la técnica con las hojas de papel.

—¿Qué mierda acaba de ocurrir? —preguntó Zane ofuscado.

—Permíteme demostrártelo, ¡Estilo de Hielo, Ventisca Helada! —exclamó, devolviéndole la técnica con la misma fortaleza a su rival.

Rápidamente, Rin jaló a Tezuka para retirarlo del rango de alcance de la ventisca, la cual perjudicó con notoriedad la movilidad de Zane, quien todavía no lograba comprender el funcionamiento del libro que sostenía su contrincante entre las manos.

—Te demostraré lo que significa darle un buen golpe a tu oponente cuando tienes la oportunidad —expresó Beker desplazando su oscuridad por el lugar, la cual poco a poco fue adoptando la forma de una jauría de perros hasta que llegó a la posición del muchacho, quien al instante fue atacado sin ningún tipo de piedad.

—¡Desgraciado! —gritó Zane, siendo brutalmente mordisqueado en el acto.

¡Estilo de Fuego, Aliento de Dragón! —pronunció Jaden, exhalando unas fuertes llamaradas que hicieron retroceder a las habilidades de Beker,

—Un movimiento interesante, muy útil para salvar a tu compañero de una muerte segura.

—¡No recuerdo haberte pedido algún tipo ayuda! —vociferó Zane volteándose con un sentimiento de enojo y vergüenza.

—Eres despreciable, acabaré contigo primero —indicó atravesando el cuerpo ensangrentado del muchacho, empleando unos tentáculos de oscuridad que penetraron la piel de sus extremidades hasta provocar que se retorciera.

—Fascinante, ese sello está a punto de liberar todo su potencial. No obstante, no es algo que me interese apreciar en estos momentos —añadió, arrojando el cuerpo de Zane a una pared en la cual impactó cayendo inconsciente.

Tierra de Héroes. El Camino del GuerreroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora