El Harem de Ash

Compras

Ash miraba a la distancia a sus 'parejas', no comprendía como en el lapso de unos días ahora estaba en una relación con la mayoría de las chicas con las que había pasado sus viajes. 

"Ash, necesitamos comprar lavadoras y secadoras para la ropa." Reclamaba Miette. 

Al oír el reclamo de la peliazul, el resto de las jóvenes se acercaron al entrenador y expresaron sus necesidades. 

Ash miraba aterrado la cantidad de electrodomésticos y utensilios que pedían, sabía que las relaciones eras costosas, pero no se imaginaba comprando una lavadora para cada una. 
"¡Momento! ¿Yo que recibiré si compro todo eso?"  Expresaba con preocupación 

"Ropa limpia, comidas, un lugar limpio y cariño de todas." Comentaba Leaf abrazando al azabache de manera tierna, provocando miradas de enojo en el resto de las chicas. 

"El no se refería a eso..." Comentaba Dawn mientras desabrochaba su falda, provocando que esta cayera rápidamente al suelo exhibiendo su ropa interior. "...el quiere carne." 

El azabache se ruborizaba y trataba apartar la mirada de las piernas desnudas de Dawn, sin embargo, sus intentos eran inútiles pues agachaba la miraba constantemente para ver. 

"Te equivocas Dawn..." Interrumpió Serena, mientras Miette se acercaba peligrosamente a su boca. "...el quiere aventuras nuevas." Murmuraban las oriundas de Kalos. 

"Es mejor ir de compras..." Expresó Ash al sentir como Leaf lentamente acariciaba su pecho y entre pierna. "...falta poco para la fiesta y no podemos presentarnos con prendas sucias." 

Koharu tenía el rostro completamente rojo, intentaba cubrir sus ojos con sus manos para evitar mirar la escena, sin embargo, su curiosidad natural le hacía abrir pequeños espacios para vislumbrar lo que ocurría. Lyra al notar la situación de la pelirroja se acerco de manera cautelosa a esta hasta quedar a espaldas de ella, coloco sus manos en su cintura y murmurando en su oído susurro;
"Deberías unirte a nosotras." Seguido de esto, dio una sutil mordida en el oído de Koharu, quien sorprendida por aquella acción no pudo evitar gritar y dar un salto hacía delante. 

Ash rápidamente se abría paso entre las chicas y tomaba las manos de la pelirroja quien mantenía aun los ojos cerrados.
"¿Estas bien?" Preguntaba preocupado el azabache. 

Koharu no pudo articular una respuesta clara, su mente y corazón se encontraban tan exaltados como para poder decir algo coherente. 
"Me debes una..." Murmuraba Lyra al par mientras se alejaba y se reunía con el resto de las chicas. 

Ash no comprendía el comentario de Lyra, hasta que noto que el ambiente había regresado a la normalidad y las chicas comenzaban a hablar sobre los artículos que necesitaban. Sin embargo, la chica frente al azabache sabía que ese comentario era dirigido a ella, así que aprovechando que todas se encontraban distraídas, Koharu se lanzo a los labios del chico, seguido de esto se alejo completamente ruborizada. 
"De...deberíamos ir ya antes que sea más tarde." 

"Quisa no debamos ser tan intensas frente a Koharu..." Murmuraba Dawn mientras veía como la pelirroja caminaba en dirección a la puerta de la casa.

"Parecían gatas en celo chicas, sean más discretas o espantaran hasta a Ash..." Comentó Yellow con burla antes de seguir el andar de Koharu. 

El resto del día había transcurrido de manera ordenada, frente a la sociedad actuaban como un grupo de jóvenes comprando muebles y ropa. Evitaron las escenas de cariños e incluso sus conversaciones solo se centraban en los pros y contras de un modelo o marca. 

Cuando fue el momento de pagar, el azabache no podía creer la cantidad de números que había en el recibo, mucho menos se podía creer que realmente su tarjeta había pasado sin problema alguno. 
"¿Cuanto puede haber en esta tarjeta?" Se preguntaba, mientras veía como un camión de paquetería era llenado de solamente los artículos que ellos habían comprado.

"Confórmate con saber que podrías hacer treinta compras de esta cantidad y aun te sobraría un extra." Comentó Serena colocando su mano en el hombro del joven, antes de comenzar a caminar. 

"¿Qué esperas Ash? Todavía tenemos que arreglar el lugar donde van a poner las cosas" Gritaba con molestia May, a lo cual Ash obedeció y camino detrás de las chicas. 

Al llegar a su hogar, todos sin excepción alguna se retiraron sus zapatos y se dedicaron a organizar las decenas de artículos adquiridos. Ash era quien por voto mayoritario se encargaba de realizar las conexiones necesarias y mover los objetos más pesados de lugar. 

"Creo que deberíamos darle una recompensa, no creen chicas..." Comentaba Dawn mientras veía como el azabache se encargaba de mover todas las cajas vacías a las afueras de la casa. 

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Perdí la inspiración, regreso más tarde a escribir (en unos días)