ZoSan AU! Arg.

017

Sanji se fijó la hora en su celular antes de guardarlo, 15:30 llegamos como a las y 50 seguro si estas caminan rápido, pensó mirando a sus amigas. Suspiró y cerró el portón de su casa.

- Señoritas.- Se acercó a sus amigas y les ofreció sus brazos, ellas simplemente sonrieron y agarraron sus brazos para caminar ¿cómo? como las viejas chismosas.

- ¿Que tan lejos queda?.- Preguntó Vivi.

- De aquí a 20 cuadras casi.- le respondió sonriente Robin.

- ¿Quéeeee? No, chicos, no.- Hizo el amague de soltarse del brazo de Sanji.

- Dalee Vivi, no queda tan lejos, pensá en Ussop y Law. Tienen más por caminar.- Se rió de la próxima desgracia de sus amigos.

- Espero que nos inviten a tomar mates por lo menos.- Se quejó en broma la peliceleste.

- Sí, obvio.- Dijo Robin- No sé si será Zoro el que nos invite, es medio descuidado, seguro Nami va a ser las que nos va a atender.

- ¿Nami? ¿Y ella por qué, son novios o algo? - Sanji juraba que Zoro daba vibes de homosexual.

- Ay, Sanji, que te importa.- comentó Vivi con una sonrisa.

- No son novios, la cosa es que Nami pasa mucho tiempo en casa de Zoro y bueno, es como de la familia, ¿me entendés? El señor Min y el señor Shanks ya la ven como una hija y Perona le tiene mucho cariño, Zoro la quiere como a una hermana.

- Es gracioso que los nombres como si los conociéramos.- Aunque Sanji ya se hacía una idea de quienes eran todos ellos.

Y así siguieron hablando, Robin contando como es la relación de Zoro con sus amigos, como se comportan y esas cosas, para que Sanji y Vivi se hicieran una de como deberían actuar con ellos, puesto que la última vez ni siquiera se habían presentado.

- Pero ojoooo - Robin acercó su dedo índice hacia su ojo. - No saben como se ponen Luffy y Zoro si le hacen algo a Nami, mamita querida.

- Luffy es el se quería ir a las piñas con este ¿no? - Preguntó Vivi.

- Esee, tiene pinta de tonto pero nada que ver, él cuida mucho a sus amigos, también me cuidan mucho a mí.- terminó diciendo eso con una sonrisa, recordando esa vez que unos se quisieron hacer los cancheros con ella. Franky largó el primer golpe y lo siguiente fue un solo quilombo.

- Con todo lo que contas te dan ganas de pegar amistad con ellos. - Vivi ya se imaginaba como sería todo.

- Viste.

A todo esto Sanji estaba bastante callado, perdido en sus pensamientos y la que se dió cuenta fue Robin.

- ¿Todo bien?

- ¿Eh? Ah, sí, estoy pensando si debería disculparme con él cuando lo vea, onda, lo saludo y.. ¿Cómo tendría que saludarlo? Con un “eh que onda?” o “hola cabeza de dibustrin”, no eso no, ¿o tendría que pedirle perdón ni bien lo vea? No, queda muy c–. Vivi le metió un codazo para que se callara.

- Pará un poquito loco, hagamos esto, entra Robin lo saluda, voy yo, lo saludo y me presento, Robin y yo nos alejamos un touch y lo saludas y te disculpas, listo no es tan difícil.

- Mi orgullo culiada... - Dijo en un falso tono desanimado.

Ellos iban a seguir de largo si no fuera porque Nico se había parado frente a una casa con rejas blancas.

- Mándale un mensaje a Zoro.

- ¿Ah?

- Sanji, está es la casa de Zoro.

- Ah.

Esto es el dibustrin o digustrin, asi le decimos por mí zona pero en realidad se llama Ligustrina NADA QUE VER JAJAJAJA