CAPITULO 17

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Estaba en la entrada del hospital.

Aún procesaba toda la información que mi cerebro había absorbido en tan pocas horas

Mi mejor amiga había sido atacaba violentamente y había acabado en coma.

Su hermana pequeña seguia agarrado mi mano, mirándome con tristeza y miedo.

-¿Mi hermanita se va a poner bien? - me pregunto la niña con los ojos inundados de lágrimas.

-Si, Daniela por supuesto que sí, tranquila pequeña, todo va a salir bien - le mentí, y me odié a mí misma por hacerlo.

-¿Enserio?

-Sii

Ella empezó a dar saltitos de alegría, saltó sobre mi y me abrazó, me susurro un tímido y dulce  "Gracias"

De fondo escuche los pasos de alguien, era la mamá de mi mejor amiga, tenia el rostro serio e hinchado por haber estado llorando.

Aquella mujer había sido como una madre para mí, su hija mayor y yo siempre estábamos juntas, éramos inseparables, siempre estábamos en su casa, jugando a las muñecas o merendado las deliciosas galletas caseras que hacia ella.

-¿Se encuentra bien? - le pregunté con delicadeza.

-Adele, ahora mismo necesito estar a solas conmigo misma - susurro ella con la voz quebrada - Mis hijas ya han sufrido demasiado con la muerte de su padre...ahora con esto es demasiado.

-Lo siento.

-No es culpa tuya, solo quiero...Soledad, meditar, pensar - miro a la niña con dolor - ¿Te importaría cuidar de mí hija durante unas horas? N..no..no quiero que me vea así de, ya sabes...asi de destrozar.

-Lo comprendo. No se preocupe, está en las mejores manos - le lancé una sonrisa comprensiva- Por la noche si le parece bien la llevaré a su casa.

-Gracias. Y perdóname que te ponga en el compromiso de cuidar a mi hija pequeña, pero no tengo a nadie más.

-No se preocupe. Me encantan los niños.

Ella me lanzó un asentimiento triste. Se despidió de su hija y se marchó.

-¿¡Podemos ir a disneylandia!? - pregunto la niña.

-No. Vamos a hacer algo mucho mejor que eso.

-¿El que?

-Vamos a encontrar al mandito causante de apuñalar a tu hermana.

-F..fu...fue un monstruo de ma noche - tartamudeo Daniela.

-Los monstruos de la noche no existen pequeña, tranquila...-le dije mientras le agarraba de la mano y empezábamos a caminar, alejándonos del edificio del hospital.

El agresor había sido un vampiro. Solo un ser tan poderoso podia hacerle tanto daño a mi amiga, hasta el punto de dejarla en coma. De no ser así, deberían ser un grupo numeroso de humanos, pues un humano normal no podia hacer eso solo.

Estubimos andando durante varios minutos,  llegamos hacia unas calles estrechas y solitarias...

-Mi hermana Tara estos últimos días estaba distinta, la notaba nerviosa,con miedo a algo...

-O a alguien - termine de deducir yo - ¿Alguien la seguía o la acosaba? ¿Entonces ella conocía a su agresor o estaba amenazada?

La niña se encogió de hombros y miró con tristeza al suelo al no tener una respuesta que decirme.

-Bien, vamos a ir a todos los sitios donde estuvo tu hermana mayor el mismo día que se quedó en coma. Para averiguar pruebas o pistas - dije, pero justo en ese instante mi teléfono empezó a vibrar.

"HASTA LA ULTIMA GOTA" ✔ #1VAMPIROSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora