Boruto la sujetó en sus brazos sin saber si en realidad estaba hablando en serio o si había perdido la razón. Ella lo abrazaba con tal intensidad que él, por unos instantes, se olvidó de todo para vivir aquel maravilloso momento junto a esa hermosa aristocrática damita tan tozudamente terca.
Tanto Madame Mariposa como su padre tenían razón. No se arrepentía de haberse quedado. Cuando ella olvidaba el dinero y a la casa de acompañantes era la chica idea para él.
Sarada sentía que le quitaban un peso de encima ya que había estado angustiada todos esos días al ver que Boruto era tan tierno y amable y sin embargo muchas lo habían tocado. Ella era bastante posesiva con quienes eran importantes en su vida. En eso se parecía a su madre. Ambas exigían que su padre sea solo de ellas y de nadie más. Lo querían demasiado las dos como para compartirlo con otras.
Este mismo sentimiento se había adueñado de su persona tratándose de Boruto, la angustiaba saber que podrían reconocerlo mujeres de diversas edades que pasaron por la cama de ese hermoso rubio. Pero ahora al saber que él no se vendía a nadie y que no se arrepentía de haberse quedado la emocionó al punto de arrojarse a sus brazos.
Ambos quedaron nariz contra nariz en un romántico silencio sintiendo solo el latido de sus propios corazones, sus respiraciones se entrecortaron. Boruto la fue acariciando con extrema lentitud y ella cerró sus ojos para poder sentir mejor sus caricias.
Sarada rodeó el cuerpo de ese rubio con sus brazos mientras sentía cómo él la presionaba contra su miembro que empezaba a endurecerse para mayor asombro de la joven. El beso llegó casi al instante siguiente, sus lenguas entre chocaron, buscando en la boca del otro, rozando las paredes y explorando para encontrar después.
Fue el mejor de los besos que ella hubo experimentado. Al fin se sentía amada y deseada, aquella sensación era en verdad maravillosa ya que la soledad y la tristeza desaparecía de su ser al completo.
Aquello solo podía lograrlo Boruto. Ese hermoso chico que brillaba como el mismísimo sol. Cuando se separaron él seguía mirándola con intenso amor deseando que sea ella quien lo ame aunque podía darse cuenta que Sarada estaba enamorada de él, solo que aún no lograba entenderlo del todo.
Precisamente era aquel sentimiento que había despertado en ella lo que la hacía exigirle amarla y pedirle que se quede a su lado siempre. Pero Boruto era alguien muy peculiar en cuestiones del corazón.
Ese rubio era un apasionado del romance y de los detalles, por tal razón no entregaría su corazón a nadie hasta estar seguro al completo de que era correspondido y valía la pena.
El sabía que esa damita aristócrata valía la pena y que lo amaba, pero lo había lastimado mucho en su intento por conseguir el amor con su dinero.
Todavía le dolía al saber que lo hubo tratado como una perra arrastrada que se vende al mejor postor. Boruto era muy sensible y era esa sensibilidad la que lo hacía creer en el amor esperando de la otra parte reciprocidad.
-No quiero hacerlo ahora Sarada, no aún
- Entiendo - ella se sintió melancólica debido a que malinterpretó la razón de su rechazo.Boruto sonrió al ver aquello en ella, en verdad esa damita aristócrata no sabía ni podía mentir
-Al parecer no lo entiendes, no pienso tomarte hasta saber que en verdad tú me amas-¿Qué?
-Te dije que jamás me vendí a nadie y no planeo empezar a hacerlo. Además el romance es lo más importante para mí.-Amas los detalles ¿verdad Boruto?
-Veo que vas entendiéndome, sí adoro los detalles.
-Igual yo ¿sabes? Pero nunca encontré a alguien que pueda ni quiera entenderme en verdad.
-Yo tampoco....hasta ahora.
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Amor Inesperado ~ BoruSara ~
RomanceSarada Uchiha es una joven aristócrata que anhela vivir un amor tan intenso como verdadero, así como les sucedió a sus queridos padres. Y para eso decide buscar ese amor en la agencia de acompañantes de Madame Mariposa. Sin embargo pronto descubrir...