10 VUELTAS AL SOL | JINLICE

EXTRA

La música en ese punto de la noche está talándome la conciencia, aquella misma que prometí seguir con la firme determinación de mi alfa pudiese confiar en que me mantendría segura y alerta. Cosa que hasta el momento estoy empezando a dudar, todo me da vueltas, pero no puedo detenerme.

Esa combinación extraña entre tranquilidad, éxtasis y adrenalina me provoca seguir moviendo el cuerpo y caderas, aunque esté agotada físicamente. La atmosfera es divertida y calorosa porque todos parecemos estar igual de animados dentro de la pista moviendo los traseros y saltando en sincronía con la tonada que él dj parece seguir con la alabanza del público

– Malditos cerdos, para eso hay cuartos. – incluso, en ese punto del reclamo y regocijo sentí arrastrar mis propias palabras dentro de la garganta.

Mi boca entumecida aun guarda el sabor de los cítricos que algunos mojitos atrás tuvieron protagonismo en la recién llegada al club. Esos tragos estuvieron tan buenos que perdí la cuenta después del décimo, no era esa clase de persona quien le gustara abusar del alcohol, pero, mayor fue mi sorpresa cuando me percaté de que he hecho exactamente lo que prometí no haría, no es mi culpa que la coctelería fuese fielmente embriagante y para acumular mi desgracia, mi hombre se ha quedado en casa por cuestiones de "trabajo",dejándome con las jodidas ganas de bailarle en un privado.

Por que sí, mi mejor amigo me ha advertido de las "habitaciones especiales" que posee el club para parejas quienes quisieran llevar la diversión a otro lugar. Mi omega deseaba incitar a su alfa y por primera vez, quizás, hacerlo perder los estribos debajo de ese rostro maduro y sereno que logra apaciguar mis más crudas tormentas.

Me encanta provocar a SeokJin

Pero el muy desgraciado parece tener buen control, a pesar de que he practicado frente a él durante los últimos tres días. Pero todo se ha ido a la mierda por esa estúpida "reunión" que mantendría con socios en diferentes partes del mundo.

– Estúpida diferencia de horarios. – refunfuñe recordando su muy sensata respuesta, la cual me obligó a desistir de mi muy elaborada y chantajista petición

"Tengo que quedarme en casa Lisa, entiende que quiero darte el mundo entero si es necesario princesa" quizás en ese punto fue cuando asentí como estúpida enamorada bajo la atenta mirada avellana del hermoso hombre sabiendo que una vez más, como siempre, Seok Jin ha ganado la discusión.

"Mi trabajo desgraciadamente no espera, así que no podré acompañarte al cumpleaños de Taehyung". . Con el timpo la relación con mi mejor amigo se volvió apacible, despues de dos años ellos ahora podían hablar sin alguna clase de conflicto por en medio.

– ¿Sucede algo Lili? – Taehyung ha visto detenerme

– Lalisa está de mal humor porque su alfa aburrido no quiso acompañarla. – Jimin, su novio, siempre suele burlarse de mí. A pesar de ser amigo de mi alfa y Jin ser su jefe, quizás sea el único en quien confía y por eso no se ha mostrado tan dramático ante esta <<salida social con amigos>>.

– Ni me lo menciones, más te vale no causar problemas o de lo contrario yo terminaré muerto si algo le pasa a "su preciosa flor". – trató de imitar lo grueso de su voz.

La preocupación del alfa hacía mí me encanta, siempre suele darme un sermón de lo que debo o no hacer. Tomar mis precauciones y sobre todo asegurar que me divierta sin inconvenientes.

– Oppa es el mejor. – mi alfa es todo lo que siempre quise y al fin tengo.

Pero lamentablemente no todo ha sido color rosa, aun nos mantenemos aprendiendo del otro y tratando de sobrellevar las grandes diferencias en nuestro carácter y estilo de vida. Es difícil porque somos como polos opuestos tratando de encajar en una categoría completamente distinta, mientras yo solo quiero tenerlo en todos los aspectos, el me trata con paciencia y comprensión.