El Sendero: Lo que nadie ve

Estruendo

—¿Taehyun? ¡¿Taehyun, estás bien?! 

Ambos se encuentran en el suelo boca abajo, sin poder levantarse, parece como si una gran fuerza de gravedad los quisiera enterrar en la tierra. Beomgyu llama al chico desconsoladamente. Tiene la cara magullada.

—¿Beomgyu? —lo llama abriendo lo que puede los ojos.

—¡Taehyun! ¡Tranquilo! ¡Te sacaré de aquí y...!  —exclama hasta escuchar un estruendo proveniente de arriba.

Beomgyu solo podía mirar al menor, al cual ve, en primera persona, cómo le cae un objeto gigante extraño en la cabeza, pudiendo observar cómo pedacitos de la misma salen disparados llenándose todo de sangre. Solo quedaba unido a su cuerpo media mandíbula y piel de la cara. Los sesos llegaron a manchar el rostro de Beomgyu y este se desmaya.

—Beomgyu, despierta.

Se encontraba tiritando y respirando angustiado.

—Oye, ¿estás llorando? Beomgyu...

Cuando percibe que alguien se le acerca, se despierta alterado.

—¡¡¡TAEHYUN!!!

Se incorpora rápidamente quedándose sentado para abrazar al contrario fuertemente.

—Ey, me estás ahogando —dice con voz entrecortada.

Cuando lo suelta un poco, Taehyun sigue el abrazo.

—¿Has tenido una pesadilla? —pregunta con un tono más dulce de lo normal aún juntos.

—Mm —afirma con agonía y un nudo terrible en la garganta.

Al menor solo se le ocurre calmarlo acariciando su cabello, pero es demasiado tímido incluso para hacerle eso a amigos de la infancia.

—Estás vivo —dice mientras se separa para agarrar sus hombros y comprobar que esté bien.

Taehyun se queda impactado. La situación es cada vez más rara, conoce a un chico, se hacen amigos y, ¿ahora esto? No sabe qué decir ni qué hacer.

—Cayó algo de arriba... —explica mientras mira el cielo encima de sus cabezas.

Justo cuando va a mirar Taehyun, extrañado de que no terminara su frase, Beomgyu lo empuja hacia atrás, dando así dos vueltas rodando por el suelo, asegurándose de que no salen lastimados. En lo que ruedan, el estruendo del sueño se repite y, con ello, una viga de metal gigante caída de la nada.

Beomgyu queda encima suya y se impulsa con los brazos en el suelo para quedar sentado.

—Parece que me vayas a ahogar —bromea intentando quitarle importancia a las cosas horribles que ocurren desde que están ahí, cosa que funciona un poco.

—¿Estás bien? —pregunta el mayor.

—Sí, estoy bien, no te preocupes. ¿Y tú?

—Creo que bien —responde para quitarse de encima y tenderle la mano para ayudarle.

Ambos presentan rasguños causados por las piedras del camino en las piernas y Beomgyu en los brazos. Se colocan bien la ropa y se acomodan el cabello.

—Eso es lo que pasó en mi sueño —comenta señalando la viga de metal.

En su sueño, pensaba que era una caja oxidada, pero resultó ser una ilusión óptica por toda la sangre que había y lo tremendamente horrible que se encontraba.

Le vienen recuerdos al pensar esto y comienza a ver la escena desde su punto de vista actual intercalándose con la realidad, así como una especie de glitch, provocando que se lleve las manos a la cabeza y grite.

—Tenemos que salir de aquí —piensa Taehyun en voz alta para ayudar a su amigo a caminar hacia donde se ve la carretera más próxima.

(15 minutos más tarde)

—Necesito parar —pide Beomgyu separándose.

—Está bien, no sé cuándo llevamos caminando, estarás cansado.

Se sientan en el suelo, pues todo lo que había era tierra y matojos.

—¿Alguna vez has viajado a otro país? —pregunta intrigado el mayor.

—No, nunca. Me gustaría hacer un viaje.

—Es muy guay, yo fui en 2022 a... —Taehyun le corta la frase.

—¿No estamos en 2022? —le cuestiona pensando que fue este año y no dijo literalmente «este año».

—¿Qué? ¿Cómo que 2022? Estamos en 2026 —contesta pensando que se confundió sin querer.

—¿Es una broma?

—¿Te parece que bromearía?

Ninguno de los dos cree al contrario hasta que piensa Taehyun en voz alta.

—Con la de cosas que están pasando, no me extrañaría que ambos viniéramos de tiempos diferentes.

El silencio reina en el lugar hasta que ambos se sorprenden al mismo tiempo.

—Llegamos hoy los dos, ¿cierto? —vuelve a intervenir el menor.

—Ajá —responde únicamente por tanta saturación.

En ese momento, ven acercarse a ellos otro chico. Cuando este los ve, corre hacia ellos.

—¡Hola! —saluda desde unos metros de distancia con una sonrisa —Me llamo Soobin, ¿y vosotros?

—¡Hola!

—Hola —saluda Taehyun con un tono más apaciguado que los anteriores que casi pasa desapercibido.

—Yo soy Beomgyu y él es Taehyun —se presenta para tenderle la mano.

Soobin se queda mirando la mano de Beomgyu a punto de entrar en pánico, por lo que aparta la mirada.

—Lo siento,  padezco de hafefobia —se disculpa el nuevo.

—¿Eso que es? —pregunta Beomgyu dando un paso hacia atrás por si es contagioso, a lo que los otros dos ríen por su reacción.

—Pánico al contacto físico, ¿cierto?

Soobin afirma con la cabeza avergonzado.

—Ahora te tienes que acostumbrar a dos personas altas —dirigiéndose al menor.

—No, ahora eres tú quien se tiene que acostumbrar a alguien más alto que tú —se burla.

Beomgyu grita jugando para seguir la broma y todos ríen. Esto hace que Soobin entre en confianza.