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El primer día no estuvo tan mal, digo, para ser el primer día, quien sabe cómo estarán los demás días.

Al salir de la escuela no veo el auto de mi madre ni el de Nate, así que decidí caminar hasta casa, me puse los audífonos y fume un poco de mi vape que estaba a nada de acabarse.

En el trayecto miro un auto que venía muy cerca de la acera donde venía yo, miro de reojo pero no reconozco bien el auto.

Camine un poquito más rápido pero el auto me rebaso hasta quedar cara a cara con el conductor.

—Oye linda, ¿No gustas que te lleve a tu humilde hogar?— paro mi caminata y miro a los ojos a esta persona.

—Me encantaría que me llevarás pero lo que pasa es que no quiero llegar a casa, tal vez y yo pueda quedarme un rato en tu casa— me acercó a la ventana y me agachó hasta quedar a la altura de la persona. —No quiero causar problemas ni molestias, solo quiero estar un rato con mi novio—

Fezco besa mis labios y al terminar se queda con una sonrisa haciéndome sonrojarme.

—Para mi nunca sería una molestia tenerte a mi lado, sube nena—

Doy la vuelta al auto hasta quedar en el asiento delantero y lo abrazo, Fez me lleva hasta su casa pero antes de bajarnos del auto me toma de la pierna.

—Antes de entrar, quiero darle un buen beso a mi novia, porque se que entrando ya no tendremos la misma privacidad que antes— se acerca y me besa, sin despegarme, recuerdo que estaba viviendo Faye en la casa de Fez, era un favor, y no podía decir nada.

Al separarnos, entramos a casa, Fezco me tomaba de la mano y le avisaba a Ashtray que ya había llegado.

—Ash, ya llegué— El niño sale de su habitación con un arma. —Mierda Ash, ¿Qué te eh dicho sobre eso? No enfrente a Stella, esconde eso hermano—

—Lo siento Stella— El niño aguarda el arma y viene a saludarme dándole un abrazo, el cual gustosamente acepto.

Estuvimos toda la tarde hablando, Faye salió de dónde dormía drogada, y decía muchas tonterías, se caía y la levantabamos del suelo, al anochecer, la llevamos hasta su cama a dormir, estaba muy mal y me tocó ayudar a Fezco.

La chica agradeció a como pudo y decía que Fezco era muy bueno para mi, y que me lo merecía mucho, cosa que agradecí a la chica y la tape con una sabana.

—Te llevo a casa— Fez me llevo hasta casa, me despido rápido de el y baje de auto.

Camine hasta la entrada, al abrir la puerta veo toda la casa oscura y supuse que estaban dormidos, pero me equivoqué, camino a la cocina por agua y veo a Cal sentado en la mesa.

—Espero que te hayas divertido con ese matón Stella— se levanta de la silla y toma un sorbo de su Wisky.

—Si me divertí bastante—contesto en tono sarcástica y me acercó a la cocina, tomo un vaso y lo lleno de agua, la bebo y miro su rostro de disgusto.

—Espero y te sigas divirtiendo con el Stella, aprovéchalo mientras dure, descansa—

Deja el vaso y camina hasta su habitación.

El pensamiento de que tal vez y ya descubrió que fue Fez se metió a mi mente, y ahora no iba a poder dormir de la angustia que sentía.

Cal me había advertido o amenazado no directamente, y temía por eso.
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