Luna Nocturnal [Zhuiling / Omegaverse]

Capítulo 9: Dos detectives causan problemas en el barrio rojo.

Como era de esperarse, todo salió mal.

—¡No puedo creer que arruinarás esto!.

—¡Cierra la maldita boca y corre, maldito intento de alfa!

Sí Jin Ling enlistara sus errores, comenzaría con el haber apuntado a la cabeza de Xue Yang a la mitad de un prostíbulo en donde a nadie le agrado su presencia, y terminaría con el haberse sido tan descuidado para exponerse tanto, al punto de haber tenido que ser salvado por el idiota a su lado.

—¡T-tú!...¡Agh! ¿¡Porqué SiZhui te aprecia tanto si solo eres una joven amante caprichosa!?.

Al doblar en la esquina, lo poco que restaba de la paciencia de Jin Ling se fue al desagüe y sin importarle que unos matones estuvieran detrás de sus cabezas, tacleo del cuerpo de Lan JingYi hacia la pared de concreto en el callejón— ¿¡A quién llamas "amante caprichosa"!?.

—¡Esa pregunta es extraña! ¡Por qué no veo a ningún otro además de ti!.

Los labios de Jin Ling se torcieron con acidez antes de encajar otro puñetazo hacia la mandíbula del alfa. JingYi no estaba listo, así que el golpe lo tomó con la guardia baja.

—¡Oh, demonios!... ¿¡Estás demente!?.

Como respuesta, un segundo golpe fue dirigido hacia él, pero esta vez JingYi esquivó a tiempo y adoptó una posición de ataque.

—Tú comenzaste; recuérdalo Joven amante.

«SiZhui, no te molestes por esto».

Todo comenzó más temprano, tan solo cuarenta minutos después de qué Jin Ling se adentrara al famoso barrio rojo de Beijing.

Lo que parecía ser la fachada de un pequeño complejo departamental de tres pisos en total, resultó albergar en su interior a una de las casas verdes con más fama en la ciudad.

Jin Ling mantuvo una vigilancia continua por un radio de veinticinco metros al edificio; haciendo anotaciones mentales sobre cada posible vía de escape, cuántos hombres armados hasta los dientes rondaban, las cámaras de seguridad que monitoreaban las entradas y salidas. Ridículamente, el área era custodiada más que la misma comisaria de policías.

Las probabilidades de salir ileso eran desalientadoras.

Finalmente, desde el otro lado de la calle del burdel pudo ver a la figura de Xue Yang abrirse paso hasta al lugar; y solo trece minutos después, el omega le siguió al interior.

Tuvo una pequeña dificultad en la entrada, donde dos guardias lo retuvieron más de la cuenta. Por suerte, existía un plan para esos pormenores llamados Alfas.

Un plan llamado "sacar ventaja de tu segundo género".

El abrigo que antes cubría su curvilíneo cuerpo había sido abandonado en un callejón, su coleta alta fue deshecha y permitía a su cabello suelto ondear con el viento. Solo hizo falta sumar a esos factores un batir encantador de pestañas junto al exponer su cuello níveo sin ningún tipo de marca de pertenencia para que esos gorilas lo dejaran seguir.