si me quieres... que sea de verdad

Capítulo 12

Justamente después de 20 minutos, salgo al salón de la mano de mi "amigo", me ha preparado él la ropa, llevo unos vaqueros entallados blancos, una blusa color fucsia un bolso blanco y un collar del reactor arc de mi querido iron man, esta ropa no me queda bien, se lo he dicho a Marcos pero no me ha hecho ni caso, cuando llego a donde están todos, me miran, lo sabía, estoy horrenda, Álex se acerca y coge mis manos, tras un leve escaneo de mi cuerpo me mira a los ojos y sonríe

ÁLEX: preciosa... simplemente preciosa- se lleva una de mis manos a su boca y la besa con ternura... ¿preciosa? ¿es miope?- despídete de tus amigos y nos vamos- dice con una sonrisa

CRIS: adios, chicos- se despiden de mí y salimos de casa, Álex no ha soltado mi mano desde que se ha apoderado de ella en el salón

ÁLEX: ¿a dónde quieres ir?- lo miro, me mira

CRIS: no lo sé, donde te apetezca- me encojo de hombros y él sonríe

ÁLEX: ¿te apetece que cocine yo?- ¿en su casa? ¿solos?

CRIS: yo no...

ÁLEX: oh, vamos, te prometo que mi comida es comestible- río y él conmigo, al final accedo a ir a su casa

Me abre la puerta de su casa y se aparta para que pase primero, le sonrío tímida y entro, es una estancia muy amplia y hermosa, en tonos blanco y negro, muy elegante, un sofá en U abarca gran parte del salón y una pantalla de unas 50 pulgadas adorna la pared

ÁLEX: ¿te apetece comer algo en especial?- lo miro, ha cerrado la puerta y se ha remangado la camisa, tiene los brazos cruzados y me observa atentamente

CRIS: m-me(aclaro la voz) me da igual- digo bajando la vista, escucho sus pasos acercándose y mi mente se traslada a mi antigua casa, a Fernando, empiezo a temblar, doy un pequeño salto cuando me tocan el brazo, miro y Álex me mira preocupado

ÁLEX: ¿te encuentras bien?- asiento temeraria- ¿segura?- vuelvo a asentir- y entonces...¿por qué no te creo?- me lleva al sofá, nos sentamos y envuelve mis manos entre las suyas

CRIS: estoy bien- susurro

ÁLEX: estás temblando y no creo que sea por el frío- aparto la mirada, pero en seguida vuelve a hacer que lo mire girando mi mentón con suavidad- cuéntamelo, ¿te sientes incómoda?- asiento, me mira pensativo- ¿es por mí?- niego

CRIS: no eres tú, soy yo que estoy muy jodida

ÁLEX: sobre eso... emm... cuando te conocí dijiste que eras divorciada, pero después dijiste que seguías casada

CRIS: quiero el divorcio... pero el todavía no lo sabe, aproveché que se había ido de viaje para escapar de él... tengo un mes de libertad

ÁLEX: entiendo...¿por qué quieres divorciarte? si se puede saber, claro- vuelvo a bajar la mirada, pero no por mucho- mírame- dice suavemente

CRIS: él... cambió cuando nos casamos... dejé de quererle- el recuerdo de cada una de sus palabras hirientes llega a mí y todo el dolor físico y mental que he sufrido gracias a él me invade

ÁLEX: hey... no llores nena- me abraza y me derrumbo, acaricia mi pelo y me susurra palabras relajantes, poco a poco mi respiración se normaliza y dejo de llorar

CRIS: lo siento- me separo de él y seco mis lágrimas, mis manos son reemplazadas por las suyas que acarician mis mejillas con suavidad, mi mirada se encuentra con la suya y me sonríe cariñosamente

ÁLEX: no te disculpes preciosa- sonrío tímida-veo que no quieres hablar de ese tema ¿me equivoco?- niego- vale, espero que me lo cuentes cuando estés lista, pero ahora tengo una duda

CRIS: dime- ahora es él el que baja la mirada

ÁLEX: ¿qué hice mal esa noche? creo que todo iba bien- hago que me mire

CRIS: eso... también fue culpa mía- me escucha atento- no debí haber preguntado por tu trabajo

ÁLEX: ¿qué tiene de malo mi trabajo?- me mira curioso

CRIS: mi marido también es abogado

ÁLEX: oh, vale. Entonces puede que yo lo conozca, ¿cómo se llama?

CRIS: no quiero hablar de él Álex, por favor- asiente con una sonrisa y besa mi frente

Pasan dos semanas, todos los días paso la tarde en compañía de Álex, lo pasamos bien, reímos, hablamos, no ha vuelto a tocar el tema de mi marido, cosa que agradezco mucho, me estoy preparando porque esta noche ceno en su casa y va a volver a recogerme

MARC: NENA! HA VENIDO TU AMOL A BUSCARTE- voy al salón y encuentro a Álex riendo con Marcos en el salón, Marc siempre hace este tipo de bromas cada vez que viene a buscarme Álex

Llegamos a casa de Álex y como siempre, cocinamos algo mientras jugamos en la cocina, nos sentamos en el sofá a comer y luego hablamos acompañados de una copa de vino sentados con los pies en el sofá frente a frente, nuestras rodillas se tocan y ese contacto tan simple me hace feliz

CRIS: Álex- me presta atención y hace ese típico ruido suyo que usa cuando me escucha- sobre mi marido...- ahora si que tengo toda su atención, apura su copa de vino y la deja sobre la mesa antes de volver a su posición inicial y asentir para que prosiga- mi marido no es un santo

ÁLEX: ¿a qué te refieres?

CRIS: supuestamente está de viaje de negocios, pero hace unos años que sé que tiene una amante, ahora mismo debe de estar con ella

ÁLEX: y es por eso que quieres divorciarte, lo comprendo es un imbécil por haberte sido infiel

CRIS: no, no es por eso, la verdad es que agradezco el tiempo que pasa con ella- pone cara de no entender- Álex... mi marido me maltrata- digo sin mirarlo