Mi bendito desastre [+18]

Capítulo 40.

No quiero la estúpida realidad. ¡No la quiero!

Addie

Eithan ha permanecido a mi lado toda la noche. Hemos hablado de todo lo ocurrido y ha sugerido que descanse pero simplemente es lo que menos puedo hacer ahora. No quiero dormir, no podría hacerlo después de haber arruinado lo que más he amado.

A Asher.

Me acurruco más contra el pecho de Eithan. Besa mi sien, recoge pequeños mechones retirándolos de mi rostro, sollozo aún más fuerte recordando la cita. Recordando la manera en que Asher se comportó conmigo, lo feliz que estaba a mi lado y luego... Y luego destruí lo que teníamos. Destruí la confianza que había depositado en mí. Los pequeños avances que estaba dando. 

Lo arruine todo.

—Él me odia —repetí por tercera vez sintiendo la camisa de Eithan húmeda por mis lágrimas— Él... me-me odia, Eithan...

Continuaba acariciando mi cabello.

—Asher no te odia —suspiró— él no podría y tú lo sabes, Addie. Debes entender que ahora mismo no eres su persona favorita en el mundo, sin embargo, eso no significa que sus sentimientos hayan cambiado por ti pero ten en cuenta que lo lastimaste.

Lo lastime a él y a mí misma. Asher puede pensar que soy un monstruo, que soy la peor persona sobra la faz de la tierra pero esto lo hice por él y por nadie más. 

Estar conmigo no le hará bien...

Eithan volvió hablar: —Vamos, cariño, debes descansar —se inclinó levantándome en el proceso a tal manera que lo mirara, acuno mi rostro con ambas manos —estas preocupándome, no voy a dejar que te destruyas a ti misma. —Sus ojos recorrieron mi rostro —Tus ojos están inflamados porque has llorado más de tres horas, no has comido nada, no quieres descansar. Estás mal, Addie.

Sé que estoy mal, lo he estado toda mi vida.

—No quiero dormir, Eithan —las lágrimas se detuvieron, observe a un punto en la nada —solo abrázame por favor, solo abrázame —pedí volviendo a esconder mi rostro en el pecho.

—Toda la vida si quieres —respondió

¿Esto podría ser un mal sueño? ¿Podría nunca haberle dicho todas las cosas horribles que dije? ¿Asher va a odiarme toda la vida? ¿Cómo será de ahora en adelante?

[.]

Las horas pasaron, no pude dormir. 

Amaneció en un pestañazo, los rayos de sol colándose por la ventana. Cada mañana cuando abría los ojos, Asher me observaba con una sonrisa de oreja a oreja. Se inclinaba besando mis labios, dándome un lindo despertar. Se burlaba diciéndome que parecía un espantapájaros y que roncaba como camionero pero era su sentido del humor, ahora la cama estaba vacía, no estaba su olor. No estaban sus cosas. No me recibiría con una sonrisa. No estaba él y ya no lo estaría más.

Ya no estaría para mí.

Retire la sabana que me cubría. Eithan no estaba por ningún lado, volví a sentirme sola. Me abrace a mí misma repitiéndome no llorar más y aunque quisiera hacerlo no salía nada porque estaba seca. Demasiado seca. El dolor de cabeza estaba matándome al igual que la sequía de mi garganta.

Observe todo a mi alrededor, sentí un frío recorrer cada parte de mí. La tristeza no me abandonaba, permanecía ahí. Era un sentimiento espantoso. Era como que después de tener todo ahora tendría nada y eso era lo que merecía: Nada.